Qué Estás Dispuesto a Dar Por Tu Meta?

7 pasos para evaluar si podrás salir de tu zona de confort.
Todos tenemos deseos por realizar, sueños por alcanzar y objetivos por cumplir; sin embargo, no siempre tenemos claro lo que estos propósitos nos habrá de implicar en el camino. Seguir un proceso de coaching o autocoaching nos ayudará a aclarar la respuesta y más allá, nos servirá para encontrar nuestras destrezas, herramientas y recursos para lograrlo.
Sigue estos pasos para medir hasta donde serás capaz de llegar y qué tanto te dispones a dar por alcanzar tu meta:
Lo primero que necesitas hacer es tener claramente definida tu meta, enfocando la misma en los aspectos positivos de aquello que deseas conseguir, enmarcándola en un periodo de tiempo realizable, que te genere emoción y que puedas cuantificar el o los resultados que quieres alcanzar. Pon tu meta por escrito y revísala de manera periódica para evaluar si estás yendo en la dirección correcta.
Una vez superada la definición de tu meta debes someterla a una balanza para sopesar tus posibilidades de éxito frente a tu zona de confort.
La zona de confort siempre será el lugar y el estado donde nos encontramos antes de iniciar un proceso de cambio, de transformación, o en general, un proceso para avanzar hacia un objetivo determinado.
Si deseas bajar de peso algo necesitarás dar a cambio para lograr el peso ideal para ti, llámese esto tiempo, dinero, comodidad, gusto del paladar… etc;.
Entonces, estos son los 7 pasos:
Quédate solo(a) en un espacio de tiempo y lugar donde no te puedan interrumpir, lleva lápiz y papel.
Comienza preguntándote el porqué deseas esa meta y busca que sea por ti, no por alguien o algo externo a ti.
Encuentra el vínculo entre tu meta, tus principios y tu misión de vida.
Todo lo anterior te garantizará claridad en tus movimientos y por lo tanto eliminarás los temores y el espejo social.
Cierra tus ojos e imagínate en el proceso… imagina cómo será cada día de la semana comenzando el “Lunes” pues esto te ayudará a encontrar de qué manera las actividades regulares de un día te pueden afectar las nuevas actividades de otro.
Después de hacer el punto anterior lo más vivencial posible (viendo, escuchando, sintiendo, saboreando y oliendo cada cosa que haces), ahora haz una lista de las actividades que podrían interferir con tu meta: La ida al bar de los Jueves, el cine los Viernes, la salida de paseo cada fin de mes, el “baby shower” de tus 5 amigas que están a punto de dar a luz, la suscripción al club, las invitaciones inesperadas de familiares y amigos, el apetito por las golosinas, la novela a las 11pm que siempre te impide acostarte temprano, la falta de disciplina para trazarte una agenda, la pereza para tomar el tren de tu casa a la escuela para ese curso que te permitirá aprender nuevas habilidades… etc;. Escribe todo !
Ahora evalúa el valor que hay detrás de tu meta frente a la lista del punto anterior y decide si estás dispuesto(a) a salir de tu zona de confort para conseguirlo.
Actua !
El valor que hay detrás de tu meta se refiere al porqué deseas esa meta.
Algunas personas dicen querer ahorrar dinero para poder descansar en unas merecidas vacaciones y cuando evalúan el valor que hay detrás de su meta, se encuentran conque este consiste no en descansar; sino en poder compartir más con sus parejas e hijos y ahí hay un vínculo fuerte con los principios y misión de vida que le darán un impulso adicional para lograrlo.
Sigue los pasos anteriores y date cuenta de todo lo que eres capaz de dar.

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