Fuimos buscados por la necesidad de no estar solos, nos gustó la necesidad de sentirnos amados por los huecos que nos dejó la soledad. Nos fuimos engañando, porque sentíamos la necesidad de sentir la adrenalina. Lastimamos sin querer porque pensamos que nunca se van a enterar de la soledad que nos lastima.
La soledad fue nuestra peor aliada, nos buscamos porque la soledad nos llamaba y resulto ser la necesidad de nuestros fracasos, cometimos el peor error de haber jugado juntos por la soledad, aun sabiendo que la soledad siempre tendrá los peores errores que son aquellos cometidos por la necesidad.
Lamentar haber dado todo porque la soledad nunca entenderá que es más inmensa que un vaso lleno de agua, la soledad jamás entenderá razones solo que por necesidad cometemos los más grandes errores.
El haber jugado mientras la soledad rondaba la cuidad de la necesidad.
Enviado por: Ramón G.