Por qué se aparecen los difuntos en tus sueños

Por Meredith Smith
Es el momento de dar voz a los que están dotados con las visitas de los recién fallecidos mientras duermen. Estos soñadores están dejando atrás su silencio para compartir experiencias sobre sus sueños de fantasmas terrenales y espíritus efervescentes que ven persistentemente entre el tercer y cuarto plano astral que se asemejan a los destellos de las partículas de luz que aparecen y desaparecen ante tus ojos.
En los últimos años, los soñadores están despertando de sus sueños de conversaciones que se están compartiendo con las personas que fallecieron recientemente. Los que recuerdan sus sueños están descubriendo que pueden traer el conocimiento de estos encuentros que contienen información muy necesaria sobre el mundo físico, nuestros conocidos, sobre nosotros, la vida futura, y las imágenes de todos los reinos.
Soñadores, o viajeros de la noche, tienen la capacidad cada noche de volver a estos reinos dimensionales reconocibles para nuestras almas, para obtener información de las personas que han fallecido y se encuentran en el otro lado. Estos increíbles recorridos nocturnos le suceden a todo el que se acuesta a dormir. Sin embargo, algunas personas tienen dificultades para recordar sus encuentros casuales con los muertos.
Soñadores que no pueden recordar sus sueños al despertar, pueden no estar permitiendo recibir estos mensajes; en algún lugar dentro de ellos hay un bloqueo, de su pasado o presente, y debido a este bloque eliminan la fe en la posibilidad de que ellos también saludan a los muertos cuando sueñan. Es fácil hacer caso omiso de las visitas de un espíritu, prefiriendo verlas como una representación simbólica de un aspecto particular de uno mismo. Aunque esta puede ser una verdadera interpretación para explorar, con mayor frecuencia cuando los muertos se le aparecen a un soñador, está experimentando una visita de una guía, un espíritu, o un ser querido ha fallecido. ¿Por qué recibimos visitas de los muertos, tanto conocidos como desconocidos?
Para la mayoría de los soñadores una visita aparece por una o dos razones:
Alguien que el soñador conoce (un familiar, amigo, ser querido, o familiar lejano) quien recientemente murió es un alma que acaba de fallecer y él / ella necesita la orientación del soñador para la transición de lo físico al más allá, además de necesitar tranquilidad sobre su muerte física.
El soñador está en la necesidad de orientación, protección, o consuelo – un espíritu, familiar o no, aparecerá con un mensaje, o con amor y consuelo para el soñador, aunque el soñador se haya dado cuenta de que él / ella solicitó la asistencia o no.
Lo bello de este tipo de visitas es que ofrecen mensajes y consuelo en el momento de mayor necesidad, ya sea para el soñador o para la persona que ha dejado atrás su forma física. Hay consuelo en saber que cuando un soñador carece de orientación o cariño, es posible llamar inconscientemente a un ser querido fallecido para pedirles que les den asistencia, luz, y amor.

