Las emociones son alteraciones súbitas, rápidas e intuitivas de nuestro estado de ánimo que experimentamos casi sin darnos cuenta.
Son provocadas por ideas, recuerdos, pensamientos o acontecimientos que producen reacciones rápidas que conducen a actuar en función de lo que sentimos en ese momento.
Las emociones pueden ser positivas o negativas. Las negativas afectan a nuestro estado de ánimo y perjudican seriamente nuestra salud emocional. Por el contrario, las emociones positivas como la alegría, el sosiego, la felicidad, etc... nos permiten ser más inteligentes.
La emoción producida da paso a un estado de ánimo que denominamos sentimiento. Así por ejemplo, después de una emoción súbita de tristeza producida por una mala noticia (desastres naturales, hambre, accidentes..) nos produce un sentimiento de frustración, de impotencia, de decaimiento de no poder hacer nada, es nuestro estado de ánimo derivado de la emoción negativa, y que se prolonga en el tiempo, es más duradero que la propia emoción.
LAS EMOCIONES POSITIVAS
La emoción positiva es aquella que nos resulta sana y saludable: la alegría, la satisfacción, el amor, la generosidad, la tolerancia, la humildad...experimentarlas demuestra nuestra inteligencia emocional. Vivirlas en nuestras relaciones con los demás es la mejor manera de cuidar de nosotros mismos.
Las emociones positivas nos proporcionan algunos efectos como equilibrio, tranquilidad, relajación y aumenta nuestra autoestima. Producen salud emocional.
GENEROSIDAD TOLERANCIA HUMILDAD FELICIDAD AMOR COMPRENSIÓN ADMIRACIÓN SERVICIO AYUDA COMPAÑÍA SEGURIDAD ALEGRÍA SERENIDAD SOLIDARIDAD SABIDURÍA OPTIMISMO HUMOR CREATIVIDAD VALENTÍA INTEGRIDAD OBJETIVIDAD PERSEVERANCIA ENTUSIASMO GRATITUD AMABILIDAD CABALLEROSIDAD HONOR RECTITUD INTELIGENCIA LABORIOSIDAD COMPAÑERISMO COMPARTIR CONFIANZA AUTOESTIMA DESPRENDIMIENTO ÉTICA VERDAD
LAS EMOCIONES NEGATIVAS
Las emociones negativas son las que nos resultan perjudiciales para nuestra salud, son insanas para nuestra persona. Estar a menudo enfadado, deseoso de..."me las pagarás", los celos, la envidia, la indiferencia...es como un veneno que nos hace daño a nosotros mismos porque nos hace infelices, nos impide sentirnos emocionalmente equilibrados, y todo ello nos aisla de lo que nos rodea. ¿Acaso le gusta a una persona dialogar con otra que siempre está alterada? Más bien no. Al contrario, se le evita, se le huye.
Las emociones negativas dañan las relaciones con los demás, causan conflictos. Sin embargo hemos de saber que las emociones negativas ocurren en nuestras vidas, debido a los acontecimientos y a la manera de "ver" que cada uno de nosotros tenemos, pero debemos tener la suficiente INTELIGENCIA EMOCIONAL para sabe CONTROLARLAS, y que no perturben nuestro ánimo. Necesitamos un buen estado de ánimo para vivir felizmente.
Es frecuente escuchar: " Es que tiene un carácter muy agrio". Lo que esto significa es, precisamente, que se está viviendo atrapado por la emociones negativas de la ira, de la ansiedad, de la envidia, de los celos, de la pérdida de los "nervios"...y ello da lugar a que se evite la relación con esas personas.
Sino se logra controlar bien las emociones negativas, éstas se hacen forman parte de nuestro "mal carácter". Debemos transformarlas en otras emociones positivas o, al menos, debemos controlar lo mejor posible, y evitar convivir con ellas más tiempo del necesario. También hay que reconocer que hay ocasiones en la que nos enfadamos, pero hemos de saber cómo y hasta qué punto.
Existen situaciones en las que nos ponemos nerviosos, pero hemos de saber actuar como actuar para relajarnos. Hay otros momentos en los que sentimos un gran deseo de vengarnos de algún compañero o amigo, pero hemos de saber valorar la situación y tomar decisiones favorables. Vivir con emociones negativas de manera permanente es como vivir con nuestro peor enemigo. Las emociones negativas alteran nuestro Sistema Nervioso Central.
