Entregarlo todo a la vidaEn ocasiones, en alguna entrevista o en alguno de mis seminarios, he encontrado a algunas personas defendiendo su mediocridad con el comentario “Pero todos no podemos ser grandes realizadores…”. Mi respuesta siempre es la misma: “¿Y por qué no?” Nadie tiene porque conformarse viviendo una vida muy por debajo de su verdadero potencial. Millones de personas quedarían alucinadas si por unos instantes fuesen capaces de vislumbrar todo lo que podrían conseguir si decidiesen de una vez por todas entregar todo su potencial a la vida.
¿Te has preguntado alguna vez que puntuación te darías en una escala de 1 a 100, si el 1 representase que desatas una ínfima parte de tu potencial y el 100 representase absolutamente tu máximo potencial?
¿En qué nivel te encuentras en la actualidad?
Responde con sinceridad a estas preguntas, y a continuación formúlate las dos preguntas siguientes que son mucho más importantes:
1.-¿Qué acciones puedo emprender ahora mismo que me hagan mejorar mis estándares de rendimiento?
2.-¿Que he de hacer para comenzar a entregar por mi parte el cien por cien de mi potencial a la vida?
Y a continuación empieza a tomar acción ahora mismo. Muchas personas se excusan bajo la idea de que “los cambios tardan mucho tiempo en llevarse a cabo”. Esto es un gravísimo error. Los cambios, si una persona quiere, se producen en una milésima de segundo, a la velocidad de la luz. Simplemente lo que se tarda en tomar una verdadera decisión. El instante que tarda en desatarse un simple pensamiento. Tu puedes pasar de ser una persona abatida a estar totalmente entusiasmado en una milésima de segundo. Puedes pasar de la inseguridad a la certeza en una milésima de segundo. Y puedes pasar de un estándar de rendimiento mediocre a un estándar de excelencia en una simple milésima de segundo. Solo te separa una decisión. Una decisión firme, comprometida y apasionada es todo lo que marca la gran diferencia.
Basta ya de excusas y objeciones. ¡Eleva los estándares! Empieza a preguntarte con frecuencia ¿Y por qué no?
Cuando ya no esté aquí, solo quiero que quienes me conocieron de verdad puedan decir: “¡Lo entregó todo a la vida!”. Deseo para ti ese mismo compromiso de entrega y pasión.
Fuente:
http://www.clubsuperacion.com/entregarlo-todo-a-la-vida/
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