Puedes controlar tus emociones y no permitir que las demás personas y las circunstancias, que te toque vivir, te roben tu libertad haciéndote reaccionar como tú nunca querías, decide sobre tus acciones, controla tus emociones, evita las negativas y potencia las emociones positivas.
Como nosotros somos quienes generamos nuestras emociones, podremos controlarlas más de lo que parece, y así conseguiremos sentirlas o no.
Son muchas las cosas positivas que están en el entorno de una persona, en las cuales puede decidir centrar su atención, en vez de entretenerse en las negativas. Ello terminará fijando cómo es su vida.
Cuando se siente emoción, entusiasmo, pasión, felicidad, alegría, jubilo, gratitud o abundancia se generan energías positivas, pues se va en la dirección correcta concibiéndose pensamientos, ideas y actividades que impulsan de forma activa hacia las metas y objetivos propuestos.
Sin embargo cuando se experimenta ira, depresión, desesperanza, aburrimiento, ansiedad, estrés, enfado, resentimiento y tristeza se genera energía negativa, al tiempo que se está pensando y prestando atención a cosas que alejan de las metas.
Los sentimientos indican si se ha perdido el rumbo y si es hora de cambiar el ritmo. Mostrando que se ha de pasar a concebir pensamientos positivos, modificando el enfoque actual, y tratar de hacer algo diferente que proporcione sentimiento de felicidad, y que dirija hacia las metas.
Las emociones las generamos nosotros, son algo nuestro, emanan de nuestros pensamientos, aunque cuenten con estímulos externos. Es posible tener algo de control sobre las emociones, cambiando los pensamientos que las generan por otros más constructivos y positivos.
Es muy importante tener una actitud positiva y cultivar emociones y sentimientos positivos mediante el pensamiento y la voluntad.
Aunque sea una tarea difícil, podemos controlar lo que ocurre en nuestro interior, por tanto no permitamos que la tristeza, la nostalgia, la ira, la rabia, el odio, la envidia y el rencor dirijan nuestra vida.
Hay que alejarse de los estados negativos si se quiere estar cómodo y feliz con uno mismos, puesto que todos los sentimientos y emociones negativas no solo no solucionan nada, sino que también cargan de negatividad.
El dolor emocional y los sentimientos negativos, solo tienen la parte positiva de indicar que algo está fallando, y una vez entendida esa situación se ha de limitar y extinguir ese sentimiento negativo, para restablecer así el equilibrio, y poderse focalizar en pensamientos y sentimientos más adecuados.
Tomando consciencia, controlando y liberándose de esos estados negativos se pueden crear pensamientos positivos y alternativos, emociones y sentimientos positivos que aporten el bienestar que se desea, al tiempo que generan soluciones positivas para las adversidades que generaron el malestar inicial.
Resulta de gran importancia la forma en que se manejan las emociones, ya que generan estados de ánimo, que bien pueden favorecer o atentar contra la salud mental. Gestionar las emociones es determinante para tratar con los demás y relacionarse positivamente.
Se ha de actuar identificando las emociones negativas, sintiéndola, aceptándola, y luego, aplicarle el lado opuesto, positividad.
Cuando te des cuenta que estas pensando en alguna experiencia pasada negativa, identifícala, siéntela, acéptala y aplícale el lado opuesto, en el sentido de, pensar, por ejemplo en algo que deseas alcanzar, imaginando como lo has conseguido, lo que te hará pasar del estado de sufrimiento al de ilusión y felicidad, siendo posible que te den ganas de ponerte en acción para conseguir ese deseo.
En definitiva, si quieres que cambie tu estado de ánimo, identifica que es, lo que está generándolo, ya sea una persona, un pensamiento o una circunstancia y cambia tu pensamiento, y así tendrás el control de ti.
************************
Cualquier cosa que una persona mencione, cualquier frase dicha, desde un simple comentario, aparentemente inocente, hasta un pensamiento filosófico profundo, reúne dos condiciones: es la manifestación de un pensamiento, pero también la inevitable expresión de una emoción.
Laura Esquivel.
*************************
El entrenamiento no trata con un objeto, sino con el espíritu humano y con las emociones humanas.
Bruce Lee.
*************************
No somos responsables de las emociones, pero sí de lo que hacemos con las emociones.
Jorge Bucay.
Dver.
http://accionesdesarrollo.com/