Amor inesperado

Creí que mucho que contar no había…
Pienso que a pesar de lo bueno,
lo mejor, no ha llegado todavía…

Siempre he dicho que luchar contra el amor,
es una batalla perdida,
porque mientras más se le huya,
él más fácil se adhiere a tu vida…


Decir que he transitado en soledad,
es mentirme a mí misma,
es negar incluso, que he vivido en libertad.
Siempre he estado en compañía
y a la vez con una tristeza injusta,
pues me han rodeado tantas personas
y he estado más sola que nunca…

Dicen que el amor no es como uno lo cree.
Llega cuando nadie lo llama,
y se instala como quien nada quiere.


Y voy así…
Como quien vaga en busca de lo que no se le ha perdido.
Así…
Como si fuese verdad que aún en medio de mi soledad,
te he buscado y te he llamado,
sin saber que ya te había encontrado…

Que ironías tiene la vida,
encontré un sentimiento hermoso en un alma prohibida.
Y no es únicamente porque tu corazón no me pertenezca,
sino porque eres tú, justamente tú,
a quien nunca esperé en mi vida-.

He buscado y a la vez me he cansado de buscar,
he esperado a que llegue
sin avisar ese ser ideal.

Y no es por hacer desaires pero ni remotamente
pensé encontrar en ti, a ese ángel que lograra robarme
un pensamiento como lo haces tú, libremente-.


Siempre he tenido un patrón preestablecido,
aunque por lo general
nunca llegan como los imagino.

Pero TÜ,
llegaste rompiendo barreras
y cambiando esquemas,
entraste de una vez, sembraste en mí una quimera
y casi sin saber quien eras,
me deslumbraste con tu altivez.
No fue mucho el tiempo que tuvo que pasar,
necesitaste de pocos instantes,
de escasos encuentros
para alejar de mí ésta absurda soledad.

Y es entonces cuando decido,
que si bien tal vez no estoy escrita en tu destino,
algo he de hacerle a tu vida y tú a la mía,
porque de lo contrario, no se habrían cruzado nuestros caminos.


Amarte es fácil tarea,
eres dulce perdición
y se cuán terco resulta a veces el corazón,
por eso, si me lo permites,
quisiera sembrar en tu alma,llenarla de colores,
hacer que germinen mil pétales y flores,
y que en ti crezca una bonita ilusión.
Déjame caminar a tu lado,
permite acompañarte en tus alegrías y penas,
déjame ser quien despierte a tu costado
y te llene de besos y esperanzas nuevas…
Me levanto ante Dios agradeciendo tu existir,
pues haz sido quien en el menor de los tiempos
me ha demostrado que es válido sentir.

Me inclino ante ti,
dándote mil gracias por llegar a mi vida
justo cuando menos lo creía,
pero cuando más necesitaba que fuera así.

Ahora sólo puedo pedirte que tomes mi mano
y me dejes no sólo quererte,sino que me permitas además,
demostrarte que ese albañil del que tanto te quejas,
no hizo su trabajo en vano.


PD: No sabes cuánto le agradezco por esa brecha que dejó,
gracias a eso por esa pequeña rendija, mi corazón se coló.