Existen muchos factores por los que puede deteriorarse la comunicación entre dos personas dentro de una relación, ambos integrantes tienen consigo patrones de comportamiento aprendidos, creencias, miedos, traumas, condicionamientos y hábitos, que muchas veces bloquean la capacidad de establecer una comunicación abierta, clara, sincera y objetiva.
Uno de los patrones que más afectan la comunicación, es nuestra incapacidad de reconocer nuestros propias necesidades y pedir que sean satisfechas, en su lugar, siempre esperamos que el otro adivine qué es lo que necesitamos y si no lo hace, lanzamos sobre el o ella nuestra carga de frustración, insatisfacción y angustia.
Otro gran obstáculo es que nos cuesta mucho reconocer nuestros errores, la mayoría de nosotros, en nuestra infancia, aprendimos que cometer errores era sinónimo de rechazo, desaprobación, humillación, vergüenza y por lo tanto abandono y ahora el simple hecho de aceptar que estamos cometiendo un error, detona en nosotros todos esos miedos subconscientes, por lo que nos defendemos y damos mil excusas antes de aceptar que nos hemos equivocado.
Este ejercicio no tiene la capacidad de sanar todos estos patrones y miedos inconscientes, pero si puede ser una guía para ayudar a dos personas a hacer un poco de conciencia sobre los factores que pueden estar afectando la comunicación.
También tiene la intención de trabajar las dificultades desde el espacio del amor, ya que es solo desde este lugar, desde donde podemos realmente aprender a sanar y superar nuestros obstáculos.
Este ejercicio fue la respuesta a mi oración, porque dos personas a quienes amo profundamente puedan resolver sus problemas de comunicación, pero puede aplicarse en todo tipo de relaciones, aunque el formato esté expuesto para una relación de pareja.
Ya sea que te hayas topado con este ejercicio y desees compartirlo con tu pareja, o que tu pareja te haya entregado el ejercicio, el primer paso y el más importante es que lo revises con toda calma, en un momento de tranquilidad.
Después de leerlo detenidamente, consulta con tu corazón, con tus sentimientos y elige, decide si estás dispuesto/a a comprometerte realmente de principio a fin y a llevarlo a cabo hasta sus últimas consecuencias, si no te sientes cómodo/a o no te gusta y sientes que no es útil para ti, o crees que no puedes comprometerte por la razón que sea, lo mejor es que le digas a tu pareja que en este momento no te sientes capaz de llevarlo a cabo.
Si eliges hacer el compromiso de realizarlo, toma en cuenta que este compromiso lo estás haciendo contigo y con nadie más, por que estás dispuesto/a y porque sientes que puede ser de beneficio para ti en primer lugar y para la otra persona.
Este ejercicio tiene una duración de 3 meses de principio a fin y requiere que le dediques cuando menos 15 minutos diarios de tu tiempo para llevarlo a cabo.
Puedes comenzar cualquier día de la semana, pero es importante que ambos empiecen el mismo día.
Es importante que compres una libreta para hacer este ejercicio, también compra unas hojas de papel carbón para hacer copias de ciertas cosas. Si te es más fácil escribir en tu computadora, también puedes hacerlo.
Busca un espacio de aproximadamente 15 minutos en donde nadie te interrumpa, ni llamadas, ni niños, ni otras personas, puede ser a cualquier hora del día, en la noche, o durante el almuerzo, elige el horario que más te acomode.
Comienza por cerrar tus ojos un minuto y toma un respiración profunda, trata de relajarte y sentirte en tu centro, pide ayuda a un Ser de Luz, puede ser Dios, Jesús, María, tu ángel, un santo o quien tu sientas, puedes hacer una oración y pedir que te acompañe durante todo este proceso con claridad, sabiduría, humildad, paciencia, tolerancia, compasión y sobre todo, con mucho amor.
Con los ojos cerrados enfócate en tu corazón y conéctate con el sentimiento de amor, conéctate con el amor más puro e incondicional que puedas sentir, para esto puedes traer la imagen de tus hijos, de la naturaleza, de Dios, o lo que a ti te inspire este tipo de amor.
Ya que te sientas conectado/a con el amor, comienza a llevar a tu mente hacia el pasado y déjate ir, viaja hacia el primer encuentro que tuviste con tu pareja, a ese momento cuando por primera vez te comenzó a atraer, la primera vez que sentiste algo especial por él o ella, conéctate con los sentimientos, los pensamientos y las sensaciones.
