Vivimos en un mundo que es un torbellino de pensamientos, miedos, expectativas y plegarias. A veces parece como si fuésemos pequeños botes en el tifón de la vida. Todo parece abrumador, abarcándolo todo. Nos sentimos inermes y menos poderosos de lo que nos hemos sentido en largo tiempo. Cada mañana nos despertamos a un nuevo día, una nueva oportunidad, un nuevo dilema. Con nuestro primer aliento y nuestro primer pensamiento, establecemos las energías para todo el día. Podemos aspirar las vastas posibilidades de un día lleno de milagros y sueños hechos realidad, o podemos aspirar un día igual al de ayer, nada más y nada menos.
Lo cuántico de la vida nos responde a cada instante a nosotros y a través de nosotros. De nosotros depende darle forma. Somos los filtros de café cósmicos a través de los cuales se vierte el nuevo día. Somos el cauce del río que dirige las corrientes de nuestra vida. Somos los productores, actores y directores de la obra que llamamos vida. Cuando no nos gusta el rumbo en el que está yendo nuestro mundo personal, de nosotros depende intervenir energéticamente, enviar amor a todos los que nos hacen reaccionar, cambiando el escenario, la utilería y las líneas de nuestra vida.
Todos nosotros tenemos libre albedrío y libre elección y sin embargo nuestro libre albedrío y nuestras elecciones afectan el resultado y el flujo de toda la Creación. Cada elección, cada giro, cada pensamiento, genera una onda expansiva que toca a todos y a todo. En esta verdad, cada uno de nosotros se halla realmente en el Centro del Universo.
Pensamos egoístamente que nuestras decisiones y nuestras elecciones no son asunto de nadie más y solo nos afectan a nosotros. Cada uno de nosotros es un océano que contiene en su interior vida preciosa. Si el océano se seca o aumenta repentinamente, o mengua a un punto más allá del equilibrio, afecta todo lo que toca. Observen a las células y órganos de su cuerpo. Aunque todo es una unidad separada, también es una consciencia conectada y dependen el uno del otro para sobrevivir. Todos vivimos en el cuerpo del Universo; cada célula separada, sin embargo todas parte de la Unidad Divina.
En los últimos tiempos, el Universo ha creado un “Denominador Común” entre los pueblos de la Tierra. Es un intento de unir lo que parece desgastado, fracturado (utilizo la palabra pareceporque nada puede separarse realmente de la Unidad). Cada parte del mundo está experimentando una “Unidad” forzada debido a las situaciones extremas externas y a las condiciones que están permeando y saturando a todos y a todo. Estamos recibiendo un llamado a despertar de la Madre Tierra. Ella grita: “¡Cambien fácilmente o cambien trabajosamente, de ustedes depende, hijos míos!” ¡La Madre Tierra no solo lo demanda, sino que todo lo que hasta ahora dimos por sentado también está emitiendo este llamado a despertar!
Nuestras vidas parecen no estar funcionando. Tratamos de repararlas, pero las reparaciones no se sostienen en esta energía más elevada. La energía que viene del Gran Sol Central (localizado detrás de nuestro propio sol) en forma de emanaciones solares, etc., está afectando el viejo patrón de nuestras vidas. El sol es el responsable de nuestros cambios climáticos, nuestros cambios de humor y el cambio en el campo electromagnético que rodea a toda vida en la Tierra.
La información llega en forma de Luz Solar. Nuestras estructuras biológicas (cuerpos) ahora están recibiendo nuevas instrucciones celulares a diario. Estamos cambiando de adentro hacia fuera. Nada detendrá o desacelerará este gran cambio, porque es nuestro destino. Cuanto más nos aferremos a la vieja manera de hacer, de pensar, de vivir, más incómodos serán estos cambios. Cualquier cosa que no sea para nuestro mayor bien, se desmoronará, sin importar con cuanto ahínco tratemos de aferrarnos a ella.
¡Dejen de lado quiénes o qué piensan que son, y qué creen que quieren, y reciban lo que ha sido cultivado por Decreto Divino solo para ustedes! La experiencia perfecta, el tiempo perfecto, el tamaño perfecto. Es una experiencia completa del cuerpo planetario. No importa la religión, el credo, la raza y el color. Todo está cambiando hacia un orden más elevado, una luz más elevada y una frecuencia más elevada. ¡A lo que son interiormente (Luz del Alma, Luz Divina) se le ha emitido una Proclama de Emancipación y está en el proceso de ser liberado! La mariposa no puede permanecer en el capullo cósmico por más tiempo. Está destinada y diseñada para volar.
¡Todo esto es un Regalo del Universo, no un castigo! Concéntrense solo en la plenitud de su vida, no en el vacío. Cualquier cosa que sea para su más alto y mayor bien, no les puede ser arrebatada.
Gillian MacBeth-Louthan