Tema: La comida como acto espiritual Lun Sep 29 2014, 01:34
La comida como acto espiritual
Quizá porque la mayoría vivimos desligados del origen de nuestra comida, hemos perdido la conexión directa con la tierra. Por eso dejamos de ver toda la profundidad de aquello que comemos para verlo sólo como objeto de consumo y placer rápido. Ni tan solo nos preguntamos que lleva aquello que estoy consumiendo y como afecta a mi salud y la del planeta. Importa la satisfacción rápida pero vacía de contenido y salud.
Cuando iniciamos un proceso de evaluación de nuestra dieta nos puede pasar que nos encontremos con una marea de información sobre todo lo malo que tiene la comida actual y al vernos abrumados decidamos que el cambio es muy difícil, por lo tanto seguimos con nuestros hábitos cotidianos. Pero no hace falta demasiada información, ni leer artículos científicos, sólo una actitud consciente cuando hacemos la compra y comemos. El leer la “letra pequeña” de los embalajes ya es un acto de consciencia. Y es también consciencia sentir lo que pasa cuando comemos. Cuando me siento hinchado, tengo acidez, me siento pesado, sin energía… es que algo no me está sentando bien. Una buena dieta me tiene que proporcionar buenas digestiones, vitalidad y buen humor. Por eso cuando sacamos de nuestra dieta la carne, el azúcar, los lácteos, los refinados o los conservantes, colorantes, etc. vivimos un proceso de desintoxicación (dolores de cabeza, sudor, granitos, síndrome de abstinencia…), ¿entonces nuestra comida nos está intoxicando?
También nos tenemos que cuestionar lo que significa nuestra alimentación actual en relación la salud de nuestro planeta y los seres que lo habitan. Por ejemplo lo que acarrea comer carne a diario: este aumento exponencial de consumo ha producido que se tengan que poner en práctica técnicas de ganadería intensivas que aportan más gases al efecto invernadero que el sector de transporte y a parte van en claro detrimento de la salud de los animales, que sobreviven con antibióticos y hormonas. Podemos preguntarnos lo que significa el no comer de proximidad: menor precio significa explotación en el país de origen, cambio de los cultivos originales de estos países y emisiones de CO2 innecesarias. También lo que significan el uso de pesticidas, transgénicos, etc con consecuencias fatales para nuestra salud y la de la Tierra. Solo pequeños apuntes del alcance que tiene este acto diario y cotidiano pero que tiene implicaciones tan profundas.
Cuando queremos evolucionar como seres y trabajamos para ser mejor personas, no podemos olvidar nuestra conexión con la Tierra y la naturaleza a través de lo más directo que son sus frutos, la comida que luego se convertirá en nuestra sangre. Tampoco a los otros seres que la habitan, tanto la gente de otros países que muchas veces se ven oprimidos por nuestra forma de consumir, como los animales que sufren vidas pésimas por nuestros gustos culinarios. Y a la vez nos podemos llenar de vida, cuando volvemos a retomar este contacto íntimo y respetuoso con la naturaleza, comiendo natural y vivo.