Uno de los dones más grandes que les puedes dar a tus hijos es enseñarles a valerse por ellos mismos.
¡Qué difícil, pero qué importante soltar el control absoluto y dejar que ellos tomen sus propias decisiones! Se pueden equivocar. Tal vez sufran. Sobre todo, aprenderán a no necesitar que tú resuelvas todos sus problemas. Y eso duele, porque como padres nos gusta identificarnos como la respuesta a todas las preguntas.
Desde su nacimiento, es la naturaleza de los hijos irse desprendiendo de nosotros poco a poquito. Pero la independencia se enseña. Se practica. Se desarrolla.
¿Cómo puedes fomentar el desarrollo de la independencia en tus hijos?
Prepara el terreno. En un ambiente seguro, ellos pueden ir tomando pequeñas decisiones, y asumiendo consecuencias. Por ejemplo, deja que tus hijos escojan lo que se ponen para ir a la escuela, ayudándoles al principio a fijarse en el clima.
Dales a tus hijos responsabilidades en casa. Escoge tareas aptas para su edad: dar de comer a la mascota, limpiar su cuarto, cuidar al hermanito. Nadie más debe asumir estas obligaciones. El hábito de cumplir es una habilidad necesaria para ser independiente.
Supervisa, pero mantente al margen. Si vas a dejar que tu hijo vaya caminando solo a la casa del amigo, sal a verlo pero no lo acompañes. Tu presencia debe irse desvaneciendo conforme vaya creciendo la habilidad de tu hijo de hacer las cosas sin ayuda.
En lugares públicos, invita a tus hijos a tomar la iniciativa. Que ellos entren al correo a comprar timbres o mandar un paquete. En un restorán, que ellos pidan la comida. En el banco, que depositen su dinero en su propia cuenta. Que ellos saquen sus propios libros en la biblioteca.
No tengas la costumbre de rehacer las cosas. Si tú vuelves a arreglar la recámara de tu hijo, o constantemente corriges la tarea de la escuela, el mensaje es claro: "No puedes sin mí." Deja que tus hijos tengan sus propias experiencias aunque los resultados no sean perfectos.
Deja que tus hijos experimenten para tener aciertos. Fomenta la seguridad personal de tus hijos animándoles a conocer a personas y lugares nuevos, siempre en un ambiente sano. Invítalos a probar un nuevo deporte, a visitar un lugar desconocido, a hacer un nuevo amigo.
Independízate tú. Ten tus propios intereses, tus propios amigos, y tu identidad propia. Si tú no eres más que "la mamá de…", urge que logres tu propia independencia. No hagas una relación de codependencia con tus hijos.
http://hijos.about.com/od/Paternidad/a/Criando-A-Hijos-Independientes.htm