Para vivir una vida balanceada y mantener buenas relaciones con los demás, todo adulto debe tener la capacidad de decir “No” a la situación injusta, a la petición inconveniente, al abuso o, simplemente, a algo que no desea hacer. Sin embargo, ¡cuántas personas son incapaces de hacerlo y se llenan de obligaciones! Por acceder siempre y nunca hacer valer sus deseos, viven presas del resentimiento y pasa justamente lo que trataban de evitar: sus relaciones sufren y se deterioran; su respeto y autoestima toca fondo. ¿Eres tú una de ellas? El primer paso para salir de esta condición, es reconocerla. Responde “Cierto” o “Falso” para descubrirlo.
1. A menudo me sepulta una avalancha de tareas y obligaciones que yo siento les corresponden a otros.
Cierto
Falso
2. Cuando una persona me hace un cuento trágico, no puedo negarle mi ayuda… aunque sé que me está manipulando.
Cierto
Falso
3. En el fondo, tengo el temor de que mi único valor radica en resolver, rescatar, ayudar y servir a los demás.
Cierto
Falso
4. No soporto ver la decepción o la ira en el rostro de otra persona si le digo que no a lo que me pide.
Cierto
Falso
5. Cuando alguien me pide un favor, o me propone algo que no deseo hacer, mi reacción automática es acceder, aunque luego me arrepienta. Es que en esos momentos mi mente se nubla y no se me ocurre una forma válida de negarme a su petición.
Cierto
Falso
6. A veces he logrado decir “no”, pero si la persona insiste, llora o me dice que esto es prueba de que no la quiero, vuelvo a ser cera blanda en sus manos.
Cierto
Falso
7. En el fondo, tengo mucha ira y resentimiento contra aquellos que siento me han impuesto algo que no deseo.
Cierto
Falso
8. Tengo fama de “buena gente” y de ser el/la “resuélvelo-todo” del trabajo o la familia.
Cierto
Falso
9. Tengo un secreto: una parte de mí cree que puedo hacer las cosas mejor que los demás.
Cierto
Falso
10. Creo que si yo fuera capaz de decir “No” cuando genuinamente lo deseo, mi vida daría un giro de 180 grados.
Cierto
Falso
LA SOLUCIÓN
Si respondiste “Cierto” 3 veces o menos: ¡Felicidades! Es cierto que alguna que otra vez cedes ante la presión ajena, pero no es algo recurrente ni que represente un problema para ti. Por regla general, disfrutas de un sano nivel de autoestima y sabes hacer valer tus derechos y darte a respetar.
Si respondiste “Cierto”: de 4 a 6 veces: Estás en un justo término medio. Para que no te inclines hacia el lado peligroso de la cerca, lo importante es determinar qué personas o situaciones, específicamente, son las que te alejan del buen camino. Dicen que “guerra avisada no mata soldado”, y saber qué o quién es tu talón de Aquiles –y por qué– te ayudará a estar preparado cuando se vuelva a presentar la situación.
Si respondiste “Cierto” 7 veces o más: Tú lo has admitido: eres cera blanda en manos de los demás. Pero la realidad no es tan simple como parece. Cuando haces algo por otra persona en contra de tus deseos, en realidad tú estás en control (o si no… ¿quién fue quien accedió?). Lo que ocurre es que en tu mente tú ves solo dos posibilidades: acceder a los deseos ajenos o defraudar a esa persona. Y tú prefieres complacer antes que enfrentar la alternativa. El primer paso para salir de esta trampa es descubrir por qué eres incapaz de decir “No” a lo que no deseas o no te conviene. Repasa las preguntas 2, 3, 4 y 6. Determina cuáles de estos motivos te dominan: ¿no soportas ver la decepción en la cara de la otra persona? ¿Crees que tu único valor radica en lo que puedas hacer por ella? Una vez que identifiques tu punto débil, podrás trabajar en él. Una “herramienta” útil: muchas personas automáticamente acceden a cualquier petición, pues esto se ha vuelto un reflejo automático para ellas. Ante cualquier propuesta, aprende a “comprar tiempo”. No reacciones en el momento. Entrénate para siempre responder: “Necesito pensarlo/consultarlo/revisar mi agenda; más tarde te doy la respuesta”. Esto te permite componer tu respuesta, ensayarla y ofrecerla con autoridad. Si has entrenado a la persona para que te insista, no te desvíes de tu objetivo: repite la misma respuesta, palabra por palabra, hasta que la persona capte el mensaje.
http://vidasana.about.com/od/BALANCE/a/Sabes-Decir-No.htm