El autocontrol es una característica de suma importancia y de gran beneficio para todos, el cual se puede y debe enseñar desde la primera infancia, siguiendo las siguientes 7 recomendaciones:
1. No darle al niño absolutamente nada si lo pide llorando o gritando sino hasta que se calme y lo pida de buena manera.
2. Enseñarle a contar hasta 10 cuando esté enfadado.
3. Si se está portando mal hay que detenerlo de inmediato aplicando estrategias como 5 min. para pensar en su comportamiento.
4. Si se encuentra muy nervioso cuando nos intenta contar algo, hacer que lo repita pausadamente.
5. Cuando esté asustado o muy nervioso, enseñarle a respirar hondo y despacio.
6. Cuando esté enfadado, enseñarle a mostrar su enfado o ira de manera aceptable (sin insultos, sin levantar la voz).
7. Si el niño llegará a pegar o insultar el deberá siempre pedir perdón.
El autocontrol llevará a nuestros hijos a ser más felices, más templados, menos impulsivos y a tomar mejores decisiones en momentos de dificultad.
Lic. Cristina Kennington Westmark