A todas nos ocurre, en ocasiones, algo inesperado y desagradable sucede y, de repente, nos encontramos en situaciones que ponen a prueba nuestra calma y equilibrio.
¿Cómo te sientes en esos momentos?
Ante este tipo de situaciones algunas personas se quedan paralizadas y no saben qué decir, otras reaccionan impulsivamente, se sienten ofendidas, humilladas e irritadas.
Cuando emociones como la ira, la cólera o la desesperación se apoderan de nosotras se produce un “secuestro emocional” en toda regla, no importa lo brillantes e inteligentes que seamos, en ese momento nuestras capacidades y facultades personales no nos ayudarán.
La verdadera capacidad para salir satisfactoriamente de la situación pasa por controlar nuestras emociones. Aunque nos cueste aceptarlo, una persona “secuestrada emocionalmente” está bloqueada intelectualmente.
Nuestras emociones y cómo las gestionamos tienen mucha importancia a la hora de enfrentar los retos y desafíos que la vida inevitablemente nos va planteando, y es que estas reacciones impulsivas, aunque comprensibles, no facilitan la solución de los problemas ni el establecimiento de una buena comunicación, más bien crean un ambiente de hostilidad y tensión ¿es eso lo que queremos?
Actuar irreflexivamente es dejar el control de la situación en manos de otros, porque estamos reaccionando a sus estímulos. Significa no hacer uso de nuestra libertad de elección, nos devuelve a nuestro estado más primitivo.
Si te irritas por la conducta de los demás dejándote llevar por la situación y REACCIONANDO, les estás dando un tremendo poder sobre ti, porque tu estado de ánimo dependerá de ellos, no de ti.
Por el contrario, PROACTUAR es mantener la actitud que tu decides voluntaria y consciente elegida desde la libertad. Gestionar y canalizar tus emociones te hace dueña de ti misma, libre.
Efectos del control emocional:
Actuación Impulsiva (SIN Control Emocional):
- Sentirte mal (física y emocionalmente).
- Generar resentimiento.
- Bloquear la comunicación porque tu interlocutor se pone a la defensiva.
- Destruir o dañar irreparablemente relaciones.
- Ceder el control de tu estado emocional a otras personas.
Actuación Reflexiva (CON Control Emocional):
- Mejor relación contigo misma. Sentirás que actúas de acuerdo con tu forma de ser real, y no por “dejarte llevar por el momento”.
- Mejores relaciones con los demás, ya que estás haciendo uso de una de las principales herramientas de la Inteligencia Emocional.
- Identificar, controlar y canalizar tus emociones, te facilitará alcanzar tus objetivos.
- Comunicación de calidad con otras personas ya que estarás siendo empática y asertiva.
¿Cómo controlar la situación?
Nuestro comportamiento es el resultado de nuestras emociones y éstas de nuestros pensamientos.
Un trabajo personal con un coach profesional puede ser de gran ayuda a la hora de analizar de forma personalizada la mejor estrategia a seguir para cada una.
Aquí te dejo unas recomendaciones generales muy prácticas para actuar ante un momento de tensión inesperada:
Mi propuesta es que apliques esta técnica del modo que mejor se adapte a ti. Si lo haces, serás 6dueña de tus elecciones, habrás sustituido Reacción por Proactuación.
Recuerda que eres dueña de tu vida. Convierte tu libertad en valor.
Bibliografía y Webgrafía:
- Teoría de la comunicación humana. Paul Watzlawick.
- La comunicación no verbal: el cuerpo y el entorno, Knapp, Mark, L., Paidós Ibérica.
- No se lo digas a nadie así. Francisco Gavilan – Zenith