Si la crisis te impide comprar algunos regalos, deja de sentirte mal. Lo más valioso que puedes dar eres tú mismo.
Las Navidades, el solsticio de invierno o lo que tú celebres por estas fechas no tienen porqué ser una oda al exceso y al consumismo.
Comemos de más, dormimos de más y, en el tema que hoy nos ocupa, procuramos ser generosos con nuestros regalos.
¿Qué pasa cuando el dinero no alcanza? ¿Sacamos ya los pañuelos para empezar a llorar? ¡Ni hablar de eso!
Alternativas a comprar regalos
Yo sé que es frustrante querer hacer un regalo y no poder por falta de dinero. Todavía más, cuando se trata de algo que esa persona que quieres necesita o espera con gran ilusión.
Pero el regalo, por especial que sea, es tan sólo una cosa.
Estamos tan acostumbrados a comprar cosas por estas fechas que parece que, si no vamos de tiendas, no es Navidad.
Esto no es así. Hay algo que vale más que cualquiera de las cosas que puedas regalar: TÚ. Muy en serio: Tú eres el mejor regalo de todos.
Las cosas se reemplazan o se compran más tarde. Si tú no estás, a ti nada ni nadie puede reemplazarte.
Al final, lo que recordamos de los buenos tiempos no son las cosas, sino las experiencias que vivimos. Más aun, las que compartimos con los demás en estas fechas con significado especial.
Es hora de ser creativo
Quizás no puedes regalar una camiseta de marca, pero sí una bonita, más barata.
Quizás no puedes regalar el frasco de colonia grande, pero sí el pequeño.
Quizás no puedes regalar un videojuego, un curso o un programa alucinante, PERO SÍ:
enseñar algo de lo que tú sabes,
jugar con tus hijos toda la tarde,
cantar villancicos en Nochebuena, apostando a ver quién desafina más,
organizar un maratón familiar de baile,
componer un poema, una canción, una tarjeta original de felicitación…
recolectar frases motivadoras y hacer una agenda casera con ellas,
tejer una funda divertida para “su” teléfono móvil,
cocinar un postre casero,
hacer un collage con fotos y material reciclado,
pasar una tarde cuidando a los hijos de tus amigos, para que ellos puedan cenar a solas por ahí…
¿Te falta dinero para comprar cosas? No te entristezcas.
Regala tu cariño, tu talento, tu ingenio, tu tiempo… Con eso te das tú mismo, que vales más que lo que tenga Bill Gates en el banco.
Y no olvides cuidar de ti, que también es un gran regalo para las personas que te quieren.
http://tusbuenosmomentos.com/2012/12/mejor-regalo-tu/