"Lo que tú necesitas, nena..."Vuestro cuerpo es vuestro santuario. No lo olvidéis, niñas, vuestro cuerpo es vuestro santuario. Si me hubieran pagado un duro –es que entonces contábamos en pesetas– por cada vez que las hermanas del Sagrado Corazón de Jesús me dijeron esa frase, no solo yo podría retirarme del mundanal ruido, sino mis descendientes por los siglos de los siglos.
Terminada la E.G.B. –¡Dios!, qué mayor parezco– salí de allí y aterricé en un instituto progresista y laico donde, no solo íbamos a la misma clase las dulces niñas con los solo-quieren-una-cosa chicos, sino que el grafiti que presidía la entrada principal , y que nadie nunca se molestó en borrar, era tan explícito que a sor Milagros le hubiera dado un soponcio: "Masturbarse es bueno, pero follando se conoce a gente". Afortunadamente, el cerebro es maleable y conseguí camuflarme en el nuevo entorno sin demasiados traumas.
Pasados ya tres lustros de la aventura estudiantil, la mayoría de mis amigos están casados/ emparejados/arrejuntados/o-viviendo-en-pecado. Eso sí, que practiquen más o menos sexo con cierta regularidad no puedo asegurarlo. ¿Se pasa la ansiedad cuando compartes baño con alguien? Las estadísticas dicen que sí. (Nota a pie de página: las primeras veces que vayáis a casa de una chica, ni se os ocurra hacer determinadas cosas en su baño porque: a) las paredes transpiran no sólo el sonido y b) aunque no se oiga, nosotras lo sabremos. Y entonces se habrá perdido la magia para siempre). De todas maneras, a pesar de que nadie lo confiese, tengo serias sospechas de que algunos de mis amigos –y amigas– siguen en pareja porque no quieren estar solos.
O no saben. O no se atreven. Los que no lo están presumen de soltería, pero me recuerdan a esas tapas de yogur de nuestra infancia en las que inevitablemente leíamos una y otra vez: "Sigue buscando, tu premio puede estar en el próximo Danone". Y que nos dejaban con el ansia de abrir todos los yogures de la nevera aún a riesgo de la soberana bronca que nos iban a echar nuestras madres. Sigue buscando, piensan todos en el fondo de su alma de yogur. Sigue buscando, ronronean sus almas de solteros. Sigue buscando, aunque sea de vez en cuando, por Dios, a alguien con quien compartir mal aliento mañanero.
Eso sí, ante la soltería, siempre se pueden buscar sustitutos. Aunque, cuidado con lo que os cae entre las manos, porque puede ser contraproducente. Atención al correo electrónico que me llegó el otro día a la tele: "Te presentamos el primer despertador femenino que tiene el objetivo de arrancar todas las mañanas a las mujeres una sonrisa al despertar, y recordarles que todos los días son momento de celebración. Con este despertador ya no hará falta tener pareja para que una voz varonil te sorprenda cada mañana". ¡Toma ya!
Sí, claro, es lo que queremos todas las mujeres, que una voz varonil enlatada nos despierte cada mañana. ¿Lo siguiente qué será? ¿Un robocop bien dotado? Pero la cosa no acaba ahí… porque lo que tiene más pecado son los mensajes del trastecito. Esto es lo que suena para que las mujeres solteras de este país se despierten por las mañanas: "Yo tampoco he tenido suficiente, nena, pero ha llegado la hora de ponerse en pie. Vamos, hoy estás increíble". O: "No me hagas esperar, nena, o me quedaré sonando el resto del día". Hay más, pero me da vergüenza transcribirlos.
¿Quién narices ha tenido la idea de esta barbaridad? Funcionar, funciona, porque lo que te dan ganas es de levantarte para estampar el despertador contra la pared. Pero… ¿esa cosa de canal barato de semiporno? Perdonad, pero solo se le podría ocurrir a un hombre. Y, efectivamente, se le ha ocurrido no a uno, sino a dos. Los autores del despertador para mujeres son ¡dos tíos! Yo no sé si a vosotros os gustaría que os despertara una voz femenina sacada del teléfono erótico. Igual sí. Pero a nosotras no. Nos puede hacer gracia un día, como broma, para reírnos con las amigas. Pero como cosa seria, ni pensarlo. Por favor, decidme que no, que no todos pensáis que a las mujeres nos gusta eso. Es casi peor que soltar lo de "lo que esa necesita es un buen polvo". Aunque ¿quién de vosotros, chicos, no lo ha pensado alguna vez? Si es que…
Fuente:
http://www.revistagq.com/articulos/lo-que-tu-necesitas-nena/15358