Toma tu libreta y comienza una lista de las cualidades que encontraste en el o ella en esa ocasión, ¿qué fue lo que te atrajo?
El último día de la semana, toma esa lista y léela completa, puedes pasarla en limpio si lo deseas, o copiarla… puedes ponerla en un papel que te guste y colocarla en un sobre, puedes agregarle una tarjeta o cualquier detalle que se te ocurra.
Ese día hagan una cita para encontrarse durante 15 minutos a solas, en algún lugar donde no sean molestados ni los interrumpan.
Siéntense o párense frente a frente, coloca tu mano derecha sobre el corazón de tu pareja y coloca tu mano izquierda sobre su mano derecha en tu pecho y cierra tus ojos, conéctate con todos esos bellos recuerdos que escribiste en esa lista y siente todo ese amor que has sentido por él o ella.
Abran los ojos y durante aproximadamente dos minutos, mírense a los ojos sin hablar, trata de entrar en su mirada y de encontrar en ella a esa persona de la que te enamoraste, sigue conectado/a con los recuerdos bellos, con sus cualidades, con todo el amor que puedas sentir, no es necesario que se digan nada, simplemente sientan la conexión.
Entréguense las cartas que han escrito durante esta primera semana, no es necesario que las lean uno frente al otro, ya que estarán trabajando con esa carta durante la siguiente semana.
Nuevamente prográmate para estar contigo durante 15 minutos cada día, inicia cada día con la relajación y la oración y conectándote con el amor incondicional, pide a ese Ser de Luz que te está acompañando, que te ayude a abrir tu corazón para RECIBIR, siente como se abre tu corazón y lee la lista que te dio tu pareja, déjate sentir todos los bellos recuerdos que tiene de la relación, déjate sentir todas las cosas bellas que piensa de ti, recibe todo el amor que ha sentido por ti.
Repite lo mismo durante toda la semana y el último día, nuevamente hagan una cita para estar a solas durante unos minutos y repitan el ejercicio de conexión con el corazón y los ojos.
TERCERA SEMANAEn esta semana vas a comenzar una nueva lista, en esta ocasión vas a anotar en la lista todas las cosas que no te gustan de tu pareja.
Nota: Está prohibido utilizar dos palabras en esta lista: SIEMPRE Y NUNCA. (Ejemplo: me molesta que “siempre” estás de mal humor, o me enoja que “nunca” me haces caso cuando te hablo.)
Comienza como siempre por cerrar los ojos y relajarte, puedes hacer una pequeña oración y pedir ayuda a ese Ser especial, puedes pedir claridad, justicia, compasión, tolerancia, equilibrio y nuevamente conéctate antes con el amor incondicional. También puedes conectarte con todas las razones por las que amas a esta persona y las razones por las que te ama a ti.
Comienza tu lista y ve anotando todos los días los detalles, hábitos, costumbres, actitudes, palabras, etc. Que no te gustan de tu pareja.
Un ejemplo puede ser:
- Citación :
- – Me molesta que seas necio y no reconozcas tus errores.- Me molesta que no le des importancia a mis necesidades.- Me molesta que dejes tu ropa tirada todos los días.- Me molesta como me pides las cosas.- Me molesta que ya no cuides tu físico y te dejes engordar.- Me molesta como tratas a mi familia.- Me molesta que ya no tienes detalles conmigo.
Cada día, después de anotar las cosas que no te gustan, toma cada punto que escribiste y explícale a tu pareja cómo te gustaría que fueran las cosas.
Tomando el ejemplo anterior:
– Me gustaría que reconocieras tus errores y estuvieras abierto/a a modificarlos.- Me gustaría que le dieras importancia a mis necesidades.- Me gustaría que recogieras tu ropa todos los días.- Me gustaría que fueras más amable para pedirme las cosas y no me regañaras como a un niño/a.- Me gustaría que pusieras más cuidado en tu arreglo personal y te pusieras a dieta.- Me gustaría que fueras más amable con mi familia los domingos.- Me gustaría que volvieras a tener detalles conmigo.
Repite el mismo procedimiento toda la semana.
