Como todos sabemos los pensamientos nos acompañan constantemente, el dialogo mental ocurre sin previo aviso, sin darnos cuenta, estamos siempre pensando desordenamente o si tenemos un poco de suerte pensando algo específico (enfocado quiero decir).
También hemos aprendido que nuestros pensamientos definen nuestras emociones, que cómo nos sentimos va a depender de lo que estemos pensando, de allí que revisar nuestras autoverbalizaciones de forma concreta y ordenada puede ayudarnos muchísimo en cómo podemos sentirnos.
Armonizar nuestro dialogo interior es el primer paso para nuestro bienestar pues siendo coherentes y dirigiendo el pensamiento podremos cambiar hábitos y por ende nuestros resultados.
Muchas veces vivimos pensando que esta gama variada de pensamientos son nuestros pero realmente no es así, pareciera que la “cabeza piensa sola”- me comentó un cliente una vez-, pero no es así. Mi invitación hoy es que observes tu dialogo interior, ¿qué te dices y te repites constantemente hasta el cansancio? ¿Cuáles son los pensamientos que te han acompañado en los últimos días?
¿Esos pensamientos son de índole amorosa, confiada, elevada? ¿Te dan seguridad y te hacen sentir bien? O por el contrario tus pensamientos te agreden, te disminuyen o te limitan?
- “Soy una inútil”, “Estoy cada día más gorda(o)”, “Estoy viejo” “No puedo”, “No van a estar interesados en lo que voy a mostrarles” “No tengo dinero”, “Qué voy hacer” etc
Reflexionar sobre este aspecto abrirá un nuevo horizonte para ti, un ejercicio sencillo que puede ayudarte a descubrir cómo es tu dialogo interior, es llevar una libreta contigo y anotar cada vez que te descubras pensando algo negativo o de corte negativo sobre ti misma (o), sobre otras personas, eventos o situaciones, al final del día te sorprenderás. Muchas personas realmente creen que nunca piensan nada negativo, que son optimistas y positivas pero cuando han hecho este ejercicio se percatan de la continuidad de sus mensajes negativos. Imagínate recibir diariamente pensamientos como estos, semanalmente, cotidianamente.
Convertir tu dialogo interior en tu mejor aliado puede transformar tu vida, armonizando lo que piensas, lo que sientes y enfocándote en lo más elevado que existe cambiarás tu realidad, recuerda que tu realidad es sólo una percepción tuya, puedes cambiarla, ajustarla y recrearla si cambias tu dialogo interior.
“Tu atraes hacia ti aquello en que te enfocas, así que tiene sentido enfocarte en lo mejor, en la cosa más elevada que conozcas”
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