Las alergias son un mensaje que nos envía el cuerpo, el sistema inmunológico del cuerpo nos dice “no te preocupes, yo te protegeré”.
En situaciones normales el sistema de defensas es un aliado contra virus, bacteria y otros invasores igualmente dañinos.
En el caso de las alergias, el cuerpo parece estima como dañinos elementos inocuos que nos rodean tales como el polen, la tierra, algunos animales, etc. Inclusive con las reacciones a las comidas, el cuerpo piensa, un ejemplo claro, la proteína animal o los lácteos como elementos hostiles y trata de defenderse de ello formando anticuerpos.
Si se toma conciencia por un momento de la relación cuerpo/mente, puede que el cuerpo reaccione a una profunda necesidad emocional de protección, actuando como aliado nuestro pero sobre reaccionando de cierta forma. Es decir, como si el cuerpo nos dijera ¿te sientes desprotegido?, ¡yo pondré todas las barreras necesarias para ayudarte y defenderte!.
De esta forma, una partícula pequeña de polvo, un ácaro, un grano de polen o inclusive una proteína alimenticia etc, se transforma en un potencial agresor y el cuerpo se lanza al ataque.
Puede ser que el elemento en sí que origina la alergia compete a un aspecto de nuestras vidas que pensamos hostil, y tenemos la necesidad de protegernos de ella. Puede que ese elemento este relacionado con una experiencia incómodo en nuestra infancia o también que representa un aspecto de nuestras vidas que no nos agrada.
El cuerpo humano es maravilloso, y en condiciones normales se encuentra en perfecta armonía con los componentes que lo rodea. Cuando de pronto el cuerpo comienza a reaccionar de una manera negativa a elementos externos inocuos, existe un desequilibrio que debe curarse.
Tratamiento con Reiki:
En un tratamiento de Reiki, el estar en manos de una “Energía Inteligente” tiene un rol muy destacado en la sanación.
Reiki trabaja calmando los síntomas a corto plazo, curando ojos inflamados, mermando las inflamaciones, pruritos etc. Luego el Reiki penetra en forma profunda en el cuerpo, ofreciéndole equilibrio y haciéndolo entender que el origen de la alergia no es una situación hostil de la cual precisa defenderse.
El Reiki entra en la situación que originó la alergia, cuando la ocasión provoca el cuadro alérgico.
Reiki trabaja perfecto con alergias, porque una reacción alérgica, comprende aspectos de todo nuestro ser, la mente, las emociones y el cuerpo, y Reiki es más intenso cuando trabaja con todos los aspectos de nuestro ser.
http://www.creceroperecer.com/2011/10/14/reiki-alergias/