8 Señales de problemas en tu relación

¿Cómo saber si a él o ella se le está acabando el amor?
A menudo escuchamos a las personas usar frases como “Se me acabo el amor” o “Me desenamore“. ¿Qué significan esas frases? Desenamorarse puede definirse como un estado o condición en el que los sentimientos de amor y emoción que alguien siente por otro y otra se pierden o disminuyen. En pocas palabras es un estado en el que no sientes o reacciones a tu pareja de la misma manera que antes. Se dice que si uno puede enamorarse, también puede desenamorarse.
Muchas veces, después de un tiempo, el amor se pierde en la pareja. A veces las parejas eligen continuar juntos, aun sin amor, para no sentirse solos o desamparados. Algunas de las razones para sentir esto podrían ser la dependencia financiera, los hijos, la sociedad, la religión, etc. Mientras que algunos pueden intentar revivir el amor y la pasión de la relación, otros optan por liberarse de ella porque no quieren vivir un vida pretendiendo. Cualquiera de los dos miembros de la pareja puede desenamorarse. Es bastante natural que la atracción entre la pareja disminuya con el tiempo, sin embargo, si identificas las señales de advertencia, podrías poder remediar la situacion.
¿Cómo saber que ya no amas a tu novio o novia?

Estas son 8 señales que te pueden indicar que hay problemas en la relación.

1. Encontrarte con tu pareja ya no te emociona

Pasar el tiempo a solas con tu pareja o de vacaciones ya no te emociona. No esperas que llegue el momento de salir con tu novio o novia. Prefieres pasar el tiempo con tus amigos que con tu pareja. Puedes cancelar las citas simplemente porque no tienes ganas. Si amaras a tu pareja, ciertamente te harías tiempo para ella pero si prefieres los mensajes a las llamadas de voz, puede que te hayas desenamorado.

2. La idea de la intimidad te estremece

Sentir desapego emocional hacia tu media naranja es una señal clara de que ya no sientes lo mismo. Cuando te sientes mentalmente distante de tu pareja, es natural que también quieras alejarte físicamente. Incluso podrías no sentirte cómoda con sus demostraciones de cariño.

3. La infidelidad no es algo negativo

Puede que de pronto hayas comenzado a interesarte en otras personas. Cuando ya no encuentras emoción en tu pareja, es posible que estés lista o listo para buscar entretención en otra parte. Podría que no te importe flirtear con otros o incluso cruzar algunos limites a espaldas de la otra persona.

4. Tus prioridades han cambiado

Podrías sentir más interés en pasar tiempo con tus amigos o hacer otras actividades que pasar tiempo con tu novia o novio.

5. Eres feliz con la soltería y la libertad

Cuando estas enamorada, quieres que los demás lo sepan. Si al cabo de unos años aun piensas o hablas de ambos en términos de tú y yo, quiere decir que no los ves como pareja. Incluso podría ser que ni siquiera hayas presentado a tu media naranja a tus amigos cercanos.

6. No te importa

Puede que no odies a tu pareja, pero te has vuelto indiferente. Ya no te interesa nada de lo que pasa en tu relación. Ni siquiera sientes que debes hacer el esfuerzo para arreglar la situacion. Nada acerca del otro te interesa. Incluso puedes que hayas perdido el respeto y no consideres ni sus opiniones como algo que valga la pena.

7. Te vuelves muy crítico con ella o el

Encuentras detalles negativos en tu pareja. Te sientes avergonzada/o irritado/a. Las características que antes amabas, ya no te impresionan. Pelean hasta por lo más mínimo. Tu comportamiento puede ser también porque no tienes el coraje de terminar la relación y estas esperando a que el otro lo haga.

8. Él o ella es tu plan B

Esperas tener al otro hasta que encuentres una mejor persona para ti. Puede que te hayas involucrado en la relación por soledad o conveniencia. En el caso de que no encuentres a alguien interesante, sabes que siempre esta ahí para ti. Debes recordar que a nadie le gusta ser el premio de consuelo y que le estás haciendo daño al otro de esta manera.
En algunos casos es posible recuperar la relación trabajando en tus debilidades. Si es que no hay esperanza, es mejor terminar y seguir adelante con la vida. A menudo, antes de que las señales nombradas anteriormente aparezcan, te puedes encontrar con advertencias que envía tu mente. La intuición raramente se equivoca en estos casos.

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