Ayudar a los demás…

Ayudar a los demás…

…es la mejor manera de ayudarse a sí mismo

Hoy en día, cuando todo el mundo parece estar luchando duramente por todo, encuentra que es en verdad difícil obtener lo que desea y necesita y, menos aún confiar en alguna otra persona.

Sin embargo, puede que le sorprenda saber que ayudar a los demás es realmente la manera más fácil de obtener lo que se quiere y, que toma mucho menos tiempo y esfuerzo de lo que uno pueda imaginarse. Lo más difícil de entender para mucha gente es que, cuando se ayuda a alguien, en realidad se logra muchísimo en experiencia y, que uno debería estar agradecido de estar en una posición que le permita ayudar a otros y no encontrarse requiriendo ayuda. Si tan sólo nos diéramos un momento para pensar en esto.

Un proverbio Chino dice : “Un dador es más afortunado que un receptor”; lo cual es perfectamente lógico ya que alguien que es capaz de dar significa que tiene algo que le sobra, mientras que una persona que requiere ayuda, carece de ese algo. Por lo tanto, no sólo es una manera de recuperar el equilibrio en el mundo, sino que, a menudo, uno descubre que dando energía positiva y canalizándola a través de nuestras acciones, recibirá lo mismo a cambio.

Esto no significa que debemos hacer algo para sentirnos bien o recibir algo a cambio. Más bien, cuando asociamos nuestros actos con una actitud positiva (o tener pensamientos positivos y actuar conforme a ellos), fomentaremos un estado mental positivo. Por ejemplo, involucrándonos en trabajos de voluntariado nos ayuda a apreciar nuestras propias vidas mucho más, aprendiendo acerca de las dificultades que otras personas tienen que superar. Ayudando a alguien en una tarea, desarrolla nuestras habilidades para enseñar y también refuerza nuestro propio entendimiento y conocimiento acerca de algo.

Ayudar a un amigo con trabajos de renovación, puede darnos un indicio sobre el mejor lugar para comprar cierta mercadería.

Si alguna vez ha ayudado a alguien y se dio cuenta de lo agradable que resultó dicha experiencia, entonces entenderá lo que quiero decir. Si siente que siempre está dando y no recibiendo, por consiguiente, esto podría deberse, ya sea a que está esperando demasiado por ayudar a otros (lo cual no debería ser su motivación) o, que ha obtenido más de lo que realmente necesita (por lo cual debería sentirse agradecido). Lo único que no puede obtener por ayudar a otros es egoísmo, por lo que si ha logrado demasiado, entonces debería empezar ayudándose a sí mismo, deshaciéndose de algún exceso, ayudando a los demás.


Fuente: www.creaturealidad.com