Sin lugar a dudas el introductor de las meditaciones dinámicas en Occidente fue Osho, este controvertido maestro de la India.
Sus meditaciones dinámicas suelen ser extensas, ya que duran como mínimo una hora y a veces los participantes suelen quedar exhaustos.
Las meditaciones dinámicas tienen varias fases activas hasta alcanzar la fase estática. Estas fases activas predisponen de una mejor manera al sistema nervioso para lograr estados de interiorización más profundos.
A continuación les describo la Meditación Circular, una meditación activa suave que puede practicar todo el mundo y que seguramente les vendrá muy bien a las personas hiperkinéticas.
Meditación Circular
- Párese cómodamente. Los pies separados a la distancia de los hombros.
- Ahora comience a trazar círculos con todo su cuerpo, en un sentido y en el otro. Los pies permanecen quietos, es el cuerpo completo y sobre todo la cabeza los que marcan los giros. Déjese llevar por lo que sienta en ese momento, la velocidad es la que usted quiera.
- Mantenga una respiración lenta y profunda en todo momento.
- Luego de uno 5 minutos, aproximadamente, siéntese en su colchoneta o esterilla. Siga con el movimiento circular sólo con su cabeza. Lento, en un sentido y en el otro. Permanezca así otros 5 minutos.
- Recuéstese en la colchoneta. Ahora haga los movimientos circulares sólo con sus ojos. De igual manera. En forma lenta y relajada, con la respiración profunda. Mantenga 5 minutos.
- Ahora adopte la posición que le resulte más cómoda para la fase pasiva. Puede sentarse o permanecer recostado. Mantenga el ritmo respiratorio anterior y déjese llevar libremente por las sensaciones de circulación de energía que aparezcan en su cuerpo. Quédese un mínimo de 5 minutos, aunque lo aconsejable es 15 a 20 minutos.
Practíquenla y prueben el "sabor" de las meditaciones activas.