Según la Ley de la Atracción, tú atraes aquello que tanto piensas y deseas. Tú eres libre de soñar lo que quieras y se te dará aquello que tanto quieres. Lo único malo con ese documental y libro es que seguramente tomaron como referencia los pocos casos buenos de aquellas personas que sí les ha resultado.
Tal como te mencioné anteriormente. Tú puedes desear con todo tu corazón tener el auto de tus sueños, pero hasta que no ahorres dinero, hasta que no vayas al banco a preguntar si puedes acceder a un crédito, hasta que no vayas investigando cuáles son los nuevos modelos, etc… ¡Nunca vas a tener ese auto!
Te propongo el siguiente ejercicio. Verás que funcionará al 100%. Desea con todas las ganas del mundo aquello que tanto quieres. Visualiza que lo tienes, siente que es tuyo. Bien… Ahora abre los ojos y date con la sorpresa de que no está. Funcionó el ejercicio, ¿verdad? Habiendo realizado ese ejercicio prosigamos:
Un tío me contó el caso de una mujer a quien le funcionó la Ley de la Atracción. Esa mujer quería que llegara el hombre de sus sueños a tocar la puerta de su casa, por lo tanto tuvo que cambiar sus hábitos, también algunas cosas en su casa para que cuando llegase ese hombre, pudiera mantenerlo como pareja. Ella amplió la cochera de su casa para que en vez de que ocupara un auto, pudieran entrar dos. La de ella y la del hombre de sus sueños. Ella eliminó su pequeña cama y se compró una cama de dos plazas para que pudieran dormir ella y el hombre de sus sueños, etc… Entre muchas cosas más.
El final del cuento ya es de suponerse. El hombre llegó a la puerta de su casa (si no me equivoco creo que fue a realizarle una encuesta…) y así fue que tuvo al hombre de sus sueños.
Hasta el momento no sabemos si otras 99 mujeres hicieron algo parecido a ella y siguen esperando a que llegue el hombre de sus vidas, aquel que realmente las sepa valorar, etc…
Aquí, lo que veo que le falta es aplicar la Ley de la Intención, o como más me gusta llamarlo, la Ley de la Acción: Si no haces nada para conseguir al amor de tu vida, pues nada tendrás.
En otras palabras, deja de quejarte porque no tienes a nadie quien realmente te quiere, tienes que mover el trasero, moverte del asiento, abrir la puerta de tu casa y explorar el mundo que tienes a tu alrededor.
Por allí una lectora me preguntó: “¿Y qué hay de las relaciones que surgen a través de internet?”.
Pues, inclusive en internet también se tiene que tomar acción, se tiene que investigar, se tiene que invertir tiempo en conocer a esa persona y de ser posible conocerla físicamente. No creo que una relación funcione al 100% de forma virtual. El amor hay que sentirlo, tocarlo, olerlo, verlo, saborearlo…
Como bien dije: Deja de quejarte por todas aquellas malas relaciones que has tenido hasta el momento y empieza a tomar acción desde ahora.
No quiero tampoco que te resignes a emparejarte con alguien que ves todo el tiempo sin haber ampliado tu círculo social. Lo que quiero decir es que dejes de buscar pareja en tu mismo centro de trabajo, en tu mismo barrio, en tu misma universidad de siempre a menos que sea un lugar completamente nuevo.
El punto es que si llegas a tener la pareja ideal sea por el esfuerzo que has hecho al buscarla.
Ahora bien, ahora definiremos bien lo que es la búsqueda activa y la búsqueda pasiva ya que en nuestra sociedad estamos acostumbrados a adoptar ciertos roles como personas, más específicamente hablando de hombres y mujeres.
Las mujeres están acostumbradas a que los hombres TOMEN LA INICIATIVA a que les hablen.
El problema es que si son pocos los hombres quienes te entran a hablar, tendrás muy pocas alternativas para escoger, por lo tanto no esperes buenas decisiones de las pocas alternativas.
