“DEJARSE IR A TRAVÉS DE LA INTOLERANCIA Y LA APATÍA”
Una cosa que durante años he mencionado repetidamente es que los reinos superiores no son lo que podrías pensar. Mucho de lo que se nos ha enseñado o de lo que hemos leído es bastante inexacto.
Aunque este no es un proceso simple, básicamente todo se enfoca hacia la sencillez y cómo responde e interactúa la energía consigo misma. Hay formas superiores e inferiores de energía vibracional creando cosas que se sienten bien y otras que no. Así que, no hay un significado para las cosas. El significado simplemente es lo que elegimos colocar en una manifestación particular. Algunas cosas podrían sentirse bien para una persona de acuerdo a cómo las interpreta, y podrían sentirse desagradables para otras personas. Una regla, entonces, podría ser que las cosas se sentirán bien o mal. Es así de simple.
Mientras comenzamos a vibrar más y más alto nos volvemos menos y menos coincidentes con lo que ha sido creado hasta ahora en este planeta y también a cualquier aspecto inferiormente vibracional de otros comportamientos y realidades humanas. Podría pensarse que, como nos estamos volviendo más espirituales, cada vez encarnamos una mayor compasión, mayor entendimiento y tolerancia a niveles superiores. Mientras progresamos a través de la ascensión y comenzamos a vibrar más y más elevadamente, nos encontramos volviéndonos muy intolerantes a cualquier energía inferiormente vibracional. Simplemente no podemos estar en su presencia por mucho tiempo y podríamos volvernos enojones y también frustrarnos con ella.
No hay lógica en esta locura. Hay una jerarquía en los niveles y dimensiones energéticos. Cuando alcanzamos realidades superiores, es muy difícil residir o pasar tiempo en las realidades inferiores. Simplemente ya no coincidimos con ellas. Esta respuesta también tiene otros beneficios. La intolerancia nos anima enormemente a crear más cosas en el mundo exterior que coincidan con cómo estamos vibrando, sintiendo y siendo en nuestro interior. Si tu realidad externa se siente espantosamente, seguramente estaremos inspirados para salvarnos nosotros mismos por medio de nuestra necesidad de sentirnos mejor creando maneras superiores de vivir y ser. Y no tolerando y rehusándonos a ser parte de la vieja realidad, por que literalmente ya no podemos digerirla, esto nos hace rehusarnos a participar, además de retirar cualquier energía que la apoye. Si no nos involucramos en algo y lo negamos, no puede sobrevivir porque no hay energía para que sea real y esté vivo. Simplemente cesará de existir porque no residirá en la conciencia de nadie.
A través de esta intolerancia también somos muy directos. Porque progresamos hacia seres humanos elevadamente vibracionales, descubrimos que ya no podemos pasear alrededor, sentarnos junto o mirar al arbusto, o tomar un camino largo para llegar a alguna parte. La energía superior se mueve en línea recta. No va de aquí para allá, inventa excusas o apoya a amigos y familiares aunque estén en situaciones poco saludables, o finge no ver nada. Es simple y directa. Nada de pasividad o incertidumbre indecisa.
Ya no es época de tolerar lo viejo y esperar. Es la forma superior o ninguna. A algún nivel sabemos esto, y algunas veces podemos encontrarnos dirigiendo las vibraciones inferiores muy directamente. De esta forma, es una manera superior de amar. Esto implica que no tengamos la capacidad de apoyar las formas inferiores de cualquier cosa. En realidad estamos apoyando y amando a través de apoyar las formas superiores a través de esta intolerancia. En realidad somos guerreros espirituales con verdades superiores y ayudando mucho a los demás. En los reinos superiores creamos a través de nuestra sociedad con la Fuente y como nosotros mismos nos estamos volviendo más y más la Fuente, ahora debemos conectarnos más profundamente para poder crear las formas superiores. Durante estos años de ascensión puede parecer que no vamos a ninguna parte. Puede parecer que nada lleva nuestro camino o que estamos recibiendo muy poco apoyo para obtener lo que deseamos.
En realidad este no es el caso. No deseamos crear cosas que no sean de una vibración superior o que no nos ajusten en un futuro cercano. Dicho de otra forma, no podemos crear desde el ego en los reinos superiores. Cuando no obtenemos lo que deseamos, generalmente es porque no estaremos en esa situación o realidad muy pronto, o que todavía no estamos listos. Si hay algo que sientas verdaderamente que debes tener, entonces no estás listo para recibirlo. Es irónico que siempre consigamos lo que deseamos cuando ya no lo deseamos. Lo que pasa aquí es que hemos perdido nuestros apegos, lo que nos coloca en una posición para crear perfectamente. Además, entonces no estamos creando desde nuestro ego. Todo esto es parte del proceso de ascensión.
A través de todo eso, algunas veces podemos desanimarnos mucho. Cuando nos desanimamos y soltamos una y otra vez y sentimos que todos nuestros sueños han sido destrozados, nos volvemos apáticos. Esto está perfecto. Nos coloca en un espacio de dejar ir. Simplemente no nos importa más. Esto nos hace que dejemos ir y liberemos la energía de los apegos. Entonces estamos residiendo en una energía neutral, sin agendas y esto permite que llegue mucho más de la Fuente. Y por supuesto, nos permite dejar ir muchas de las ilusiones”.