Hay personas que prefieren, como decía el anuncio, empezar el día con energía y finiquitar el asunto rápidamente, incluso antes de lavarse los dientes y despejarse con la ducha matutina. Otros, siguiendo el lema popularizado por Leticia Sabater en su programa infantil, son seguidores de 'Al mediodía, alegría'.
La hora de la siesta y los documentales de animalitos en la tele son un momento ideal para tener sexo en muchas casas. No es que la visión de un koala agarrado a la rama de un eucalipto, por poner un ejemplo, sea una imagen demasiado excitante, pero son muchos los que sienten cierto come-come en la zona pélvica después de comer.
Y la noche, pues ya se sabe.
Posiblemente sea el momento de la jornada más socorrido para tales menesteres. En parejas estables, porque los niños ya están acostados (por fin). En ovejas descarriadas, porque las cacerías nocturnas suelen ser más exitosas. Será porque se percibe una cierta predisposición carnal en al aire.
Pues va a ser que sí.
Por otro lado, tampoco hay que olvidar que existen algunos personajes que tienen todo el día la caña a punto y otros a los que les puede la pereza y, ya sea por el tópico dolor de cabeza o porque en la tele echan la final de 'Supervivientes', nunca encuentran el momento.
El caso es que, aunque pueda parecer una bobada y una cuestión simplemente relacionada con los gustos personales de cada uno, la satisfacción sexual depende mucho del momento del día escogido para tener relaciones sexuales.
Las hormonas y los biorritmos tienen mucho que decir al respecto. El alemán Peter Platz es el autor de un interesante estudio sobre esta cuestión. Ni que decir tiene que hombres y mujeres siguen caminos distintos también en este tema. A pesar de todo,
los biorritmos eróticos coinciden en ambos sexos en algunos momentos del día. Y menos mal, porque si no ya me dirás. ¡Qué planazo!
El alemán Peter Platz es el autor de un interesante estudio sobre esta cuestión.
Empecemos por la mañana. Recién despertados no es un momento muy oportuno para tener sexo. El organismo femenino no está demasiado predispuesto. Parece ser que el nivel de melatonina (la hormona del sueño) es muy alto y la temperatura corporal es baja. Por el contrario,
el hombre tiene en las primeras horas del día las hormonas sexuales bastante disparadas. Entre las 8 y las 10 de la mañana las endorfinas alcanzan su nivel máximo en las mujeres. En los hombres, alrededor de las 9, las hormonas sexuales se encuentran a un nivel 50% más elevado que el resto del día. Hete aquí
el secreto de lo sensacional y placentero que pueden resultar muchos coitos mañaneros (sobre todo, en domingo, claro).
La siesta y los documentales de animalitos.
Las 4 de la tarde suele ser otro momento en el que las curvas del deseo sexual en hombres y mujeres se tocan y coinciden (benditas siestas). Y en cuanto a la noche, después de cenar, hay que estar muy atentos a la digestión (que no casa mucho con el sexo) o al ataque de la melatonina, la hormona que provoca unos deseos irrefrenables de irse a la cama
http://www.elmundo.es/elmundo/2009/06/08/camaredonda/1244447563.html