¿Triste, enfadado, ansioso, cansado…? Acéptalo. Estás de mal humor. No tienes que tratar de ocultarlo para evitar que otros se sientan mal, porque quienes te aprecian tendrán en cuenta que un mal día lo tiene cualquiera.
Y, una vez que aceptas que éste no está siendo tu mejor día, te proponemos esta recopilación de opciones, de las más útiles que hemos aprendido.
Unas son medidas que actúan de “cortafuegos“, para evitar que el mal humor se amplifique y se extienda más de la cuenta. Otras, son algo así como un “antídoto emocional“, que generan una emoción positiva que empuja en sentido contrario al mal humor.
Vamos con ellas…
1. Desahógate. No te quedes con el malestar dentro de ti. Échalo de alguna manera. Llora, patalea, escribe sobre cómo te sientes… Pero un ratito nada más.
2. Relájate, especialmente si estás enfadado. Cuando nos enfadamos, respiramos más deprisa y sólo esto hace que nos sintamos peor. Respira profundamente y, si puedes, dedica unos minutos a meditar o a dormitar un poco.
3. Busca un lugar donde te sientas cómodo. Si te es posible, ve a un lugar tranquilo donde no haya gente agitada o crispada.
4. Evita el contacto con gente negativa; la que te hace sentir mal o te saca de quicio.
5. Avisa a tus seres queridos de que no te encuentras muy bien, si es necesario. Esto es para evitar posibles tensiones, discusiones y malos entendidos.
6. Acércate a gente positiva. Una manera de echar fuera las tensiones es hablar sobre ellas con alguien de confianza, como sabes. Pero, si descartas esto, hay más alternativas.
7. Métete en otra historia. Desvía tu atención de lo que te tiene mal hacia, por ejemplo, la trama de una película o de un libro.
8. Deja que la música te ayude. Enchufa el karaoke, canta, baila, toca la guitarra… Elige algo relajante o movidito, según prefieras, y déjate envolver.
9. Haz ejercicio físico. Corre, nada, salta… Aunque sea por espacio de unos poquitos minutos.
10. Limpia. Además de hacer algo de ejercicio, la limpieza deja una recompensa visible. Lava el coche, deshazte de objetos inservibles, etc. También puedes redecorar alguna habitación con colores y objetos que te hagan sentir bien.
11. Arréglate. En vez de arreglar la casa, quizás quieras probar a arreglarte tú. Cuando, por ejemplo, te pones una ropa que te queda muy bien, además de distraerte, te ves bien cuando terminas. Y esa sensación agradable puede influir en cómo te sientes por dentro.
12. Juega. Cuando juegas también te concentras en una actividad agradable, que te ayuda a aparcar las preocupaciones. Pruébalo. Mejor, si es algo físico. Descarta los juegos que tengan que ver con dinero.
13. Come. Pero no comas para desahogarte, sino porque es la hora de comer y no te la vas a saltar por muy de mal humor que estés. Te sentirás peor si lo haces. Quizás consideres añadir al menú un trocito de chocolate negro (un clásico en estos casos).
14. Bebe. Igualmente, no para embriagarte, sino para cuidarte. Quizás quieras probar alguna infusión relajante o puede que te apuntes al té verde, para que te ayude a estar concentrado sin agitarte tanto como el café.
15. Sal a pasear. Puede que todo lo que te haga falta para sentirte mejor sea luz y aire fresco. También es una excelente idea (muy relajante) ir a un lugar donde haya agua o la escuches correr. Eso sí, hay una excepción: no vayas de compras hoy. Cuando uno está de bajón es muy proclive a hacer compras compulsivas.
16. Observa la belleza. Trata de llevar tu atención hacia las cosas bonitas. Un ejemplo: los cachorros. Muchísimas personas se ponen de buen humor simplemente viendo a estas pequeñas criaturas. O, mejor todavía…
17. Pasa un tiempo jugando con tu mascota. Te calmarás y te sentirás tan bien como si te hubieras comido un buen trozo de chocolate (Fuente), sólo que esto no te aporta calorías de más. O pasa un ratito con niños pequeños, si los tienes cerca.
18. Haz algo nuevo. La novedad también nos hace sentir mejor. Si llevas tiempo prorrogando hacer eso que te apetece, hoy puede ser el día indicado.
19. Ríe. Cuando estás de mal humor, quizás reír sea lo último que te apetece. Pero, ya que estés un poco más despejado, la risa hace que la transición del mal humor a la alegría sea más rápida.
20. Repítete: Es temporal. El mal humor se irá y lo hará antes si tomas alguna medida como las que te hemos comentado. Por lo pronto, hoy no tomes ninguna decisión importante. Espera a sentirte mejor.
Recuerda: Si hoy te levantas con el pie izquierdo, no le des demasiada importancia, a menos que ya sumes muchos días en este estado. En ese caso, habría que estudiar la situación y buscar otras soluciones.