Empieza este día como si estuvieras en un restaurante con una carta a tu disposición para que escojas el menú. O como si te hallaras en la entrada de un cine, observando la cartelera para elegir la película que más te apetece ver.
El día te brinda opciones muy variadas, que se reparten entre la convivencia, el trabajo, el descanso, la diversión, etc. ¿Cuáles merecen más tu tiempo y tu atención?
¿Vas a comerte cada plato de la carta? ¿Vas a ver todas las películas de la cartelera?
Has de seleccionar. En el restaurante, comerte cada plato del menú no te hará más feliz que si eliges el que más te gusta. Lo mismo pasa en el cine. Y también pasa con este día que empieza.
Elige sabiamente y céntrate en aprovechar cada opción que es importante para ti. Porque la calidad de vida tiene poco que ver con la cantidad de cosas que metes en ella. La calidad tiene más relación con lo significativo.
Prescinde de la locura de hacerlo todo, de verlo todo, de tenerlo todo o de
saberlo todo. Eso no te hará más feliz, que elegir unas cuantas opciones del menú y aprovecharlas a conciencia.
No necesitas mucha cantidad. “Más” no es necesariamente “mejor”. Saborea el plato que elijas. Disfruta de la película que quieres. Y empléate
en las opciones que has elegido para este día. Dedícales a ellas tu amor, tu tiempo y tu atención.
¿Poco, pero significativo y valioso…? ¿O mucho? ¿
Qué te hace más feliz?
http://tusbuenosmomentos.com/2015/05/menu-del-dia/