A través de la práctica del Reiki se podrá purificar y limpiar la energía y por ende, es muy común que luego de unas sesiones o de varias veces de practicar el Reiki la persona empiece a sentirse raro, con deseos de llorar o también puede ser que esté muy irritable.
Lo que sucede es que en este momento energético, se han librado las energías acumuladas, aquellas que se han guardado pero que no son útiles y nada mas llenan un espacio en nuestra vida sin darle una buena utilidad.
A pesar de esto, como cada emoción que se ha guardado es algo que quiere dar un mensaje, desea brindarnos un aprendizaje, las sesiones de Reiki están asociadas por algún tipo de filosofía espiritual para el manejo emocional.
De esta manera la persona puede tener una percepción mucho más objetiva y amplia del porque siente lo que experimenta y porque se ve dificultada la libertad emocional a sus emociones.
El entendimiento de las razones anímico-emocionales de las molestias, malestares y de las enfermedades, da como producto una visión mucho más amplia de lo que somos en realidad, del porque nos enfermamos y sufrimos los malestares.
El Reiki nos ayuda a vivir de una manera mucho más placentera y a tener más confianza, no siempre sucede al instante, muchos procesos precisan un tiempo más extenso para comprender y liberar.
Con el Reiki aumentará nuestra capacidad de concentración, estaremos más conscientes, más sensibles y más atentos, pero muy especialmente nos ayudará a poder disolver nuestras estructuras mentales rígidas.
http://www.creceroperecer.com/2011/03/12/reiki-libertad/