AVARICIA CELOS ENVIDIA IRA TEMOR DESÁNIMO INDIFERENCIA ARROGANCIA RABIA TRISTEZA ABANDONO CULPA VENGANZA HISTERIA ABURRIMIENTO PENA VERGÜENZA GULA INSEGURIDAD ASCO HUMILLACIÓN PESIMISMO SOBERBIA INGRATITUD MIEDO PÁNICO FOBIA PEREZA OBSESIÓN MENTIRA ENGAÑO LASCIVIA FANATISMO EGOÍSMO EGOCENTRISMO POSESIÓN
La INTELIGENCIA EMOCIONAL no consiste en "olvidar" las emociones, sino en APRENDER a manejarlas ADECUADAMENTE. POR EJEMPLO, LA ENVIDIA TRANSFORMARLA EN ADMIRACIÓN.
Las emociones son fenómenos psicofisiológicos continuos que nos permiten adaptarnos a los cambios de nuestro entorno. Psicológicamente, alteran la atención, condicionan nuestra conducta e incluso activan la memoria.
Desde el punto de vista fisiológico, además, las emociones producen respuestas en el cuerpo, en la forma de expresiones faciales o tonos de voz, por ejemplo. Pero, ¿qué influencia tienen las emociones en el cerebro?
Una investigación realizada en la Universidad de Standford, en Estados Unidos, ha analizado el efecto sobre el cerebro de nuestra capacidad de regular las emociones según sigamos dos estrategias distintas: la reconsideración cognitiva y la represión expresiva.
Según explican los científicos del departamento de psicología de dicha universidad, Philippe Goldin y James Gross, en un artículo aparecido en la revista Biological Psychiatry, la estrategia de reconsideración cognitiva (pensar sobre lo que está pasando) tendría un impacto temprano en el proceso de generación emocional, mientras que la represión expresiva (evitar que se note lo que estamos sintiendo) sería una estrategia de comportamiento cuyo impacto es tardío, dentro del proceso de generación emocional. Cuando una emoción es reprimida, el cuerpo puede manifestar un síntoma específico y por lo general la persona disminuye su nivel de bienestar o felicidad.
Las emociones juegan un importante papel en la vida humana, por lo que regularlas resulta esencial tanto para nuestra salud mental como para nuestra salud física. A la inversa, la dificultad para gestionarlas puede suponer el surgimiento de desórdenes mentales y de ansiedad. Las emociones no dejan indiferente a la actividad cerebral. Por otro lado, la represión de las emociones activa la amígdala y la ínsula. Asimismo, reflexionar sobre las emociones ayuda a reducir el impacto negativo en el cerebro y en el psiquismo.
Cierra por un momento tus ojos e imagínate viviendo en un mundo sin emociones. No existiría la gula, el miedo, la envidia, el rencor, la depresión, el desprecio, el odio, el abandono, los celos, ninguna otra emoción negativa, pero por supuesto, tampoco existiría ni la solidaridad, ni la alegría, ni la dicha, ni la felicidad, ni la protección, ni el amor, ni la ternura, ni la generosidad, etc. ¿Cómo sería tu vida? ¿Tendría algún sentido?, realmente sería como vivir en un témpano de hielo. Las emociones le dan sentido a la vida, a la existencia, la enriquecen y hacen de esta y de la vida una experiencia deliciosamente inolvidable.
La RIQUEZA EMOCIONAL también tiene su precio, y estamos totalmente seguros de que estarás de acuerdo con nosotros, en que nuestro estado de bienestar y de salud, es mucho más agradable cuando conseguimos que nuestros sentimientos, emociones, pensamientos, palabras, y actitudes, fluyan en positivo, pero para que esto suceda es necesario tener también la experiencia de las emociones negativas y superarlas, porque si no las superamos, se quedan "atrapadas" en nuestro subconsciente, en nuestro cerebro derecho, dando origen a la enfermedad, el dolor y el sufrimiento...
La gran mayoría de nuestros problemas de salud, físicos o psicológicos están conectados a emociones negativas que quedaron "atrapadas", no necesariamente por pensamientos, palabras, actitudes o actuaciones propias, sino de otros, y que mientras no sean liberadas están bloqueando el libre fluir de nuestra Energía Vital.
EMOCIONES ATRAPADAS: Como hemos dicho, nuestro mundo emocional es muy rico y productivo, ya que, casi constantemente estamos viviendo emociones. Toda emoción, una vez experimentada, debe de ser transcendida, sin embargo, y muy especialmente, cuando vivimos emociones conflictivas y dolorosas el proceso metabólico emocional no es completado y la emoción se queda "atrapada" dentro del cuerpo, conviviendo con nosotros, a la espera de que llegue un tiempo mejor para poder ser liberada.
