La música despierta nuestros sentidos e influye enormemente en nuestro estado de ánimo, las vibraciones sonoras modifican nuestra energía. Escuchar “Happy”, de Pharrell Williams, es un buen ejemplo de ello. ¿Cómo mantenerse quieto? ¿Cómo no sentirse feliz? La ciencia ha comprobado el poder de la música y el sonido.
Está confirmado el efecto benéfico que ciertos sonidos, melodías y mantras tienen sobre el cerebro humano, y cómo sus vibraciones actúan a nivel celular. Los chamanes utilizan sonidos en rituales para lograr estados alterados de conciencia para entrar en contacto con los dioses y sanar a las personas. En templos de la antigüedad, la música formaba parte esencial de rituales mágicos.
Podemos eliminar la negatividad y generar una alta vibración para atraer la energía positiva al hogar con instrumentos sonoros de uso cotidiano. Es fácil, efectivo y muy agradable, y su influencia va más allá de lo que imaginamos.
Llamadores de viento
Llamados también “llamadores de ángeles” o “carrillones”, se utilizan en puertas de entradas y otros espacios en los que la brisa pueda activar su sonido, como balcones, ventanas, galerías o pasillos exteriores. Los hay de bambú, de metal, vidrio, cristal, etc. Las varillas deben ser huecas para permitir que circule la energía hacia arriba. El sonido de estos instrumentos atrae la buena suerte en el hogar.
Cuencos tibetanos
Los cuencos tibetanos de cuarzo o de metal, son instrumentos muy valorados por las altas vibraciones que emiten. Desde hace siglos, los lamas del Tibet utilizan estos cuencos para inducir estados mentales de profundo bienestar, también para tratar ciertas dolencias tanto del cuerpo como de la mente. Se desliza un palillo alrededor del filo del cuenco con un movimiento constante, y ese movimiento genera una vibración especial que trabaja sobre nuestro cuerpo energético, equilibrándolo a través de cada uno de los chakras.
Sonajeros de mano
Los egipcios utilizaban sonajeros de mano con curiosas formas de animales, en celebraciones y en diversos rituales. También se utilizaban en diversas culturas antiguas, se agitaban en ceremonias con el fin de ahuyentar los malos espíritus. Los sonajeros de calabaza, o palos de lluvia, son utilizados hoy para ayudar a la concentración y a la limpieza del aura.
Musicoterapia
La música también es una potente terapia que tiene efectos benéficos para las personas. La musicoterapia se utiliza para regular los estados de ánimo a través de sonidos que estimulan y relajan al cerebro. Tiene efectos positivos en el tratamiento del estrés, y estimula la actividad de las ondas alfa, aumentando la energía.
Generalmente, la música que se utiliza es realizada con instrumentos acústicos, pero es reconocido el efecto que algunas melodías clásicas tienen en diversos tratamientos, por ejemplo, “Las Cuatro Estaciones” de Antonio Vivaldi, para la hipertensión y la ansiedad, “Música acuática” de Haendel, el “Canon en Re” de Pachelbel para el insomnio, y la “Serenata de Cuerdas op. 48”, de Tchaikovsky, para aumentar la energía vital.
También los sonidos melodiosos de las campanas o los producidos por la naturaleza y los animales son altamente beneficiosos para atraer energía positiva