Como esta parte del proceso puede detonar mucho enojo, has un esfuerzo por ser paciente y tolerante y por ningún motivo discutas ninguno de los puntos de tu lista, aunque te cueste trabajo, esta semana no se debe tocar el tema.
Puedes tener a la mano tus dos listas anteriores, la que tu escribiste y la que te escribieron, para que cuando tengas ganas de ahorcar a tu pareja puedas conectarte también con la parte buena, esto te puede ayudar mucho a enfocarte en el amor y a disolver el enojo.
Pide a este Ser que te inunde de paciencia, tolerancia, compasión, equilibrio, paz y armonía.
Al terminar la semana, pon la lista en un sobre y entrégala a tu pareja, nuevamente puedes darle un detalle, una tarjeta o algo.
Hagan una cita para entregarse la lista y si ambos están dispuestos, vuelvan a hacer el ejercicio de verse a los ojos con su mano derecha en el corazón. Si el otro no está dispuesto a hacer este ejercicio, respeta su elección, puede estar pasando por un momento de enojo y necesitar su espacio, es importante que ambos respeten este espacio, con la conciencia de que están haciendo esto para mejorar la relación y la comunicación.
CUARTA SEMANANuevamente has un espacio diariamente de 15 minutos para estar a solas. Comienza por relajarte, conectarte con el amor incondicional y has tu oración o petición a ese ser que te acompaña.
El primer día de la semana vas a leer la lista que te dio tu pareja.
Es muy probable que se detonen en ti alguno de los siguientes sentimientos:
– Ira- Rencor o resentimiento- Tristeza- Culpa- No ser lo suficientemente bueno/a- No merecer o ser indigno/a- Vergüenza- Miedo al abandono- Miedo al rechazo y la desaprobación- Deseos de Venganza- Negación – Ganas de evadirte
Todos estos sentimientos son NORMALES, a NADIE nos gusta que otra persona nos indique nuestros defectos, debilidades o errores y por lo general nuestra primera reacción es negarlo, justificarnos o enojarnos. Si este es tu caso, has conciencia de ello, de nada te va a servir tomar este tipo de actitudes.
Cualquiera que sea el sentimiento que se detone es importante que NO LO JUZGUES, y es igual de importante que aprendas a identificar qué es lo que estás sintiendo, trata de permitir que todos estos sentimientos FLUYAN, no los reprimas, si sientes ganas de llorar, no dejes de hacerlo, si sientes mucha ira o mucho enojo, puedes tomar una raqueta de tenis, una escoba, un bat o algo y golpear un sillón, una cama o un cojín, aprende a dejar fluir tus sentimientos.
Todos tenemos derecho a sentirnos como nos sentimos, pero no tenemos derecho a descargar nuestros sentimientos en los que nos rodean, has conciencia de que ni tus compañeros de trabajo, ni tus empleados, amigos, hijos, vecinos o quien sea, son culpables por tus sentimientos, si te sientes mal, toma un momento para estar contigo y desahoga lo que sientas, pero se consciente de no descargar en otros tus sentimientos. Por supuesto es importante que durante esta semana seas conciente que al igual que para ti, para tu pareja no es fácil recibir la lista de cosas que te molestan y que es muy probable que esté haciendo un esfuerzo por ser paciente y tolerante.
Recuerda que estás en medio de un proceso de curación, estás haciendo esto para sanarte a ti, a tu pareja y a la relación, si en este momento te olvidas de esto y descargas todos tus sentimientos con tu pareja, no vas a solucionar nada, espera al final del proceso y pide ayuda a ese Ser especial para que te ayude a ver con claridad y para sanar todo esto que estás sintiendo.
El segundo día toma la lista nuevamente y revísala con detenimiento.
Vas a comenzar ahora a hacer tres listas diferentes, toma tres hojas por separado y en la parte superior anota en la primera hoja como título “COSAS QUE QUIERO Y PUEDO CAMBIAR” en la segunda hoja anota “COSAS QUE NO SE SI QUIERO O SI PUEDO CAMBIAR” y en la tercera anota “COSAS QUE NO QUIERO O NO PUEDO CAMBIAR”
Es importante que sepas que no todo lo que tu pareja quiere que cambies es necesariamente algo negativo en ti, muchas veces algo que nosotros consideramos una cualidad o habilidad, o es un valor importante para nosotros, para otro puede representar un defecto y el hecho de cambiarlo para agradar a esa persona, o para lograr su aprobación, o para evitar el abandono, es atentar con nuestra propia individualidad, dignidad y respeto.