De vez en cuando los muertos se aparecen en sueños de forma inesperada y por razones que pueden parecer confusas al principio. Algunos espíritus transmitirán un mensaje, apoyo u orientación clara para el soñador; otras veces los espíritus crean un rompecabezas místico que el soñador debe reconstruir en un curso de varias visitas para traducir el mensaje comunicado. Si el soñador está consciente de que los difuntos tienen la capacidad de aparecer en los sueños, el un soñador estará más preparado para observar maneras de recibir y decodificar los mensajes. Con sólo saber que debe de tener conciencia y aceptación, un soñador puede mejorar sus habilidades para estar disponibles para aquellos espíritus que necesitan su ayuda.
¿Qué son los espíritus atados a tierra y por qué siguen aquí?
Los espíritus atados a tierra, o fantasmas, son los que han muerto pero siguen aquí, rondando o persistiendo, ya sea en el lugar en el que murieron o con los seres queridos que dejaron atrás. Algunos espíritus atados a tierra se unen a un elemento material que los conecta con su vida física, sin poder dejar al mundo terrenal, y son sus energías estancadas impresas en el objeto que ilumina su presencia vibracional inferior. Estos son los muertos que se detienen entre la tercera y cuarta dimensión perdiendo su camino al más allá.
Muchos espíritus atados a tierra siguen presentes, ya que todavía están unidos a la realidad física:
Necesitan una resolución de algo o de alguien de su reciente vida física.
Sienten que necesitan el perdón antes de que se les permita seguir adelante.
Están muy atados a su vida material (no pueden llevársela con ellos al más allá).
No importa la razón, los espíritus atados a tierra no pueden despegarse de este mundo para poder avanzar hacia el más allá. Es importante señalar aquí que los espíritus atados a la tierra son diferentes de los espíritus que han pasado al más allá.
Los espíritus que han muerto pero se aparecen en tus sueños, lo hacen porque:
Tienen un mensaje que ofrecerte.
Quieren demostrarte que hay vida después de la muerte.
Algunas almas vuelven como guías espirituales del soñador.
Toma nota de las diferencias: Los espíritus que vuelven después de cruzar a la otra vida tienen una hermosa y radiante frecuencia vibratoria llena de un campo energético de amor y luz que les rodea y está dentro de ellos. Los espíritus atados a la tierra por lo general tienen una frecuencia vibratoria baja y dejan huellas de sus energías tras conectar con las personas, lugares y objetos. Muchos de estos espíritus atados a la tierra se convierten en fantasmas del pasado que se alimentan de la energía de las personas, hogares y lugares para sobrevivir en espíritu y no se desvanecen.

Un soñador sabrá qué tipo de espíritu ha llegado a su mundo de ensueño por su forma de sentir la presencia del espíritu. Si el soñador se siente lleno de consuelo, luz luminosa, sin ansiedad y con una sensación de paz, están en la presencia de un espíritu de vibración más alta que ha cruzado y vuelto. Si el soñador se siente deprimido, con baja energía, con un poco de ansiedad, incómodo, con miedo o cautela, con una sensación de oscuridad o luz baja a su alrededor, entonces el soñador ha encontrado un espíritu atado a la tierra. No hay necesidad de tener miedo; es importante para el soñador permanecer en su propia frecuencia de vibración positiva y decir: “Tú no estás invitado en mi espacio. Por favor, aléjate de mi campo energético. Te pido que te alejes con amor y luz. Gracias.” Mientras el soñador permanece en control, no tiene miedo, y no le da su poder o energía al espíritu atado a la tierra, no se apegará a él. La mayoría de los espíritus que están atrapados y persisten entre dimensiones están buscando ayuda para seguir adelante. Ellos están en necesidad de algún tipo de asistencia.
Consejo: Si los muertos te visitan en tus sueños, dales la bienvenida desde un lugar de amor en lugar de sentir miedo de su presencia. Pregúntales por qué han aparecido. Debes estar preparado para recibir un mensaje o petición de ayuda. Mantén la calma y la mente abierta a lo que tienen que decirte o mostrarte.
Existe la posibilidad de que cuando los muertos visitan son una imagen simbólica que representa una faceta del soñador:
Los espíritus que aparecen en un sueño pueden simbolizar un aspecto del soñador. Pueden aparecer representando a un elemento oculto del soñador que ha perdido u olvidado y ahora necesita de nuevo para su propio crecimiento personal y su sanación. Los muertos también pueden aparecer como una representación simbólica de poderes desconocidos que le ofrecen al soñador creatividad e inspiración.
Consejo: Acércate más a tu sueño y ve las características de este espíritu. Después, trata de conectar los puntos de cómo estos atributos pueden alimentar a tu cuerpo, mente y alma.

Cuando regresa un ser querido que ha fallecido, esto simboliza los deseos del soñador para volver a conectar con las cualidades que representa esa persona para el soñador. También puede simbolizar una necesidad para el cariño y la fuerza de la persona que ha fallecido. Además, también puede iluminar un recuerdo del pasado o proporcionar una ofrenda del futuro para que el soñador pueda sanar en el presente.