MANEJO DE LA DEPRESIÓN
Todos pasamos por etapas en que la vida nos parece extremadamente difícil; cuando nos quedamos solos, cuando no podemos pagar nuestras deudas, cuando nos quedamos sin empleo, cuando perdemos a un ser querido. En circunstancias así nos peguntamos si lograremos vivir así otra semana
No es extraño, que muchos de nosotros nos echemos encima a todas las aflicciones de los próximos 25 años, luego nos preguntamos por qué es tan difícil la vida. No tiene sentido angustiarnos hoy por los problemas de mañana.
En la mayoría de los casos lo peor que puede pasar es, sin duda, muy grave, pero no es el fin del mundo. Procura mantenerte ocupado. Dedícate a un trabajo que te permita volcar toda tu energía. Siempre nos sentimos mejor cuando nos mantenemos ocupados. Hacer algo por otra persona en cuanto empiezas a hacer felices a otras personas, ¡te sientes mejor!, es simple y automático.
HUMOR
Cuando te ríes, ocurre toda clase de maravillas que benefician a tu mente y a tu cuerpo. Tu cerebro libera endorfinas, lo cual te transporta a un estado natural de exaltación y tu sistema respiratorio se ejercita como si trotaras.
La risa alivia el dolor. Solo cuando estás relajado puedes reír; y mientras más relajado estás, menos dolor sientes. De manera que las películas y libros cómicos son excelentes remedios contra el dolor. De hecho, no puedes reír y desarrollar úlceras al mismo tiempo; tienes que elegir una cosa o la otra.
LA GENTE FELIZ NO TARDA MUCHO EN VER EL LADO GRACIOSO DE SUS DESILUCIONES.
En ocasiones es lo que creemos que la gente opina de nosotros, cómo nos ve, cómo somos percibidos por los demás, y la mayoría de las veces descubrimos que el concepto que nosotros tenemos de nosotros mismos no se corresponde con la imagen que damos a los demás.