Duraciones, etapas y temporalidades: sus indicios sobre la piel.
Si bien hay que desestimar cualquier predicción quiromántica que brinde períodos bien marcados, duraciones exactas y momentos previstos con meticulosidad, es posible prever el paso del tiempo, y la lectura de las manos aporta datos muy interesantes.
Tener “las manos curtidas por el sol” o “delicadas como si nunca hubiera lavado los platos” son formas coloquiales de imaginar cómo vivió una persona gran parte de sus años. No obstante, existen otros signos que utilizan la piel como una superficie llena de mensajes, pero no se detienen en las arruguitas, en las pecas o en la tersura, sino en los dibujos que han nacido con cada uno de nosotros. La Quiromancia puede brindar importantes señales acerca del paso del tiempo, si se miran las líneas y los montes indicados.
1. LÍNEA DE LA VIDA
Sin duda, un rastro que cualquier lector de manos sigue es el de la Línea de la Vida, que se extiende desde el punto medio entre el índice y el pulgar, y avanza hacia la base de la palma de la mano.
Aunque muchas personas creen que esta línea les “dirá” cuántos años vivirán, esto no es así; sino sólo un índice que ha de ser comparado con la duración de las demás líneas, especialmente, la de la Cabeza y del Corazón, así como el aspecto general de la mano, sobre todo, el color.
En la Línea de la Vida, lo que se observan son las tendencias: vitalidad, capacidad de superar los contratiempos, energía, regeneración espiritual, etcétera.
Los especialistas en Quiromancia suelen dividir esta línea en secciones, correspondientes a ciclos de 7 años, para tratar de predecir acontecimientos importantes en diferentes etapas de una misma vida.
Si hay interrupciones u otras marcas que alteran el fluir de la Línea de la Vida, ello indica que habrá cambios bruscos en el tramo de los 7 años que se está señalando.
Vea el recuadro para saber en qué dirección se lee y desde dónde.
Señales interesantes:
-Línea larga y pronunciada: indica una actitud segura y tranquila que permitirá sobrellevar los contratiempos.
-Línea débil y corta: la persona es débil, con tendencia a enfermarse y sumamente vulnerable a los imprevistos de la existencia.
-Líneas paralelas a la Línea de la Vida: son una buena señal de protección extra, ya que refuerzan y compensan una línea principal débil.
-Línea muy diferente en mano derecha e izquierda: el sujeto es ciclotímico y poco consecuente en su vida.
2. LÍNEA DE LA CABEZA
Es la segunda línea en importancia para establecer tendencias. Así refuerza y complementa los signos encontrados en la Línea de la Vida.
Si nace unida a la Línea de la Vida, se considera que la persona se verá más influida por el entorno y la familia en su visión de las cosas. Si, por el contrario, nace separada de la Línea de la Vida, la persona tendrá un criterio muy independiente.
Cuanto más tiempo esté unida o mayor sea la separación, ambos rasgos se transformarán en exagerados y, por tanto, en posibles riesgos.
Algunas señales
Interesantes
-El largo: una línea larga y bien marcada es índice de inteligencia, capacidad de análisis y concentración,así como fortaleza psicológica.
-En relación a la Línea de la Vida corta, si la de la Cabeza es larga compensa esos malos efectos.
-Los cambios de dirección en esta línea presuponen “cambios mentales” del sujeto. Así, si es muy sinuosa, la persona carecerá de coherencia en su vida y, si es muy recta, será un individuo demasiado rígido. Una línea ligeramente curvada es lo ideal.
3. LA LÍNEA DEL CORAZÓN
La Línea del Corazón no se relaciona directamente con la duración de la vida, ni con los acontecimientos del individuo, sino que se refiere a su vida afectiva, a su forma de sentir y a la profundidad y compromiso en sus emociones.
En el único aspecto en que esta línea puede marcar una tendencia en relación a la vida de la persona es si nos encontramos con una línea cortada o llena de trenzas u otras marcas que nos hablan de una vida afectiva muy complicada.
Señales interesantes
-Lo ideal es que la línea siga hasta el monte de Júpiter y acabe entre el dedo índice y el medio. Si termina antes (en el Monte de Saturno), la persona será más introvertida y con dificultades para expresar su mundo afectivo.
-Las islas, trenzas, líneas paralelas, cortes, superposiciones u otras marcas que entorpezcan la línea son señales negativas y expresión de una vida afectiva compleja y pasional en exceso; lo cual puede incidir, como dijimos, en la salud del sujeto.
4. LÍNEA DEL DESTINO
Nace en el monte de Neptuno (base de la palma de la mano) y sube hasta el monte de Saturno (debajo del dedo mayor), aunque es poco común que sea tan larga y perfecta. Si así fuera, la persona tendrá mucha suerte en su vida, ya que a una línea con estas características se la denomina “línea de reyes”.
La línea del Destino da cuenta de los principales acontecimientos que vivirá una persona y, fundamentalmente, si serán por obra de la suerte y el azar, o del intenso trabajo y esfuerzo.
Cuando esta línea nace cerca de la Línea de la Vida, ello indica que se tomarán decisiones escuchando siempre a los afectos y el entorno. Si el punto de nacimiento se acerca más al monte de Venus, significa que los proyectos y deseos de la persona se verán influenciados por una gran cuota de fantasía. Vea el recuadro para saber en qué dirección se lee y a partir de qué punto.
Señales interesantes:
-Se considera que, cuanto más pronunciada resulta esta línea, la vida de ese sujeto estará más condicionada por la suerte y el destino; por el contrario, si la línea del Destino parece suave y poco marcada, se trata de personas que construyen su porvenir día tras día.
-En cambio, si la Línea del Destino aparece cortada o interrumpida en varios tramos, ello significa que la vida se verá alterada de repente. Puede tratarse de viajes, cambios de residencia, o bien, de otras transformaciones profundas en la vida del sujeto.
● Línea de la Vida: nace en el borde de la mano, por encima del Monte de Venus y se dirige a la muñeca; por tanto, la sucesión de años se lee en este sentido.
● Línea de la Cabeza: nace en el borde de la mano y se dirige hacia el Monte de la Luna o de Marte. Se lee en la misma dirección.
● Línea del Corazón: nace en el borde de la mano y se dirige al Monte de Júpiter. Se lee en este sentido.
● Línea del Destino: nace en la parte inferior de la mano, cerca de la muñeca y se dirige hacia el Monte de Saturno; se lee en la misma orientación.