La lectura astrológica también nos habla de nuestras pasiones, de esos sentimientos que reiterativos y acentuados se pueden convertir en dañinos para nosotros mismos y para quienes nos rodean. Conocernos mejor desde el aspecto psicoastrológico es una posibilidad para saber qué deberíamos elaborar en nuestra personalidad, con quienes relacionarnos o no, y también, con qué actitudes debemos encarar algunas respuestas ajenas.
LOS CELOS Y LOS SIGNOS
Algunas teorías postulan que los celos son un sentimiento innato relacionado con los instintos básicos de pertenencia, exclusividad y posesión. Otras teorías postulan que los celos son aprendidos a través de la socialización y la observación de modelos. Analizando la mayoría de los casos de celos, es evidente que responden a algo muy instintivo que está fuera del control consciente y racional, y tal vez por ello sean tan difíciles de tratar.
Muchas veces los celos se activan siempre en relaciones intensas donde la otra persona es significativa y mantenemos con ella un vínculo fuerte.
Es importante que de pequeños podamos y aprendamos a elaborar situaciones de celos, por ejemplo, con la llegada de hermanitos, con las amistades, etc. De esa manera, y en líneas generales, en la relaciones de parejas de adultos comprendemos que no podemos tener a nadie en régimen de exclusividad en nuestras vidas. Cuando no sucede esto, los celos se convierten en un fenómeno regresivo que nos hace revivir el miedo, la inseguridad y la desprotección que sentimos cuando anticipamos la pérdida o el alejamiento de la persona que nos hace falta.
Los celos patológicos surgen cuando la persona no es capaz de superar ese miedo y los celos se convierten en algo continuo, cotidiano y que no deja que la relación funcione en un equilibrio básico de confianza y crecimiento mutuo. Aquí la relación de pareja se convierte en un juego peligroso de sospechas, miedos, reproches, exigencias, chantajes y, en los casos más extremos, violencia y agresiones.
Superar los celos no es imposible. Requiere de tomar primero consciencia de que los celos no son sanos y no nos dejan crecer como personas. Son signo de inmadurez psicológica y de un ego poco integrado. Por ello, la persona que quiera superar los celos debe estar dispuesta a cuestionarse a sí misma y a emprender un camino de autoreflexión y desarrollo personal.
Veamos entonces cuan celosas pueden ser algunas personalidades según el signo zodiacal, y comprender así mejor algunas actitudes de quienes nos rodean.
RANKING DE LOS SIGNOS MÁS CELOSOS
Un ranking que va del nativo zodiacal menos celoso al nativo más posesivo en asuntos del amor, todo lo que tienen que saber para no caer en la trampa de esta emoción dañina para ambos integrantes de una relación amorosa.
Ocupa el puesto número:
12= ACUARIO
No es exactamente porque no sea celoso, si no que quizás no pierde tanto el tiempo en demostrarlo. Es el signo menos posesivo en el amor y, aunque puede estar ardiendo por dentro, para él es más fácil alejarse de lo que le hace daño que aguantar y ser infeliz.
11= SAGITARIO
Ama la libertad por encima de todo y sabe que quién está con él es porque quiere. No obliga a nadie. El fuego de Sagitario a veces hace que pueda volverse loco en un ataque de celos pero es momentáneo porque Sagitario no gasta su tiempo con quien no lo merece.
10= GÉMINIS
Tiene demasiadas cosas en la cabeza y aunque los celos pueden causarle inestabilidad en seguida se da cuenta de lo que vale, se valora y se convence de que los celos solamente le entran cuando se siente inseguro.
9= VIRGO
No precisamente porque no lo sea, lo puede llegar a ser y mucho, pero a veces se lo traga, porque Virgo no estalla a la primera si no que acumula poco a poco. Si provocas que sus celos vayan a más, acabará por devolverlos con la misma moneda, así que mejor andar con cuidado.
8= CÁNCER
Es celoso, siempre que vea algún motivo claro, pero es capaz de aguantar, no mucho, pero quizás no explota a la primera. Le puede celar hasta una mirada pero no te lo dirá si no tiene confianza.
7= LIBRA
Es celoso, mucho-demasiado y no tardará en decírtelo, de buenas o de malas maneras, pero lo tiene que expresar. Los celos pueden volverlo paranoico o por otro lado hacer que abandone todo y vuelva a empezar de 0, sólo. Mejor no tentarlo.
6= TAURO
Es posesivo, y eso normalmente, va unido a los celos. Si ve algo que le molesta te lo dirá, claramente. Y si ve que tú has sido el/la culpable de sus celos probablemente dejará de confiar en ti durante una larga temporada. Un Tauro, no lo olvides, recuerda absolutamente todo.
