Es importante tener en cuenta algo clave: la autoconfianza consiste en tomar el control, actuar. Muchas personas que quieren tener más autoconfianza desean que sus vidas cambien. Desearían que su jefe les apoyara más, que su esposa fuera más cariñosa. Desearían tener más tiempo o dinero. Desearían haber hecho algo diferente en el pasado o que alguien les hubiera dado una oportunidad.
Pero, a menos de que poseas al genio de una lámpara mágica o a un hada madrina, desear las cosas no es buena estrategia. Tu jefe no va a apoyarte de forma espontánea —tendrás que trabajar para conseguirlo o buscar otro trabajo con un jefe más comprensivo. Si no tienes suficiente tiempo o dinero (¿quién lo tiene?), depende de ti el reservarte un poco más de tiempo de ocio o el ahorrar un poco de dinero extra. Si tú no haces que pase, no va a ocurrir solo.
Te lo ruego, por favor, ¡no te dejes llevar por el juego de los deseos! Si has estado deseando cosas, esperando o guardando esperanzas en el pasado, está bien. Ahora, valóralo. En vez de esperar más a que cambien tus circunstancias y eso te dé más autoconfianza, ¿por qué no sales a buscarla?
Estoy seguro de que has oído hablar de personas que han triunfado a pesar de la adversidad. Personas que han sufrido pobreza extrema, incapacidades físicas o enfermedades terribles y, aun así, han conseguido superar sus dificultades y triunfar. Podrían haberse rendido a su desgracia y haberse quejado: “Si mi padre no me hubiera rechazado…” o “Si el cáncer no me hubiera atacado…”. Pero no lo hicieron. Y la lección que debemos aprender de ellos es que puedes triunfar a pesar de cuáles sean las circunstancias. Muchas personas tienen un pasado muy doloroso y, aun así, consiguen superarlo. Sé el capitán de tu propio destino. Decide, sin más, actuar.
Piensa en tu propia situación durante un momento. ¿Qué te está atando ahora mismo? Quizá, ¿la falta de tiempo, una situación difícil en casa o un jefe poco comprensivo? ¿Una infancia dura o la falta de estudios? ¿La carencia de dinero, un brote de enfermedad o mala forma física? En vez de verlo como obstáculos insorteables que te impiden tener más autoconfianza, puedes verlo como retos que superar.
“Todo hombre es el arquitecto de su propia suerte”.
Proverbio
El miedo no te matará
Por supuesto, puedes sentir miedo al pensar que tienes que enfrentarte a tus problemas. Sin embargo, no olvides que los sentimientos no son la realidad. Tus preocupaciones pueden parecerte interminables y causarte mucho sufrimiento, pero tus preocupaciones no son más que una trampa que te está tendiendo la mente. Sentirse preocupado, ansioso, asustado, triste o cualquier otra cosa, no te matará. Tenemos suerte porque, en el mundo moderno, la mayoría de las cosas que nos asustan no suelen ser mortales. De hecho, lo peor que te puede pasar rara vez es tan malo como tu imaginación te sugiere.
TU TURNO
Piensa en tu propia experiencia:
_ ¿De todo lo que has hecho en tu vida, qué te ha dado más miedo?
_ ¿Cómo salió?
Quizá hayas estado muy preocupado por tener que hacer un examen, hablar con alguien o asistir a una reunión crucial. Tal vez te enfrentaste a algo que hizo que te temblaran las rodillas, como hacer puenting. Puede que hayas tenido largas noches de insomnio antes y, al llegar el gran día, te pusieras muy nervioso. Pero, ¿cómo salió? Probablemente, no tal mal como pensabas que saldría. ¡Y el hecho de que estés leyendo esto demuestra que sobreviviste para contarlo!