Existe una fórmula en nutrición llamada “Equilibrio Energético” que dice que lo que comes debe ser directamente proporcional a cuanto te ejercitas, si comes mucho y haces poco deporte estarás en sobrepeso y si te ejercitas bastante y comes y descansas poco tendrás debilidad, deficiencia vitamínica, huesos débiles y cansancio permanente.
Pues bien, este concepto tan simple se aplica a muchas áreas de la vida, y como dice el dicho “demasiado al Este ya es Oeste”. En este momento me quiero referir particularmente al equilibrio energético del meditador y del sanador. Demasiadas prácticas espirituales, mucha meditación, activaciones de luz, conexión multidimensional, deben ser compensadas de forma directamente proporcional y a través con el contacto directo con la naturaleza y sus elementos.
La razón de esta reflexión es que llevamos algunos años y vendrán muchos más, con un importante aumento en la frecuencia de energía y de la luz que recibimos en el planeta y proveniente del cosmos.
Cada vez hay más personas siendo conscientes de la energía y sintiendo los síntomas que producen en nuestro cuerpo, con motivo de la metamorfosis que esta nos está generando, a nivel físico también (mareos, insomnio, cansancio, cambios alimenticios, etc).
Pero nuestro cuerpo, no lo olvidemos, es de tierra, fuego, aire y agua y aunque se está transformando para ser menos denso y ser capaz de recibir y ser más luz, sigue necesitando:
- Descargar el exceso de energía que nos llega, en la naturaleza.
- Soltar las cargas emocionales
- Anclarse a la tierra por que sólo conectados a ella logramos recibir más luz para que esta nos ayude a limpiar nuestra oscuridad.
- Regular la cantidad de luz que le entra a nuestros órganos y armonizarla en ellos.
Auto sanadores, sanadores, canales, trabajadores de luz…
Recuerden que entré más mediten, más deben frecuentar la naturaleza, entre más se conecten con el cielo, más lo deben hacer con la tierra, es el equilibrio energético necesario para lograr la ascensión que tanto anhelan, por el contrario, entre menos naturaleza, más lento se hará el proceso por que el cuerpo entrara en un proceso de lucha y desgaste que sólo puede ser aliviado con pasar tiempo diario o semanal en el mar, el campo o en un jardín.
Que tu tiempo de meditación sea proporcional al tiempo que pasas en la naturaleza…
- Tocándola
- Untándote
- Mojándote
- Prendiendo fuego
- Bañándote
- O estando en silencio
” Al menos semanalmente,
soltar el exceso de….. y volver a la armonía”
Disfruta el camino!!! En Amor y Luz
María Paula Vélez