Sincérate!
Seamos sinceros, no tienes ninguna obligación de hacer nada en la vida.
Absolutamente ninguna. A qué esto suena bien?
Pero piénsalo detenidamente unos segundos: sólo hay una persona en tu vida que determina si tienes que hacer algo no; y esa persona eres tú.
Atrévete a ir más allá, sincerémonos de verdad!
Además eres tú, solamente tú, quién opina sobre todo lo que haces, te enjuicias y te criticas: tienes que ser simpático, tienes que terminar tu trabajo a tiempo, tienes que hacer lo mejor para tu relación, tienes que pasarlo bien, tienes que ir hacia ese cumpleaños que no te gusta, etc.
Suena sorprendente aceptar que todo esto, todas estas obligaciones, las estás creando tu mismo.
Si realmente vamos a la esencia de todo, te das cuenta que no tienes que hacer nada. De hecho nadie tiene que hacer nada y menos por obligación externa.
Si decides hacer algo, lo haces y listo y si no lo quieres hacer, pues también, perfecto.
Ten en cuenta que si lo has decidido, es porque realmente estás de acuerdo, lo apoyas y así debes actuar.
Es muy probable que muchos condicionamientos tengan su origen en tu educación. Quizás has aprendido que es la gente quien te dice constantemente qué debes hacer, cómo hacerlo y cómo debes sentirte y actuar en todo momento. Siendo así, es normal, que hayas empezado a creer que la única manera de funcionar es esta.
Pero, la única verdad, es que tú tienes tu propia personalidad y tú creas tus propias decisiones fruto de tu voluntad.
La pregunta esencial es: eliges lo que haces con el corazón, porque realmente sabes qué eso es lo bueno para ti?; o lo haces porque estás satisfaciendo a otra persona?
¿Cómo eres y te sientes cuando estas estresado en el trabajo porque no consigues entregar algo en la fecha dictada? Te has planteado que también podrías haber comunicado que es demasiado trabajo para ti y que necesitas ayuda? Eres fruto de tus decisiones.
Hay un dicho en mi país que dice: a veces satisfacer a los demás sale caro.
Así que sé sincero contigo mismo; no tienes que hacer nada en tu vida que no quieras hacer!
Haz sólo las cosas que decides tu mismo y por ti mismo, aquellas que sientes que te hacen sentir bien y son buenas para ti.
Decides ir a alguna reunión que no te apetece? Pues demuestra que tienes interés!
Escucha a tu corazón, eso es lo único que tendrías que hacer.
Y si piensas que tienes que ir a algún sitio que no te apetece, pero a tu pareja, por ejemplo le hace ilusión, decide! quizás tú no quieres ir lo que sí que te gusta es hacer feliz a tu pareja en ese momento! Si decides ir, entonces has vuelto a tomar tú la decisión, retomas el poder, y eliges con responsabilidad ir para hacer que ella se sienta bien. Ya no es una obligación.
Si has decidido ir, como el resto de todas las decisiones que tomes, hazlas, pero hazlas de corazón.
http://mikah.es/no-tienes-que-hacer-nada/