Experimento claridad y armonía en todos mis intercambios de energía
Para sentirte feliz y satisfecho con los resultados de tus intercambios de energía o transacciones comerciales, sé concreto, desde un principio, con respecto a los compromisos, acuerdos, tiempo, esfuerzos y obligaciones necesarios, como también lo que esperas a cambio. Si piensas invertir tu dinero ‑sea en una cuenta bancaria, en un nuevo negocio, una casa, un terreno, acciones u obligaciones‑ sé preciso acerca de las ganancias financieras que deseas. Cuando, por ejemplo, pones tu dinero a plazo fijo, tú y el banco llegan a un claro acuerdo sobre los intereses, acuerdo que excluye conflictos y desilusiones.
Los contratos se firman para que ambas partes estén de acuerdo sobre los términos y de que no hay intenciones ocultas o no verbalizadas. Con frecuencia, el proceso de constitución de este acuerdo crea entre las personas la claridad que genera amor y armonía en vez de conflictos y luchas. Una vez conseguido un buen acuerdo, raras veces aparecen problemas. Piensa que un contrato es la oportunidad de aclarar las cosas entre tú y otra persona. Léelo detenidamente y reflexiona sobre sus términos. ¿Te son agradables? ¿Reflejan tus intenciones?
Es importante que los acuerdos y sus términos sirvan tus derechos e intereses a la vez que los de la otra persona. Antes de firmar, no dudes en pedir la clarificación o modificación de los términos que no comprendes o con los que no estás de acuerdo. Siempre que inicies un xxxxxx, implique o no la firma de un contrato, ten claro cuáles son los acuerdos implícitos. Cuanto más clara seas, más luz y armonía habrá en tu vida. Tu claridad es un regalo para todos los que te rodean.
No resulta práctico firmar contratos con tus amigos sobre vuestros intercambios cotidianos, pero vuestros acuerdos no verbales pueden tener la misma claridad. Piensa en un amigo. ¿Qué acuerdos no verbales existen entre vosotros y vuestras mutuas obligaciones? Por ejemplo ¿con qué frecuencia se espera que os pongáis en contacto? ¿Se espera de ti que le ayudes en un momento de crisis? ¿Os prestáis dinero mutuamente? Existen muchos acuerdos no verbales con las personas que conoces en tu vida, y que les otorgan ciertos derechos con respecto a tu tiempo y energía. Cuando tú y tus amigos no estáis de acuerdo sobre los términos o cuando no tienes claro lo que deseas ofrecerles, surgen conflictos. ¿Tienen estos acuerdos, en los que acabas de pensar, áreas imprecisas? Intenta, por un momento, clarificar estas áreas y decidir qué quieres ofrecer y cómo te gustaría que fuera el acuerdo definitivo.