EMOCIONES ATRAPADAS Y ENFERMEDAD: Cada órgano está conectado a un Canal Energético de la Acupuntura y la Medicina tradicional China y este a su vez, sintoniza con un grupo de sentimientos, emociones, actitudes, etc. La gran mayoría de las emociones que quedan atrapadas generan desequilibrios en el campo energético, si el desequilibrio energético persiste, el órgano y todas las partes del cuerpo relacionadas con el Canal Energético alterado pueden empezar a trabajar en insuficiencia, y dar paso a diferentes problemas de salud.
Las emociones atrapadas pueden ser la causa de que hagamos juicios incorrectos, mal interpretemos comentarios, adoptemos actitudes que causan cortocircuitos en nuestras relaciones; las emociones atrapadas pueden crear estados depresivos, ansiedad, tristeza, etc. y como comentamos, pueden interferir en el funcionamiento correcto de los órganos y tejidos del cuerpo, y dar paso a diversos problemas de salud física, causando dolor, fatiga y enfermedad.
Muchas personas aceptan que tener ciertas enfermedades es algo normal e incluso lo justifican, como una consecuencia de ir envejeciendo, cuando en realidad esto no debe de ser así, como tampoco deberíamos aceptar como normal aprender a convivir con el dolor. Pero mientras que para solucionar los problemas sigamos mirando para otro lado, sin querer detenernos un momento y comprobar si las emociones tienen algo que decir al respecto, seguiremos dando la espalda a la vida, y a la realidad.
ATRAPADOS EN LA RED EMOCIONAL:
Si nos esmeramos, nos daremos cuenta que la mayoría de nuestra vida la vivimos atrapados en las Redes de las Emociones, claro está, que los hilos que tejen esas redes pueden ser de muy diversos materiales. Hay veces que los hilos son de oro, pero otras son autenticas alambres de púas. Un pensamiento positivo da origen a otros pensamientos positivos, que a su vez generan actitudes positivas y emociones y sentimientos de lo más agradables. Mientras sigamos conectados a esta corriente positiva estaremos creando una Red Emocional Positiva o Protectora en la cual nos sentiremos a gusto y felices.
Sin embargo, con demasiada frecuencia sucede lo contrario, al igual que un pensamiento positivo atrae a otro pensamiento positivo, los pensamientos negativos atraen a más pensamientos negativos, dando lugar a actitudes y sentimiento negativos que van creando una Red Emocional Negativa o Nociva que en la medida que crece nos atrapa haciéndonos esclavos de la infelicidad, del dolor y el sufrimiento.
Basta con observar un poco lo que sucede a nuestro alrededor para que nos demos cuenta que hay un grupo muy grande de personas recluidas en "la clínica del stress", que hay otros cuantos que viven atrapados en la insatisfacción personal, que hay otros muchos que perdieron su libertad a cambio de la esclavitud de ciertas adicciones (alcohol, drogas); el número de personas que ingresan a diario en las redes de la depresión o la ansiedad se cuentan por miles, etc. Hoy en día es más fácil crear una Red Emocional Dañina, que una Red Emocional Benéfica, y tanto usted, como nosotros, o el vecino, más de una vez nos hemos visto atrapados en la Red Emocional Negativa. Hay veces que es fácil salir de allí, pero hay otras, en las que romper las ataduras y liberar el dolor emocional no resulta nada sencillo...
LOS ANCLAJES:
Un paseo por el Jardín de las Emociones, tras las Huellas del Desequilibrio y el Dolor Emocional.
La gran mayoría de los problemas y conflictos emocionales vividos en soledad y no resueltos en los que nos vemos atrapados en la edad adulta, tienen su origen en acontecimientos del pasado, suelen ser aquellos sucesos que no fueron resueltos de forma positiva, los cuales actúan como una autentica ancla, la cual nos mantiene amarrados y nos impide avanzar resueltamente en el presente. Después de varios años trabajando con estos temas hemos podido constatar como en algunos casos, la mala relación madre hijo/a tenía su "anclaje negativo" en embarazos no deseados; miedo ante el futuro, traumas y especialmente claustrofobias estaban conectadas al momento del parto; frustraciones, impotencia, sentimientos de fracaso, de culpa; complejos de inferioridad; miedos, aprehensiones; creencias limitantes que provocan incapacidad e ineficacia; problemas de comunicación y relación; y otros muchos conflictos emocionales, tenían también su anclaje particular en las experiencias negativas vividas en los primeros 7 años de vida, periodo en el cual tiene lugar el buen o mal desarrollo de la autoestima.
