Todo es nuevo en el comienzo de una relación. Sientes que podrías pasar una eternidad conociendo todos los valores y gustos de tu nueva pareja, te das cuenta de que no existe suficiente tiempo en esta vida para disfrutar juntos de todos los planes que quieres compartir con él y reconoces que las mariposas en la tripa no son en absoluto un cuento chino. Sin embargo, a medida que el principio de la relación progresa para convertirse en una relación de un, dos, tres o cuatro años, sientes que puedes resumir en una única palabra lo que estás viviendo con tu novio: rutina.
Todos podemos sentirnos identificados, pero dicen que el amor es como una casa: si la bombilla no funciona, hay que repararla en vez de salir por la puerta dispuesta a comprar una casa nueva. El motivo de la chispa perdida en una relación es que lo que una vez nos sorpendía, ahora sentimos que lo conocemos de memoria.
La solución no está en ponerle un punto y final al tiempo que llevamos en pareja, sino en encontrar la manera de recuperar esa magia que te llevaba a coger el móvil y sonreír ante su SMS de 'buenos días' como primera tarea del día.
La rutina como problema principal
Puede que el origen del problema sea el estrés cotidiano. Ambos tenéis que madrugar para acudir a vuestro puesto de trabajo o a la Universidad, cocinar el plato del día, lavar los cacharros, fregar, disfrutar del poco tiempo libre que tenéis para ver la televisión y planchar.
Son tareas que se hacen demasiado aburridas, pero como solución estrella proponemos hablar con tu pareja sobre todas estas preocupaciones, para encontrar juntos la manera de solucionarlas. Conversando de manera tranquila y escuchando el punto de vista de nuestra pareja lograremos encontrar una manera para que ambos salgan beneficiados con la solución.
Para encontrar la manera más oportuna de salir de la rutina, es importante hacer especiales nuestras tareas cotidianas. Por ejemplo, si cocinar resulta tedioso porque se repite día tras día, apuesta esta noche por una cena a la luz de las velas, y compra una botella de vino o incluso pon sobre la mesa del comedor un mantel festivo.
Ideas para revivir el romance
Si la rutina comienza el lunes, consigue que finalice el viernes por la tarde, cuando llegáis a casa después de trabajar. A partir de entonces, disfruta de un fin de semana novedoso, y para ello tienes todo tipo de propuestas: una cita en el cine, un paseo por un parque al que jamás habéis entrado, una tarde montando en bici, o incluso llamad a aquellos amigos que hace muchísimo que no veis, para disfrutar de una tarde de reencuentros.
También podéis hacer un viaje a algún lugar desconocido para vosotros, y no tiene por qué ser un plan caro sino que puede ser un destino en cualquier rincón del país que aún tengáis por conocer.
Lo importante de los fines de semana es que os turnéis, de tal manera que uno de vosotros pueda planear un sábado y domingo que compartiréis juntos, mientras que al otro le toca decidir qué actividades realizaréis en el próximo sábado y domingo.
Debido a que una relación no prospera si no se mima día tras día, es necesario que encuentres detalles para tener con tu pareja, tales como escribirle una carta romántica o anotar en un Post-it un mensaje breve cariñoso, y pegarlo en el cristal del baño para que lo pueda leer al comienzo de su día.
Y no olvides que, al igual que una carta vale más que un correo electrónico, también un 'sms' tiene un significado mucho más profundo que un mensaje por 'whatsapp'.
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por gerundio Hoy a las 16:47
