La atracción es una ley del universo, así como la ley de la gravedad o la ley de la gestación.
Cuando queremos crear mejores condiciones de vida, ser más felices, ganar más dinero o simplemente disfrutar de más tiempo libre para dedicarnos a lo que más nos gusta, preferentemente deberemos atraer una calidad de vida acorde.
Algo importante a considerar en la ley de atracción, es que todas las situaciones que vivimos día a día, las creamos nosotros mismos, y las generamos a través de nuestros pensamientos predominantes.
Esto significa, que las cosas malas que nos pasan, son absolutamente nuestra responsabilidad, y no el resultado del azar y la mala suerte.
Cualquier condición de vida negativa puede ser cambiada y cualquier situación positiva y elementos situaciones ventajosos pueden ser desaprovechados tan solo con un cambio de perspectiva o enfoque.
Y dichas perspectivas internas, se encuentran en un solo lugar… Nuestra mente.
Para muchas personas no es claro cómo con nuestros pensamientos atraemos nuestras situaciones. Pues bien, simplemente nuestros pensamientos conforman nuestro carácter que nos brinda una posición concreta frente a la vida para tomar decisiones.
Con las decisiones que tomamos, obtenemos ciertos resultados, y con dichos resultados (y sus impulsos hacia nosotros) reaccionamos y nos sentimos de cierta forma.
Por lo tanto, cambiando nuestra forma de pensar, cambiamos nuestros resultados, y alterando nuestra negatividad, depresión y autoflagelamiento, podemos lograr muy seguramente vivir una mejor vida.
Sin embargo, el problema para muchas personas es el hecho de que sus diálogos internos son sumamente negativos. Se dice que en promedio, un 80% de los pensamientos de las personas son de alguna manera negativos ¡Increíble!
Esto significa que de unas 14 horas que hablamos con nosotros mismos al día, poco más de 11 horas lo hacemos de manera destructiva.
Si podemos incrementar nuestros niveles de optimismo y positivismo, es claro que los resultados que obtendremos de las decisiones que acordemente tomemos, serán mucho más plenos.
Esto, claro, teniendo en cuenta que no es suficiente simplemente pensar, imaginar y divagar visualizando una vida mejor, sino ACTUANDO de manera acorde.
Finalmente, lo más importante es tener claro lo que se quiere, y enfocarse en atraer todas las condiciones necesarias para triunfar. Eso si, buscando lograr la felicidad en todas las acciones que se realicen.
Si tienes la felicidad como estilo de vida ideal, y persigues tus sueños con dichos estándares, atraer lo que deseas será tan fácil, como soñar despierto. Y lograr tus metas, se convertirá en una cuestión de simple tiempo.
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por gerundio Hoy a las 11:19
