Pon énfasis en tus fortalezas. Concéntrate en lo que eres capaz de lograr y recompénsate por tu coraje y tu voluntad en lugar de concentrarte en los resultados. Partir de la base de cosas que eres capaz de hacer en lugar de pensar en lo que deberías estar haciendo te ayudará a vivir y a trabajar dentro de tus limitaciones.
" Háblate a ti mismo. Examínate y practica cómo manejar las situaciones y aprende a contrarrestar las negativas. Aprende a detenerte cuando encuentres que tus procesos mentales están haciendo presunciones negativas. Por ejemplo, cuando estés en búsqueda de la perfección, dite que no todo puede hacerse en forma perfecta. De esta manera, podrás creer en ti mismo/a al tiempo que comienzas a transitar el camino que te lleva al perfeccionamiento personal.
" Evalúate. Practica cómo evaluarte en forma independiente. Esto te permitirá evitar esa sensación persistente de confusión que sobreviene cuando confías plenamente en las opiniones y juicios de los demás.
" Asume esos riesgos. Cuando enfrentas y aceptas las experiencias como instrumentos de aprendizaje en lugar de considerarlas posibilidades de ganar o perder, las nuevas oportunidades se presentarán más facilidad, y esto puede desarrollar una sensación de aceptación y confort en tu interior. Recuerda, la autoconfianza puede ser desarrollada, no heredada. El temor puede ser superado porque tú tienes la confianza y la fe necesarias para hacerlo.