Para determinar esto puedes hacerte preguntas como estas:
– ¿Si cambio esto, estoy negando una parte de mi que me gusta?- ¿Si cambio esto, estoy perdiendo mi dignidad?- ¿Si cambio esto, estoy perdiendo mi integridad?- ¿Realmente estoy dispuesto/a a cambiar este valor por otro que no me satisface?- ¿Estoy cambiando esto por agradar o que me aprueben, o realmente lo hago porque siento que me beneficia?- ¿Si cambio esto, seré mejor persona, no solo en la relación con el o ella, sino en general?- ¿Si cambio esto, estoy negando mis propias necesidades?- ¿Si cambio esto, me siento miserable?- ¿Si cambio esto le estoy entregando mi poder?
Toma la lista que te dio tu pareja y anota en estas tres hojas cada punto como lo vayas sintiendo, divide toda esta lista en esas tres hojas por separado.
Si tienes duda en algunas cosas o te sientes inseguro sobre donde colocarlas, no te apresures, al día siguiente vuelve a revisar la lista y sigue anotando.
Aunque hayas terminado las tres listas el segundo día, es importante que cada día revises nuevamente las tres listas, puede ser que el primer día que hiciste las anotaciones hayas sentido que no querías cambiar nada, o que no podías cambiar nada, pero igual al tercer o cuarto día, te das cuenta de que hay algo que si puedes o quieres cambiar y lo puedes pasar a la otra lista.
Al final de la semana, pasa en limpio tus tres listas, estas no tienes que entregárselas a tu pareja, son únicamente para ti, para que tu trabajes con ellas.
Ese último día, después de pasar en limpio tus tres listas, escríbele una carta a tu pareja, esta es la carta del PERDON.
Pídele perdón a tu pareja, en términos generales, por el daño que le has causado, por el dolor, por los malos ratos, por los errores, no tienes que pedirle perdón por cada punto de su lista, simplemente has algo general como lo siguiente:
Te pido perdón por haberte lastimado, por cualquier daño que te haya causado, por los malos ratos, los enojos, las discusiones, por las lágrimas, por todo, de verdad, perdóname.
Y a continuación perdónala/o dentro de la misma carta:
Y yo te perdono a ti también por todo el daño, dolor, malos ratos, enojos, y sentimientos que me has provocado…
Este es un ejemplo muy breve, puedes extenderte todo lo que tu quieras, pero lo importante aquí es que realmente te conectes con el sentimiento del perdón, con la verdadera intención de perdonar el daño que te han causado y de pedir perdón por el daño que tu has causado.
El perdón es la energía que nos libera para poder amar, comunicarnos, sanar, crecer y evolucionar, todas las cosas y personas que mantenemos sin perdón en nuestras vidas, son como cadenas o grilletes que nos mantienen a nosotros atados a los sentimientos de celos, rencor, resentimiento, odio, temor.
Nuevamente has una cita con tu pareja y entrégale la carta del perdón, no le entregues tus tres listas, estas son únicamente para ti. Lee en voz alta tu carta de perdón frente a tu pareja y escucha su carta de perdón, ábrete a recibir ese perdón en tu corazón y a perdonar, no tienen que hacerse promesas de cambiar, ni explicar qué puntos están dispuestos o no a modificar, solamente concéntrense en el acto del perdón.
Si ambos se sienten dispuestos a hacer el ejercicio de la conexión con los ojos y el corazón ¡Adelante! Pero si alguno no está dispuesto, nuevamente es importante respetar su espacio sin resentimientos.
QUINTA Y SEXTA SEMANASAl inicio de la siguiente semana, nuevamente has el ejercicio de relajación, conexión con el amor incondicional y pide nuevamente ayuda a tu Ser especial.
Toma la lista que tiene de título COSAS QUE SI QUIERO Y PUEDO CAMBIAR. Las otras dos guárdalas por el momento.
Toma de esta lista las cosas que sientas que es más importante cambiar en este momento, no importa que sea una o dos y has una carta de compromiso contigo mismo, para poner todo tu esfuerzo por cambiar esas cosas que estás dispuesto.
