Cuando te suceden cosas malas, te atacan sin motivo, te dañan… Lo primero que haces es intentar responder con la misma moneda.
Responder daño con daño.
Responder dolor con dolor.
Responder palabras hirientes con palabras hirientes.
Responder rumores con más rumores.
Responder zancadillas con otras zancadillas.
Responder golpe con golpe.
Responder odio con más odio.
Sin embargo, lo más fácil no siempre es lo más adecuado.
El dolor solo atrae más dolor.
El rumor solo genera más rumor.
El odio solo genera más odio.
Entramos en una espiral de autodestrucción, donde nos dejamos arrastrar por el dolor, que no nos permite respirar; esto solo nos ciega y no nos deja pensar; solo nos hunde cada vez más en el cieno del dolor, arrastrándonos cada vez más hondo, hasta tocar fondo y en nuestro dolor arrastramos sin querer a otras personas; personas a las que jamás haríamos daño.
Solo hay una manera de salir de esta espiral.
Cuando alcen rumores, medita antes de hablar.
No respondas ante palabras hirientes, retírate y medita antes de responder.
Cuando te dañen, responde con amor.
Rompe la cadena de odio y dolor y genera amor.
No es fácil, no siempre lo lograrás; no hay que auto castigarse ante un fracaso, felicítate por cada pequeño logro, por cada pequeña victoria.
Solo somos humanos aprendiendo a Ser y podemos.
AUTORA: Rosa Francés Cardona