Y, seguramente si eres mujer, me dirás: “Pero tampoco es para que busquemos como locas, desesperadas por tener al hombre de nuestros sueños, regalándonos ante el primer hombre que veamos…“.
Estoy completamente de acuerdo y es por esa misma razón que debemos distinguir entre la búsqueda pasiva de la activa.
La búsqueda activa
Tengo amigos que se encargan de salir los fines de semanas especialmente a conocer mujeres, abordar desde la esquina de la calle más transitada de la ciudad, hasta dentro de una discoteca (lo típico).
Se podría decir que ellos practican la Búsqueda Activa propiamente dicha. Ellos toman el 100% de la iniciativa para hablar con una mujer. Ellos son los que se acercan y dicen el primer “Hola” como introduciéndose en la conversación.
Se podría decir que la búsqueda activa es lo que socialmente se bien en los hombres ya que sería totalmente fuera de lo común ver a una chica que tome la iniciativa de entablarle una conversación a un hombre que le gusta desde la calle… No es malo, pero sí un poco extraño… Pero te garantizo que muchos hombres desearían que de vez en cuando una mujer se acerque así (para que lo sepas ;D).
La búsqueda pasiva
Si eres mujer, te identificarás con este tipo de búsqueda y es que seguramente ya lo estás haciendo desde hace mucho tiempo pero quiero que analicemos cómo es que muchas mujeres EXAGERAN con la búsqueda pasiva.
Estás realizando una búsqueda pasiva desde el momento en que te expones a ambientes sociales. Así de sencillo.
Ya que en esos ambientes es muy probable que un hombre se acerque a ti por algún tema de por medio (ya sea por las clases de inglés que ambos tienen en común, por interpretaciones teatrales, por el deporte que practicáis, etc…)
Ésta definitivamente sería una búsqueda pasiva muy productiva: Estar exponiéndote a ambientes sociales en las que al final de cuentas alguien podría fijarse en ti e invitarte a salir…
La búsqueda excesivamente pasiva
Supongamos que eres una persona mayor. No importa si eres hombre o mujer. La etapa de entrar a círculos sociales cada vez se te están acabando… Ahora tu vida se ha vuelto una rutina total. Ahora tu vida gira en torno a tu trabajo, casa y algunos hobbys.
Ya no estás expuesto(a) a ambientes sociales como la universidad, el deporte en grupo o una clase de arte… Apenas tienes amigos; pero en el trabajo te enamoras de tu compañero(a).
El trabajo es un ambiente social, el problema es que la relación se da en un entorno de escasez. Te enamoras porque es lo que queda… Muchas personas a partir de los 30 años me cuentan casos de decepciones amorosas en torno al trabajo, por lo tanto sé que llegado a este punto es porque la búsqueda se volvió demasiada pasiva.
Ya no estás buscando, sólo esperas que por arte de magia venga el hombre de tus sueños, tocando la puerta de tu casa, trayendo flores, diciéndote la gran persona que eres, pero sin haber hecho absolutamente nada…
Ésta es la idea que muchas veces te propone Disney desde muy pequeño. Pues no caigas en ella. A partir de ahora empieza a tomar un PLAN DE ACCIÓN ya sea mediante la búsqueda activa o pasiva.
La idea es que sabiendo en el punto exacto en el que te encuentras ahora, habiendo tomado consciencia de tu situación, ahora ya puedes dar el siguiente paso que es tomar mejores decisiones.
Por último, si ya estás cansado o cansada de esperar al amor de tu vida, no importa si eres hombre o mujer, siempre puedes optar por la búsqueda activa. Te expones a que te rechacen una que otra vez, pero al final llegarás a conocer muchísima más gente, sabrás qué clase de persona te conviene y siempre serás quién elija con quien emparejarte en vez de esperar a que te elijan y aceptar a la apurada una de las pocas opciones o quizás la única que tienes de conseguir pareja.
Tenlo muy en cuenta.
http://comoolvidarunamor.info/page/6/