5= LEO
Su rostro se vuelve rojo de ira si ve algún movimiento extraño a su alrededor. Lo ve y lo intuye todo, así que, la persona que quiera celar a un Leo que tenga mucho cuidado. Cuando está celoso es capaz de decirte en el momento, estés con quien estés, que eres lo peor con lo que se ha cruzado en la vida. Cuando está encendido es así, o peor.
4= CAPRICORNIO
Aunque por fuera pueda mostrarse sereno y parecer que no le importa “nada”, en el momento en que ve alguna actividad fuera de lo común, ya sean miradas o gestos, activa el sensor y créeme, puede obsesionarse y llegar a indagar en todo para averiguar cualquier detalle de lo que realmente está pasando. No se le escapa nada, y no se lo engaña fácilmente.
3= ARIES
Es un signo de fuego y por eso, es pasional para todo. No tiene paciencia y no se le escapa una. Aries se pondrá celoso y no dejará que nadie “peligroso” entre a su terreno y se acerque a lo que considera suyo para intentar arrebatárselo.
2= PISCIS
A veces, se vuelve bastante “loco” de celos. Piscis no va a callarse cuando sabe que algo raro está pasando y es capaz de montarte cualquier escena si se siente “traicionado”. Lo peor que se puede hacer es intentar manipularlo en la mentira porque se da cuenta y no se le escapa nada.
1= ESCORPIO
Ama con locura y odia con rabia. Cuando cela es porque sabe a ciencia cierta que algo extraño está ocurriendo a su alrededor. Sus celos son legendarios y las traiciones las “huele” a distancia. Puede volverse loco por momentos y hacerte sentir la peor persona a través de culpas. Mejor evitar darle motivos.
¡Cuidado mujeres!
LOS NATIVOS VARONES Y SUS CELOS
Aries: Le encanta tener competidores. Sentir esos celos le hace portarse como héroe ante su amada para que lo prefiera. Luchar por ella lo llena de adrenalina.
Tauro: Posesión es su segundo nombre. Aunque los galanes de este signo parecen pacíficos, lo suyo les pertenece y jamás perdonarían un engaño. Son celosos hasta la médula.
Géminis: Es el hombre de hielo. No sabe lo que son los celos, es independiente y liberal. Si eres de las que te gusta que tu novio demuestre celos, ¡estás perdida!
Cáncer: Los hombres cáncer sueñan con una relación perfecta y sólo para ellos, se ponen celosos cuando hay motivos evidentes.
Leo: Los nacidos bajo este signo no conciben la idea de que su pareja se fije en otro, ya que ¡ellos son los reyes de la selva! Odian ver su ego herido.
Virgo: Ellos no son infieles porque van con la moral y los principios por delante .No son celosos, pues piensan que todo el mundo actúa como ellos.
Libra: Les emociona el juego de ser ellos deseados por otros, pero con sus parejas no se ponen en el mismo lugar. Le afecta mucho si su pareja se fija en otra persona.
Escorpio: Es el rey de los celos. Posesivo y controlador. Está al acecho de lo que pueda pasar, y reacciona pasionalmente ante la mínima sospecha de engaño.
Sagitario: Suelen ser hombres infieles donde el engaño es sólo un derecho para ellos, así que ¡con cuidado!
Capricornio: Estos hombres sienten que su pareja es “suya”, de su propiedad. Sus celos les atacan a temporadas aunque a menudo aparentan que nada de eso les importa.
Acuario: Se les considera fieles y, no toleraran un engaño. Son poco celosos y poco demostrativos.
Piscis: Nunca expresan abiertamente sus celos, aunque sí los sienten y les afecta profundamente. Les encanta estar todo el tiempo junto a su pareja.
LA ENVIDIA Y LOS SIGNOS
Uy! Hay tantos matices en este “pecado capital” que podríamos decir que ningún mortal queda exento de ella. Aquí algunas formas en las que las personas muestran su envidia, en diferentes grados, cuando al otro le va bien y lo hace saber.
Podemos encontrar varias reacciones envidiosas ante un buen suceso, una nueva adquisición material, un logro profesional adquirido que le contamos a otra persona, sea amiga o no. La forma más leve de envidia es que veces el otro no le da importancia a nuestra alegría y felicidad, o puede pasar que busque la forma de quitarle mérito o añadir algo negativo a lo bueno que nos ha pasado o al proyecto que deseamos realizar. Otra forma, es la muestra de quienes buscan evidenciar ante terceros nuestros errores para minimizar lo fantástico del asunto que nos acontece. También, puede pasar por envidia que personas cercanas que se alejan cuando todo marcha bien y exitosamente en nuestra vida, porque la felicidad actual es un recordatorio constante de las frustraciones que hay en su vida. Y casos no tan usuales son los conocidos que demuestran una excesiva alegría con algo bueno nuestro y denotan falsedad y envidia.
