Nuestra manera de reaccionar ante los contratiempos y los trastornos que se derivan de nuestras relaciones con los demás puede originarse en la cabeza, es decir, en el distanciamiento, la objetividad y el desapego, procurando buscar una explicación lógica o razonable a la situación, o algún propósito o significado por el cual el problema, a menudo ocasionado por un desencuentro con alguien, se ha producido. Por otro lado, es probable que nuestra particular forma de reacción tenga más que ver con el corazón, o sea, los sentimientos, la tristeza, la compasión, la preocupación, la melancolía, etc, y sentirnos culpables o presos de una angustia de preocupación y desasosiego en relación con alguien o con nosotros mismos, provocado todo ello por alguna situación de abandono, choque de intereses o malentendido con los demás. Por último, nuestra conducta de reacción ante una dificultad con otras personas puede producirse en el vientre, es decir, en las tripas, dando lugar a resentimientos, cólera, deseos de venganza, rencores, algo así como un retorcimiento interior por el que, si no nos distanciamos o miramos desde el corazón, podemos llegar a ser muy destructivos con los demás y, a la vez, muy autodestructivos. Cada signo del zodiaco tiene una forma predominante de reaccionar ante las dificultades con las personas de su entorno, aunque las tres maneras citadas, la de la cabeza, la del corazón y la del vientre, pueden coexistir y darse de manera simultánea o sucesiva en una misma persona.
Partamos, por ejemplo, de la siguiente escena. Supongamos que hemos quedado con alguien, que puede ser nuestra pareja o un amigo, da lo mismo, para hacer algo juntos (ir al cine, al teatro, al fútbol, etc.) y que ese alguien nos deja plantados. De acuerdo con lo que he planteado, podemos reaccionar de tres maneras diferentes:
a) Desde la cabeza, o sea, manteniendo una actitud desapegada y objetiva, tratando de buscar una explicación a lo ocurrido, como harían los signos de Géminis, Libra o Acuario. En este caso, es probable que miren su agenda por si se han equivocado de fecha, o piensen, de manera objetiva y distanciada, sin dejar que la situación les afecte, en qué ha podido pasarle a la otra persona para que no se haya presentado. Por su parte, Sagitario pensaría en un propósito último o trascendente en lo que ha pasado, y divagaría sobre la posibilidad de que ese día no era el momento de verse, o en que tal vez Dios o el destino nos tiene reservado algo diferente a lo que debemos prestarle nuestro interés, lo cual habría sido imposible si se hubiera producido la cita. Virgo y Capricornio también pueden ser dados a reaccionar ante algo así desde la razón y la búsqueda de explicaciones, aunque no de forma tan clara como con los otros signos. En general, aparentan no haberles importado demasiado lo ocurrido.
b) Desde el corazón, o sea, dejándonos embargar por los sentimientos de preocupación, la trsiteza, la melancolía... Cáncer, Piscis y Leo pueden ser signos que se angustien por lo que le haya podido pasar a la otra persona para no haberse presentado a la cita, o se sentirán tan mal que puede ser que se quieran recluir del mundo, aislarse y refugiarse en la música o en la poesía, en escribir o en atormentarse por un sentimiento de culpa acerca de lo que ha ocurrido, hasta el punto de sentir que pueden haber sido los responsables de alguna tragedia.
c) Desde el vientre, es decir, desde el rencor, el resentimiento, la rabia, la cólera, la ira, los deseos de venganza... Aries, Tauro y Escorpio pueden ser signos que reaccionen así, y piensen en maquinar alguna truculenta maniobra vengativa para resarcirse del daño ocasionado. Cáncer también puede reaccionar de esta manera, así como Virgo o Capricornio. En estos casos, la psicología profunda apunta a que, en realidad, la rabia que se reproduce en situaciones como esta está más relacionada con circunstancias del pasado que con la presente, lo que explicaría en muchos casos la reacción desproporcionada ante dichos acontecimientos.
Todo esto es a nivel muy general, pues en muchos casos somos muy dados a reaccionar ante situaciones de este tipo desde la cabeza, el corazón o el vientre, si bien según el signo zodiacal tendemos a hacerlo de la manera que se ha explicado. También habría que ver la carta natal, pues un Acuario, que reaccionaría desde la cabeza ante una situación de abandono, podría hacerlo desde el vientre si tiene varios planetas en Escorpio, así como un Cáncer podría reaccionar desde la cabeza si tuviese varios planetas en Géminis, en lugar de hacerlo desde el corazón. Pero, en líneas generales, cada signo se identifica más con una pauta de reacción que con las otras dos.