Puede ser algo muy breve como:
Yo Juan/a el 20 de junio del 2002 elijo para mi mismo/a modificar estas conductas, patrones, hábitos o errores que ya no me sirven más, porque amo a Luis/a y porque deseo con todo mi corazón que esta relación funcione, crezca, avance y evolucione y nos ayude a ser mejores como personas, como pareja, que nos ayude a crecer, a madurar, a aprender y que al sanar, crecer y superar nosotros estos problemas, le demos a nuestros hijos, o a la gente que nos rodea, un mejor ejemplo que los ayude también a ser mejores personas.
Guarda tu lista junto con esta carta en un lugar especial, como la Biblia, o un libro que te haya dejado algo, un álbum de fotos con bellos recuerdos o una cajita especial.
Si por alguna razón no escribiste nada en tu lista de “Si quiero y si puedo cambiar” continúa esta semana revisando las tres listas, quizá necesites más tiempo contigo mismo para resolverlo. En todo caso, si encuentras algo que quieras y puedas cambiar, sigue el procedimiento a partir de allí como se indica.
Durante los siguientes días y hasta completar las dos semanas, has un verdadero esfuerzo por cambiar las cosas que elegiste, concéntrate y pide ayuda a tu Ser especial y empieza a cambiar con hechos, con acciones, las palabras sobran si no hay hechos que las respalden, las promesas hechas a otros pueden ser fáciles de romper, tu compromiso es contigo mismo/a, con nadie más, así que pon tu acción en movimiento y demuéstrale a tu pareja que estás cambiando.
Ten paciencia, piensa que así como tu no puedes cambiar de la noche a la mañana, el o ella tampoco, no le exijas que a partir de ahora todo sea como tu quieres, permítele seguir su proceso, aplaude sus cambios, agradécele su esfuerzo, su disposición, aliéntense a seguir cambiando.
Si por ejemplo uno de los puntos era que dejaba su ropa tirada y ves que ahora la está levantando, dale las gracias, déjale una notita en la almohada agradeciéndole el detalle, comienza a enfocarte en lo bueno, en lo que está mejorando y no te enfoques en todo lo que todavía no está. Recuerda que tu tienes tu propia lista de cosas que no sabes si puedes o quieres cambiar, o tu lista de cosas que no quieres y no puedes cambiar, entonces no le exijas al otro algo que tal vez no puedes tu cumplir en su totalidad.
Camibar no es fácil, la mayoría de las personas le tenemos mucho miedo al cambio, pero cuando somos alentados, motivados y reconocidos por los cambios que hacemos, esa energía nos impulsa para continuar haciéndolos, si por el contrario, el otro se enfoca en lo que todavía no hemos cambiado y hace caso omiso de lo que si hemos logrado, esto nos va a desalentar para continuar creciendo y aplicando la acción en donde se necesita. Si hacen este pacto de ayuda y motivación, es muy probable que la lista de cosas se cumpla antes de lo que ambos podían haberse imaginado.
Al finalizar estos quince días, has una cita contigo mismo/a saca la carta de cosas que si te propusiste cambiar y revísala, ¿cuántas cosas si pudiste cambiar? ¿qué cosas no pudiste? ¿por qué crees que no hayas podido? ¿sientes que si haces un mayor esfuerzo podrías cambiarlo? ¿necesitas ayuda para cambiar algo? ¿cómo puedes pedir ayuda si la necesitas?
Si hubo algo a lo que te comprometiste y no pudiste cumplir, NO TE JUZGUES… cambiar toma su tiempo, no seas duro contigo, refresca y renueva tu compromiso, puedes volver a leer tu carta de compromiso y si lo sientes, puedes hacer otra, recuerda que es un compromiso CONTIGO, no hay nadie detrás esperando que lo cumplas, nadie sabe a qué te comprometiste, solo tu lo sabes…
Si lograste tu objetivo y cumpliste con todo lo que te propusiste ¡felicidades!
Revisa si hay algún otro aspecto en tu lista de SI QUIERO Y SI PUEDO CAMBIAR y has una nueva carta de compromiso.
