Este tipo de respiración es ideal cuando necesitamos activarnos. Es una respiración muy indicada para momentos en los que la vida nos pide movimiento y mucha vitalidad.
El ejercicio consta de los siguientes pasos, que deberás hacer lentamente.
La Respiración Energética
1. Nos situaremos de pie con las piernas ligeramente separadas y los brazos relajados pegados al cuerpo.
2. Después, inspiraremos todo lo profundamente que podamos ya que el ejercicio se hará conteniendo la respiración.
3. Inmediatamente después, levantamos los brazos hacia el frente hasta situarlos totalmente en horizontal con respecto a nuestro tronco. Las manos deben estar con la palma hacia abajo.
4. Después cerramos las manos con fuerza, de manera que nos queden los puños cerrados con presión.
5. A continuacón, flexionamos los brazos hacia nuestro pecho sin perder la horizontal.
6. Después, los estiraremos, sin aflojar la tensión de los puños, hacia el frente haciendo fuerza como si empujáramos un mueble.
7. Después, los bajamos sin perder la tensión hacia la posición inicial, a lo largo de nuestro cuerpo.
8. Relajamos los brazos y manos y soltamos todo el aire con fuerza.
9. Descansamos y respiramos con normalidad.