Una de las principales energías discordantes a la que se está enfrentando el ser humano es la impaciencia.
Los avances tecnológicos que se han presentado durante los últimos años han provocado en la gente desesperación por obtener las cosas de inmediato y sin esfuerzo. El problema es que eso no aplica en todas las áreas de tu vida, pero al aferrarte a que así sea, te generas situaciones de dolor o frustración y terminas por botar las cosas sin terminarlas.
¿Qué sucede en el caso de un proceso de “sanación”?
Si presentas un proceso infeccioso, el médico te receta antibióticos y te advierte que debes de terminar el tratamiento pues en caso contrario volverás al microbio más resistente y no podrás liberarte de la enfermedad.
Lo mismo sucede cuando ya has iniciado un proceso de “sanación” de emociones y transmutación de energías discordantes.
Obviamente en el proceso se van a mover cosas, va a haber algunas molestias y tendrás que esforzarte para obtener resultados.
Por ejemplo: Imagina que decides remodelar toda tu casa: Va a haber mucho desorden, polvo, gente entrando y saliendo haciendo mucho ruido, derrumbando paredes, quitando muebles y otras situaciones que a veces pueden llegar a ser molestas. Pero ¿qué va a pasar cuándo esa remodelación termine? Tu casa va a estar hermosa, renovada, en orden y tú vas a sentirte feliz y a gusto en tu nuevo hogar.
¿Y qué pasaría si interrumpes la remodelación y dejas hoyos, paredes a medio derrumbar, espacios sin pintar, humedades, fugas de agua, etc? No podrías usar tu casa, no te sentirías bien y probablemente terminarías clausurando habitaciones.
Sucede exactamente lo mismo cuando dejas procesos de sanación a la mitad. No ves resultados, te sientes peor que antes y terminas por creer que no funciona.
No es necesario que pases por más dolor, pero si no transmutas viejas experiencias que te están generando esas energías discordantes, entonces estarás vibrando bajo y terminarás por atraer más energías que estén vibrando en el rango de esa situación.
Me explico: Si estás percibiendo todo el tiempo miedo y enojo, estás vibrando entre 100 y 150, por lo cual atraerás energías alrededor de esos rangos: sufrimiento, apatía, remordimiento, más miedo e ira. Imagina que quieres encontrar una pareja y vivir en el amor -el cual vibra sobre 500- y tú estás vibrando en el miedo casi todo el tiempo: miedo a no encontrar una buena pareja o a que te abandone, a estar solo o que te engañe, etc.
No la vas a encontrar porque miedo y amor no están en la misma frecuencia, o bien, encontrarás una que vibre en el mismo rango que tú para que te veas reflejado y aprendas.
Por eso es necesario liberarse de todos los malos entendidos de experiencias anteriores y transmutar energías discordantes de las mismas, así vibras más alto y atraes otro tipo de experiencias, personas y aprendizajes.
No te des por vencido, sé paciente y no te detengas ahora, no es recomendable, a menos que eso decidas y creas merecer.
Recuerda que eres un ser ilimitado y estás aquí para ser feliz.