Eso no quiere decir que a otras edades del ser humano grandes traumas emocionales vividos en soledad y no resueltos no lo afecten: el caso de la pérdida de un hijo puede producir una gran alteración energética en el seno derecho y un cáncer en la mujer y en el hombre puede producir un cáncer de próstata; la pérdida de la pareja puede producir un cáncer en el seno izquierdo; el sentimiento de abandono cuando murió el padre, puede producir problemas en la vejiga y la próstata.
Las emociones atrapadas, dan forma y fuerza a los anclajes, son las causantes de que levantemos los Muros Emocionales, ellas son también el origen de muchos problemas físicos y de nuestros quebraderos de cabeza emocionales, Liberarnos de ellas es mucho más fácil de lo que imaginamos, y esto nos brinda la oportunidad de vivir una vida plena y llena de satisfacciones.
En plena década de investigación sobre el cerebro, un médico alemán, el Dr. Ryke Geerd Hamer, manifiesta que si ese «ordenador central» de nuestro organismo sufre un impacto por la vivencia de conflictos biológicos, inseparables del desarrollo de la vida, se puede originar una codificación celular errónea que en el plano orgánico se manifestaría como cáncer.
Partiendo de esta posición, cabe la posibilidad de tratar la enfermedad con una terapia basada en el conocimiento del proceso por el verdadero agente de la curación: el propio enfermo.
LA QUINTA LEY BIOLÓGICA DE HAMER.
LA QUINTAESENCIA.
Lo que llamamos enfermedad es ahora considerado como parte de un programa biológico especial pertinente previsto por la naturaleza en el transcurso de los tiempos (SBS).
Esta quinta ley biológica o Quintaesencia constituye el alma de la Nueva Medicina. Algunos la llaman Medicina Sagrada.
Es la verdad que la Nueva Medicina se encuentra de alguna manera sacralizada por esta quinta ley que viene completando y concretando la quintaesencia. Piensen en las gigantescas perspectivas que se presentan.
Por un lado, la medicina sagrada es infinitamente científica, fundada en 5 leyes biológicas.
Por otro lado, nos vuelve hacia la medicina antigua de los sacerdotes de Asclepios, que en aquella época era muy humana...
Por una parte, ya no existen enfermedades en el sentido en el que se entendía antes, ya que todos los síntomas que se pueden constatar se explican fácilmente y se pueden controlar sin dificultad en la mayoría de los casos.
Por otra parte, vivimos en un mundo que no tiene realmente nada de biológico. ¡La medicina sagrada no significa que estamos en el paraíso, alejados de todo sufrimiento y de la muerte, en ningún caso! Más aquella medicina intelectual que pretende ser científica, desprovista de alma, apagada y sin compasión, la puede dejar el que comprendió y respeta las leyes y las reglas de la Nueva Medicina.
La medicina ahora se ha vuelto cósmica, ya que aplica las mismas leyes a los seres humanos, a los animales y a las plantas. Todo es programado ya para cada criatura en su patrimonio. Podemos hoy por vez primera comprender a los que nos rodean, los animales y las plantas. Es un privilegio poder vivir con tal conciencia, el poder respirar y compartir con los que nos rodean.
Para mí, es asombroso constatar que la enfermedad es un programa especial cuyo sentido es biológico. Esto replantea no sólo las terapias sintomáticas, sino que las vuelve absurdas. ¿Quién, después de este descubrimiento, quisiera intervenir en los maravillosos ciclos de la naturaleza, en este programa especial de la naturaleza con significado biológico?
Las enfermedades no existen ni han existido nunca con el sentido que le dábamos. No son más que fases distintas del programa especial adecuado (SBS) concebido por la naturaleza.
Comprendemos ahora por que el 80 al 90% de los animales se curan espontáneamente por sí solos, aún tratándose de cánceres. Los seres humanos también se curaban espontáneamente antaño, y en las mismas proporciones, antes de que existiese la quimioterapia, la radioterapia, la morfina: esa medicina en la que reinan el cinismo y el cianuro de potasio, medicina que hunde el paciente en el pánico y lo pone más enfermo. ¡Entendemos también ahora por que el 98% de aquellos pacientes enloquecidos se mueren, mientras el 95% de los pacientes tratados por la Nueva Medicina sobreviven!
El secreto de la curación está en ir liberando al ser humano de esas emociones atrapadas en el subconciente, como cuando pelamos una cebolla, las capas malas las vamos desechando hasta que encontramos las sanas y eso se logra con la maravilla de la magnetoterapia, vamos haciendo terapias de Liberación de Emociones Atrapadas y la persona se va sanando, porque muchas patologías se originan en esas emociones que generan interferencias energéticas en los diferentes órganos y por ende enfermedades.
Fuente: internet - Autor: Desconocido