DEPRESIÓN POST-SEXOSexo y depresión son, a simple vista, dos palabras aparentemente antónimas. Aumenta nuestra autoestima, nos relaja, nos divierte… Hacer el amor cuenta con numerosos beneficios para nuestra salud, pero también tiene sus propias contraindicaciones. O al menos eso es lo que dice un reciente estudio publicado en el British Medical Journal y el Journal of Sex Research.
Los adultos jóvenes que tienen relaciones sexuales ocasionales son más propensos a sufrir depresión y ansiedad. Esta es la conclusión a la que han llegado los investigadores de la California State University tras observar el comportamiento de 3.900 estudiantes universitarios heterosexuales de todo Estados Unidos.
El estudio, llamado ‘Risky business: ¿Existe una asociación entre el sexo ocasional y la salud mental de los adultos emergentes?’, encontró niveles altos de ansiedad generalizada, ansiedad social y depresión entre los estudiantes que recientemente habían practicado sexo casual.
Con casual sex, los investigadores se refirieron al hecho de tener relaciones sexuales con una pareja conocida hace menos de una semana. Un 18,6% de los hombres y un 7,4% de las mujeres encuestadas afirmaron haber tenido un encuentro ocasional durante el mes anterior al sondeo.
De los casi 4.000 universitarios, se detectó alguna problemática psicológica en el 42%: el 10% no estaba satisfecho con su vida, el 15% sufría de depresión y el 17% presentaba trastornos de ansiedad. Tal y como afirmó la Dra. Melina M. Bersamin, directora de la investigación: “Es prematuro concluir que los encuentros sexuales ocasionales no plantean riesgos psicológicos nocivos para los adultos jóvenes”.
Pero la conclusión del estudio no es que se trate simplemente de una relación causa-efecto: practico sexo con una desconocida, me arrepiento, tengo remordimientos y esto me genera malestar. Según la doctora Bersalim, los datos también deben leerse a la inversa: “Las personas que están deprimidas, ansiosas e insatisfechas con sus vidas podrían ser más propensas a tener relaciones sexuales ocasionales”.
Los vínculos causales entre el comportamiento sexual y la salud mental no están claros, pero sí parece haber una cierta relación entre sexo casual y depresión. Así que antes de darte lo que tú consideras una “alegría pa’l cuerpo”, párate a pensar si de verdad quieres hacerlo. Más vale prevenir que curar.
Fuente:
http://www.hombremoderno.es/eros/depresion-post-sexo-a08/