Amarres de Amor con Magia Blanca
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.


Amarres de Amor, Hechizos, recuperación de pareja
 
ÍndiceBuscarPublicacionesRegistrarseConectarse
Los errores ajenos Testim15
Últimos temas
» El baile de los 41 maricones y otros relatos .-
Los errores ajenos Icon_minitimepor gerundio Ayer a las 11:56

» Nunca ruegues amor
Los errores ajenos Icon_minitimepor Guerrero creador Lun Jul 01 2024, 20:01

» VUELVE AL ORIGEN / Película de BROSSAH LEYTON
Los errores ajenos Icon_minitimepor Guerrero creador Vie Jun 07 2024, 16:12

» el sentido de la vida
Los errores ajenos Icon_minitimepor javi Vie Mar 15 2024, 12:32

» Felices fiestas a todos
Los errores ajenos Icon_minitimepor LyK_ Miér Ene 03 2024, 10:44

» La Universidad de Exeter (Reino Unido) ofrece una Maestría en Magia y Ciencias Ocultas
Los errores ajenos Icon_minitimepor Guerrero creador Dom Oct 15 2023, 14:17

» El Verdadero Poder de la SOLEDAD
Los errores ajenos Icon_minitimepor Guerrero creador Dom Ago 20 2023, 17:11

» Pedir perdon
Los errores ajenos Icon_minitimepor Guerrero creador Miér Ago 09 2023, 17:56

» El sexo en las relaciones
Los errores ajenos Icon_minitimepor javi Miér Jul 26 2023, 11:41

» Demostraciones de Amor
Los errores ajenos Icon_minitimepor javi Miér Jul 26 2023, 11:39

» La comunicación
Los errores ajenos Icon_minitimepor javi Miér Jul 26 2023, 11:38

» Relación con uno mismo
Los errores ajenos Icon_minitimepor javi Miér Jul 26 2023, 11:37

 

 Los errores ajenos

Ir abajo 
AutorMensaje
Nemesis
CO-CREADOR@
CO-CREADOR@
Nemesis


Desde : 09/01/2009
He aportado : 24878

Los errores ajenos Empty
MensajeTema: Los errores ajenos   Los errores ajenos Icon_minitimeLun Mar 17 2014, 03:32

La discusión, la pelea y el señalamiento de errores ajenos -por el mero gusto de decirle al otro que se equivocó-, es una práctica muy difundida que goza de excelente salud en todos los niveles de la vida social. No importa de quien se trate, ni cuál sea la falla, el asunto es poner el dedo en el ventilador de los yerros y que el viento se encargue de repartirlos para todos lados. Yerros... ajenos, por supuesto. Cuando se trata de los propios no hay nada mejor que el silencio. 0 el olvido.

Pero, ¿dónde nace tanta pasión perfeccionista? ¿Se pone el mismo énfasis para corregir, reparar, salvar situaciones ajenas, que en asumir y modificar las propias? ¿Qué sucede con la comprensión? ¿Y con nuestra capacidad para escuchar? Salimos corriendo a gritar errores ajenos para ser los primeros en llegar a la base de la perfección. ¿Desde qué modelo de excelencia?

No se trata de disimular dislates, ignorarlos, encubrirlos. Ni esconderlos. Como en tantos otros temas, el asunto camina por los senderos de la sinceridad y del respeto. Cualquier disputa necesita por lo menos dos partes en confrontación. Si, además de pensar en los intereses propios, se consideran también los del otro, o de los otros, nos ahorraríamos larguísimas polémicas que lo único que dejan es hartazgo. ¿No se cansa la gente de pelearse? Seguro que sí.

Desde la vieja rivalidad familiar que arrastra indiferencia, inquina o rancios rencores remotos, porque diez generaciones atrás un Capuleto se enojó con un Montesco, entonces por los años de los años del siempre jamás los unos vivirán distanciados de los otros, incriminándose, culpándose, atacándose. 0 en el mejor de los casos, ignorándose. La pregunta es: ¿con qué objeto? Y la otra cuestión: ¿hasta cuándo?

Las equivocaciones también tienen un aspecto constructivo. Si se lo busca... se encuentra. Ese aspecto del error es precisamente el trampolín perfecto hacia el conocimiento, un camino de piedras, a veces blandas, a veces duras, compactas, inquebrantables como el acero, que permite saltar el río de los incordios hasta las costas de la sabiduría, o por lo menos llegar a las orillas del crecimiento.

Desde el funcionario más encumbrado hasta el vecino de la esquina, desde aquel que ejerce cierta autoridad hasta el último de los dependientes, no son pocos quienes tienden a ponerse vestiduras de falsos custodios de purezas falsas. Y gozan con sincero placer cuando dan en el blanco del error ajeno. Me pregunto cómo sería la vida si esa misma energía se empleara en favor del crecimiento, de la prosperidad, del talento. Tal vez, un poco más tranquila, un poco más cordial, un poco más sabia. No sería poca cosa esa mejora.

Señalar errores, incitar a la polémica, destacar la luz sólo para remarcar las sombras, lejos de ser una actitud de elevación, de desarrollo, de progreso, resulta una muestra de incertidumbre, mezquindad y soberbia. Todo depende de la voluntad de enseñar. 0 de destruir. Los humanos gozamos del privilegio de nuestra inteligencia. La historia de la humanidad ofrece sobradas muestras acerca de que no siempre la usamos para bien. Algunos no siempre la usan. Otros, simplemente no.

Cuando lo que importa es la polémica por la discusión misma, sin otra intención que confrontar, lo que se consigue es rebajar la calidad de vida. Discutir es mucho más que estar en desacuerdo. Discutir es desmenuzar, abarcar todos los aspectos de un tema, o de una situación, para comprenderla, y desde ese entendimiento, lograr una mejor posición para todas las partes en conflicto. De otro modo, será un intento de pasar el tiempo, de disimular vaya uno a saber qué situaciones, de alardear de un dato más, una información menos. 0 cualquier otra cosa, menos discusión. Si las disputas dejan de lado su aspecto constructivo sólo para mostrar que el tonto es el otro, y uno es el verdadero dueño de las verdades verdaderas, sería un discurso tal vez impecable, pero completamente inútil, ¿no le parece?

http://www.superacion-personal.net/pa62.html
Volver arriba Ir abajo
 
Los errores ajenos
Volver arriba 
Página 1 de 1.
 Temas similares
-
» Los errores ajenos
» Los errores ajenos
» Dramas ajenos
» Dramas ajenos
» Tiempos ajenos

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
Amarres de Amor con Magia Blanca :: AUTOAYUDA, MOTIVACIÓN, LEY DE ATRACCIÓN, RELACIONES :: SUPERACION PERSONAL, AUTOAYUDA Y LEY DE ATRACCIÓN-
Cambiar a: