Después de una armonización de Reiki, (o en nuestra vida cotidiana) ¿qué podemos hacer para mantener equilibrados o alineados los chakras, no perder nuestra energía vital, y mantener el aura iluminada?
Mente positiva:
Nuestro despertar siempre debe ser positivo, procurando que tu mente decrete, por ejemplo: hoy será un día maravilloso lleno de posibilidades y probabilidades nuevas, con metas que cumplir y cosas que aprender.
Levántate feliz, con buen ánimo, siempre con una sonrisa, sin preocupaciones sabiendo que todo va a estar bien.
Beber agua:
Algo muy importante y muy pocas personas lo hacen, comencemos a hacerlo.
En las noches hay mucho trabajo espiritual además nuestro organismo se equilibra, todos nuestros órganos ejercen un trabajo de depuración, y nuestras células se regeneran. El cuerpo hace su función. Es por esto que hay que tomar agua al levantarnos para poder hidratarnos y limpiar nuestro organismo de todo ese trabajo que hemos hecho al descansar. Ahora, si es acompañado con el zumo de un limón, mucho mejor, porque el limón alcaliniza el organismo y tiene propiedades muy buenas para el organismo.
Tomar luz:
Hay que comenzar a darle mucha importancia a esto, ¿qué quiere decir tomar luz?
La respiración es algo fundamental para nuestras células, ellas se alimentan de oxígeno, pero oxígeno puro. Entonces respiremos conscientemente inhalando luz por la coronilla y que recorra todo el cuerpo, hacemos pausa para retener vida en nuestro chacra base, y luego pasar al corazón que es como un filtro para dejar ir, exhalar todo con amor, hacer una pausa ahí también, para luego retomar la luz que nos traerá lo nuevo y así sucesivamente.
Tomate 5 minutos de tu tiempo en esta constante y agradable respiración. Al terminar verás todo con más claridad y te sentirás recargado lleno de energías para comenzar un nuevo día con mucha alegría.
Agradece:
Hay que agradecer a la vida un nuevo amanecer, un nuevo comienzo, una oportunidad para co-crear con el hoy lo que cosecharás mañana.
Cuida tu energía:
Hay que ser conscientes de que todo lo que des te será devuelto, así es que procurar que lo que des sea siempre con amor. No juzgues, el camino del otro no es igual al tuyo, y no impongas el tiempo de tomar conciencia del otro, ya que no es igual al tuyo.
Cuida tus palabras:
Antes de echar palabras al viento salidas de tu ego, que lo único que hacen es herirte a ti mismo (lo que das regresa), aprende a que tus palabras nazcan del corazón, que salgan del alma, que sean palabras que armonicen tu espíritu, no que creen desarmonía en tu interior, que tus palabras endulcen tu ser, no que agríe tu espíritu.
Ama a tu prójimo como a ti mismo:
Esto suena familiar y muy cierto, practícalo de la siguiente manera recordando que todos estamos unidos, Todos Somos Uno.
La otra persona es tu espejo, y él o ella te darán los mensajes necesarios para ir trabajando tu interior, ir desatando nudos, ir equilibrando el ego. Mirando al otro es como aprendemos, ámalo y te amarás tú mismo, crecerás junto con él o con ellos para ser mejores personas y lograr ser auténticos
Sonríe siempre:
Tu nuevo amanecer siempre debe estar acompañado de risas, saca toda esa belleza que hay en tu interior, que la alegría desborde de tu ser.
No hay como regalar una sonrisa a todo ser que contactas, al dar sonrisas recibes sonrisas.
Dicen que el reír eleva la vibración de las personas que lo hacen, por lo tanto eleva la vibración del ambiente donde estés.
No juzgues:
La forma de sanar y el camino del otro no es igual al tuyo. Al juzgar a los demás lo estás haciendo contigo mismo. Sé flexible, acepta que de los errores aprendemos.
No impongas:
El tiempo de tomar conciencia del otro no es igual al tuyo, tu verdad no es igual a la de los demás, somos seres individuales, pues todos hemos acordado antes de venir a este plano, cuándo, cómo y dónde hacer nuestro trabajo espiritual, por eso hay que tomar la responsabilidad de lo nuestro.
Aliméntate sanamente:
La vibración de tu energía dependerá de tu alimentación. Hoy en día se está recomendando comer mucha verdura, fruta y semillas, pues ellas contienen mucha energía de luz. Yo no soy nadie para imponer o decir que lo mejor es ser vegetariano, eso lo decidirá cada uno, pero lo que si te puedo aconsejar es que consumas menos carne animal, ya que son alimentos que aportan mucha densidad.
También evita consumir azucares, alimentos envasados, chatarrería que contienen grasas saturadas.
Ponte en contacto con la Naturaleza:
Acude aunque sea un día a la semana a lugares donde haya mucha vegetación, cerca de un rio o cerca del mar, y pásalo en familia. Lo ideal es acudir a diario para oxigenarnos, estar un momento con nosotros mismos o ejercitar nuestro cuerpo.
Agradece tu día al llegar la noche:
Antes de acostarte, reflexiona sobre tu día, deja ir todo lo que pueda haberte causado malestar, acepta, perdona, sana enviando amor, sólo mantén en tu mente la idea de que vas a dormir plácidamente, para poder recargarte de energías nuevamente.
Vivamos el día libre de preocupaciones, teniendo la seguridad y la fe en que todo será como tiene que ser. Seamos bondadosos con nuestros semejantes. Trabajemos nuestro interior constantemente.
El equilibrio y armonía de nuestras energías dependerá de nosotros mismos, porque somos los verdaderos responsables del bienestar de nuestro cuerpo, mente y espíritu.
Ama a tu ser, cuídalo.
María Elena Prieto Pool.