No te falta nada. Tu realidad del 1% puede no reflejar esa verdad, pero más allá de eso, en el mundo real, tienes todo lo que siempre has querido y querrás.
Esa realidad no está en algún sitio lejano, o del otro lado de las puertas del paraíso. Está aquí, ahora. Cada vez que eliminas una duda, el velo se levanta y puedes probar un poco de esa bondad eterna invisible extenderse ante ti.
Hoy, haz que esta enseñanza cobre vida. ¿Cómo? ¡No creas en tus pensamientos negativos!