“El estudiante busca satisfacer a sus profesores porque necesita su aprobación para obtener el diploma que le permitirá ejercer
una profesión, tener un lugar en la sociedad. Es normal, y está muy bien, pero es insuficiente. Porque si existe un mundo exterior en donde tendrá, de vez en cuando, una actividad para ejercer, existe también un mundo interior en el cual no cesa de
vivir, y ahí también debe estudiar, hacer ejercicios para sentirse aceptado. Los profesores, los examinadores no están sólo en las escuelas y en las universidades. En nuestro mundo interior también debemos presentarnos ante un jurado y ¡su veredicto es mucho más importante!
La atracción del mundo exterior tiende a los humanos hacerles descuidar su mundo interior. Pero recibir un diploma, felicitaciones, o una condecoración, representan muy poco si cuando vuelven a su casa se encuentran en el vacío. Este vacío, es la sentencia pronunciada por su jurado interior.”
Omraam Mikhaël Aïvanhov