Si toda tu lista está cumplida los primeros 15 días, enhorabuena, revisa entonces la lista de “COSAS QUE NO SE SI QUIERO O PUEDO CAMBIAR” quizá ahora con la motivación que has recibido de tu pareja, con el cambio positivo que ha dado la relación, te sientas motivado a cambiar algo que antes no sabías si querías o podías cambiar, tal vez incluso hay algo en la lista de “COSAS QUE NO QUIERO O NO PUEDO CAMBIAR” que desees intentar, o al menos mover a la lista de NO SE SI QUIERO O PUEDO…
En cualquiera de estos casos, es importante mantener el compromiso, volver a retomar lo que falta y no descuidar lo que ya se logró, si ya levantas tu ropa todos los días y ahora quieres trabajar en tener más detalles con tu pareja, no comiences a dejar tu ropa tirada otra vez y a darle una rosa cada día, el cambio tiene que ser consistente y perdurable, si de verdad existe el compromiso de cambiar.
SÉPTIMA A DOCEAVA SEMANAS
Al igual que las semanas anteriores, continúa haciendo los cambios con los que te comprometiste, poniendo el cambio en acción y manifestándolo en tu vida cotidiana, sigue alentando a tu pareja y motívala en cada detalle que logre superar y mantén un enfoque en los cambios positivos. Ambos continúan pasando por un proceso intenso de cambio y ninguno de los dos puede sanar todo en un mes, así que ténganse paciencia, amor, tolerancia y compasión y sigan motivando el cambio positivo, nuestra atención en algo genera energía, si tu atención está en el vaso medio vacío generarás frustración, pero si tu atención está en la parte medio llena del vaso, vas a generar una energía positiva de crecimiento y evolución.
Cada quince días, vas a tomar nuevamente tus tres listas y vas a revisar primero tus avances, también es importante que tu mismo te alientes y te aplaudas tus logros, puedes marcar tus cambios con un marcador de color, puedes ponerle un detalle, en fin, ve haciendo el inventario de lo que has conseguido, de tus éxitos.
También revisa si hay algo más que quieras integrar o que desees cambiar de lista y has tus cartas de compromiso cada quince días.
Si llega un momento en el que se agotaron las opciones, porque ya lograste los cambios que estás dispuesto a hacer, sigue comprometido con ellos aunque no agregues nada nuevo, solo refuerza el compromiso de lo que si pudiste cambiar.
ULTIMO DIA DE LOS TRES MESES
Este día vas a hacer una cita contigo mismo y vas a sacar tus tres listas, revisa todo lo que has cambiado, siéntete satisfecho/a por lo logrado y analiza nuevamente las tres listas.
Como lo comentamos anteriormente, hay cosas de nosotros que no necesariamente tenemos que cambiar por que a alguien no le gusten y seguramente tendrás algún aspecto de estos anotado en tu lista de “NO QUIERO Y NO PUEDO CAMBIAR” y es muy válido.
Quiero ilustrar un poco más esto.
Supongamos que Juanita es una persona muy enfocada en el “qué dirán”, ella aprendió de niña que hay que estar muy pendientes de la imagen que le des a la gente, de lo que opinen de ti, de agradar, de buscar aprobación y reconocimiento en los demás y vive su vida siempre pendiente de tener buena imagen, de cumplir las apariencias y de agradar a la gente.
Ella es pareja de Luis, y el aprendió de niño que no le debe importar lo que opinen los demás, que la aprobación viene de adentro y que mientras tu te guíes por tus valores y respetes a los demás, tienes la libertad de ser auténtico y de ser tú en cualquier lugar y circunstancia.
A la hora de hacer la lista, Juanita le pone a Luis:
– Me molesta mucho que no te preocupe lo que dice la gente.- Me gustaría que estuvieras más pendiente de lo que opinan los demás.- Me molesta que no hagas lo que dicen mis amigos- Me gustaría que fueras más como Jorge que todos lo quieren.
En este caso Luis puede poner en su lista de “COSAS QUE NO QUIERO O NO PUEDO CAMBIAR” estos dos puntos, porque para él ser auténtico es un valor primordial, porque para él no importan las opiniones de los demás, porque no vive para lograr la aprobación de otros, sino la aprobación interior de si mismo y cambiar estos valores y convertirse en lo que quiere Juanita, sería retroceder un paso en su crecimiento y sería perder un valor muy importante que tiene.Entonces, al terminar estos tres meses, es importante revisar nuevamente todo y ahora si, hacer una cita con tu pareja.