Estos son algunos ejemplos de la demostración de envidia con los que nos podemos encontrar en la cotidianeidad, pero hay muchos más, incluso aquellos hechos que se convierten en dañinos. Lo importante es saber reconocer cuando a alguien no le causa alegría nuestra felicidad, y ser nosotros quienes podamos alejarnos o ser más selectivos con las cosas que le compartimos. Tal vez no sea necesario alejarse de esa persona totalmente, sino mantener un vínculo que sea positivo o se nutra desde otro aspecto.
A continuación, recurrimos a las características que los 4 elementos para describir cuan envidiosos pueden ser los signos, según su nivel de ambición y la proyección de sus frustraciones.
SIGNOS DE FUEGO:
Son los signos más pasionales del Zodíaco y ven la vida de una forma muy especial.
Muy ambiciosos, les encanta disfrutar de los desafíos, proponerse y cumplir metas. Siempre van tras algo nuevo, así como mejorar su calidad de vida. Les encanta darse lujos, salir con la gente más bella y manejar dinero.
Ambicionan el poder, así como el reconocimiento de sus talentos y méritos. Además, quieren acceder a todo lo mejor y, si no lo tienen, lo envidiarán.
Se volverán obsesivos con aquello que desean, aunque, seguramente, no se les note, dada su buena actitud y optimismo. Pero, son envidiosos respecto al triunfo y las posesiones ajenas, así como muy malos perdedores.
SIGNOS DE AIRE:
Los nativos más intelectuales del Zodíaco ven la realidad de un modo particular. Amantes del conocimiento y las diferencias, les interesa la gente, las relaciones humanas y experimentar. Aprender y divertirse es lo suyo. Libres, se comportan de un modo poco convencional, a la vez que tienen intereses muy diversos. Son creativos y odian la rutina.
Anhelan el poder ser ellos mismos, los cambios, las experiencias únicas.
Si no logran lo que quieren, se deprimen y viven comparándose con los demás, a quienes menosprecian y envidian. No hay peor obsesión que la de alguien inteligente que sabe lo que no puede ser y nunca será. Críticos y cerrados, pueden llegar a construir una realidad falsa para ocultar sus carencias. Bien aspectados, tratarán de relacionarse con quienes saben más y aprender de ellos.
SIGNOS DE AGUA:
Son los nativos más emocionales del Zodíaco. Soñadores, quieren a sus cosas y a su gente, les gusta la ilusión y la fantasía, así como dar protección, calidez, y construir proyectos conjuntos. Regidos por lo que les dicta su corazón, son afectivos y sensibles, aunque también son personas ambiciosas, que se proponen objetivos y proyectos difíciles. Se trata de individuos complejos, que mezclan sensibilidad y fortaleza.
Su debilidad de carácter, inestabilidad emocional, confusión, dispersión o tendencia a pensar más en los demás que en sí mismos, les impide conseguir objetivos y envidiarán lo que no lograron.
Pueden ambicionar un buen trabajo, una pareja ideal, el talento que destaca o a un ser querido. Su envidia se deriva del dolor interno por no haber logrado algo importante.
Los signos de Agua son inestables y oscilan entre seguridad e inseguridad, pesimismo y optimismo, tienen poca vitalidad y se deprimen fácilmente. Si están mal aspectados, la envidia los volverá peligrosos, mentirosos, egoístas, obsesivos. Construirán un personaje falso de sí mismos para superar su debilidad, en lugar de fortalecer sus virtudes.
SIGNOS DE TIERRA:
Son los nativos más estables y racionales del Zodíaco. Persiguen objetivos de vida simples de concretar, pero no por ello “menos importantes y esenciales.
Un hogar, un buen trabajo, estar rodeados de gente que los quiera y que ellos amen, descansar y disfrutar. Regidos por una conciencia del tiempo y la realidad, son prácticos, sensuales y materialistas. Todo les sirve para alcanzar sus objetivos; el dinero, para cubrir necesidades; el amor, para sentirse estables emocionalmente; los amigos, para compartir.
Sus ambiciones son de carácter material, por lo que envidian los buenos resultados de los demás. El confort, vivir tranquilos y tener tiempo libre son los objetivos más envidiados.
Cuando no consiguen lo que quieren, se vuelven apáticos, pesimistas, hoscos. Obsesivos y fríos, se volverán muy competitivos, perderán su sentido ético y no tendrán escrúpulos para alcanzar sus objetivos.