La técnica budista de Mindfulness (atención plena), cada vez está ganando más adeptos, no sólo por los grandes beneficios que aporta, sino porque su técnica condensa el conocimiento ancestral arraigado en países como India y lo traduce en una práctica cercana y más accesible para los habitantes de los países occidentales.
Los estudios realizados por el doctor Jon Kabat-Zinn y su programa de reducción del estrés de 8 semanas sirven como referente para la nueva forma de entender la medicina y la sanación.
Dentro de este programa, lo primero que se practica es el contacto con nuestro propio cuerpo, lo cual puede parecer algo sencillo a priori, hasta que nos damos cuenta de lo desconectados que estamos de él, y los riesgos que esto conlleva .
Los estímulos, las emociones, los pensamientos, activan nuestro sistema nervioso e inmunológico entre otros, y si no somos conscientes de nuestras emociones y pensamientos, estos se pueden convertir en la causa de nuestro estrés y malestar interno.
Si no desarrollamos la capacidad de sentir nuestro cuerpo, de ser conscientes de lo que estamos introduciendo en él, corremos el peligro de llenarnos de emociones negativas que seguramente generarán una respuesta en forma de enfermedad.
Por ello, la técnica de Mindfulness comienza por la conexión con nuestro cuerpo porque esta conexión nos sirve para situarnos en el presente.
Si enfocamos nuestra atención en una parte del cuerpo, rápidamente nos situaremos en el presente, y dejaremos de divagar en el pasado y/o en el futuro.
En nuestro cuerpo están las respuestas, los síntomas no son nada más que mensajes que nuestro organismo nos está mandando para decirnos que algo estamos haciendo mal, que hay algo que nos perjudica. Es interesante entonces poner “la atención plena” en todo momento para entender los mensajes que estamos recibiendo y poder actuar de manera que solucionemos esa desregularización que se produce.
Siendo conscientes de lo que sentimos en cada momento, nuestras respuestas ante el miedo y el estrés serán distintas. Podemos utilizar cualquier técnica de relajación en el momento en que sintamos que nos estamos alterando; manteniendo la atención en la relajación cambiarán nuestros pensamientos y como consecuencia, habrá una transformación en las sensaciones, que se volverán agradables y positivas.
No te pierdas en la dispersión y en el ambiente que te rodea. Aprende a practicar la respiración para recuperar la compostura del cuerpo y la mente, para practicar la atención, y para desarrollar la concentración y la comprensión.
http://eltemplodelameditacion.wordpress.com/2012/12/16/mindfulness-ejercicio-de-exploracion-corporal/#more-596