0]ize=24]Empieza ya[/size]“Aquello que puedes hacer o sueñas que puedes hacer, debes comenzarlo. La osadía lleva en sí, genio, poder y magia”. Goethe
Todos los libros sobre productividad pueden resumirse en 10 palabras: Una cosa por vez. La más importante primero. Empieza ya.
Y esa es la parte más difícil: empezar. Para que un cohete despegue, se necesita una gran cantidad de energía, pero una vez que el cohete ha despegado y alcanza una altura suficiente, la cantidad de energía necesaria para que continúe subiendo es mucho menor. Después de empezar, se produce un efecto dominó, una reacción en cadena que ocurre cuando un pequeña acción causa otra acción, la cual a su vez causa otra acción, y así sucesivamente.
¿Qué nos detiene? El perfeccionismo, el miedo a hacerlo mal, la apatía, el miedo a la crítica de los demás, etc., escondidos bajo excusas que parecen razonables como: “no tengo recursos, es demasiado tarde, no tengo tiempo, soy demasiado viejo, etc.“
En lugar de enfocarnos en las excusas de por qué no podemos, ¿por qué no empezar ya?
Podrías objetar: “pero la meta es tan grande, ¿por dónde empiezo?” Respuesta: simplemente empieza. Hasta el camino más largo comienza con un sólo paso.
Si quieres empezar a hacer ejercicio, muévete ya, si quieres empezar a aprender un idioma, empieza por buscar una palabra en el diccionario, si quieres tener tu casa organizada, dedica tan sólo 3 minutos a ordenar ya.
Cuando estás comenzando un proyecto o comenzando a aprender algo, debes bajar tus estándares. No se supone que seas bueno al principio, incluso podrías esperar ser malo. Los primeros pasos se supone que sean pequeños y manejables. Eso es lo que hace posible hacerlos. “Escribir un libro” o “ser un buen fotógrafo” no es un paso pequeño, manejable. Es una meta grande. Si quieres llegar allí alguna vez, tus primeros pasos tienen que ser algo como “una página mala por día” o “10 fotos malas por semana”. Puedes subir tus estándares más adelante, cuando tengas la experiencia necesaria para estar a la altura de ellos.
El secreto para avanzar es comenzar. El secreto para comenzar es dividir las tareas abrumadoras en pequeñas tareas manejables, y luego comenzar por la primera.
Y no te sientas mal por haber hecho demasiado poco, hasta ayer no habías hecho nada, así que felicítate por lo que sea que hiciste.
Nunca es demasiado tarde. ¡Empieza ya!
Fuente:
http://realizacionpersonal.wordpress.com/2011/04/12/empieza-ya/