En esta cita ambos, uno a la vez, van a exponer los puntos de la lista que han logrado superar, los puntos que no están seguros y los puntos que no desean cambiar.
Es importante que al exponer la lista de lo que no están seguros y de lo que no desean cambiar, expliquen claramente las razones por las que están inseguros y las razones por las que no desean o no pueden hacer el cambio.
Tenemos que ser concientes de que no existe el hombre ni la mujer perfectos, que hay cosas de nuestra pareja, que no va a cambiar, ya sea porque lo considera un valor, o simplemente por que no puede o no quiere. Y así como nuestra pareja tiene estas partes, nosotros también las tenemos, no somos tampoco perfectos y merecemos ser amados y respetados con nuestras imperfecciones.
Aquí el ejercicio que sigue es hablar abiertamente sobre estos puntos y ver qué de estas cosas que no se pueden o quieren cambiar realmente nos afectan.
También podemos proponer opciones sobre las cosas que no se han podido cambiar, quizá alguno o ambos necesite ayuda para hacer el cambio, tal vez necesiten el apoyo de un terapeuta, o de cualquier otra persona, la intención es tratar de resolver al máximo las diferencias que hayan quedado pendientes, con el afán de ayudar al otro.
Al final quedan las cosas que no van a cambiar y aquí es ejercicio de cada uno hacerse preguntas como las siguientes:
– ¿Puedo vivir con este aspecto?- ¿Es este aspecto realmente de tanto peso en la relación?- ¿Pesa más este aspecto, que todas las cosas buenas de esta persona?- ¿Si acepto este aspecto, estoy dañando mi integridad?- ¿Si acepto esta característica, estoy poniéndome a mi o a mis hijos en peligro?- ¿Si acepto este aspecto, estoy permitiendo que me manipulen?- ¿Si acepto este aspecto, permito que me humillen?- ¿Este aspecto atenta contra mi individualidad y mi derecho a ser yo mismo/a?- ¿Esta característica pone en riesgo la relación a largo plazo?
Es al responder este tipo de preguntas, cuando nos podemos dar cuenta qué tanto están pesando esos aspectos en la relación y qué tanto nosotros los hemos hecho más grandes de lo que realmente son.
Por otro lado, también pudiera darse el caso de que nos demos cuenta de que la persona que elegimos como pareja, ¡no era la adecuada! Si en su lista de “no quiero y no puedo cambiar” está la mayoría de las cosas que nos molestan, tal vez debemos cuestionarnos si esta persona es la indicada para nosotros. Pudimos habernos equivocado.
En el mejor de los casos, toda la lista está marcada como cosas que se han podido modificar.
Los resultados pueden ser varios, pero lo importante aquí, es que este ejercicio puede ayudarnos a tomar conciencia de cómo está nuestra relación y las razones por las que estamos creando problemas de comunicación y disfunción.
Nosotros no podemos cambiar a nadie, más que a nosotros mismos, si entramos en una relación del tipo que sea, concientes de alguna característica que no nos gusta y pensando que vamos a ser capaces de cambiar a la otra persona, lo más probable es que nos enfrentemos al fracaso.
Solo podemos cambiar aquello que creemos que nos está limitando en nuestra vida y que aceptamos que puede mejorar, pero solo podemos hacerlo por nosotros mismos y no por otras personas, si yo cambio algo por miedo al rechazo, al abandono, a la desaprobación, lo más probable es que con el tiempo le reclame al otro por estos cambios y tienda a utilizar la manipulación o el chantaje para hacer cambiar al otro algo que tampoco quiere o puede cambiar.
El cambio debe ser personal, debe ser conciente y debe ser libre, para que realmente traiga frutos positivos a nuestras vidas. Nada que esté basado en el miedo puede ser positivo, ya que lo opuesto al amor, no es el odio, es el temor y solo un cambio que provenga del amor, hacia nosotros y hacia los demás, nos ayudará a evolucionar como seres integrales.
Como sea, espero que este ejercicio sea de beneficio para ustedes, ya que fue escrito con todo el amor de mi corazón y con la intención de que una pareja en particular, a quienes amo mucho, logren conectarse nuevamente con todo el amor que los unió y puedan superar sus diferencias.
Tomado de
evolucionconsciente.org