Según la medicina tradicional china, tu energía vital circula constantemente por la “órbita microcósmica”, un circuito que recorre todo tu organismo. A veces esta energía es libre y abundante, y a veces fluye con mucho menos intensidad, hasta ser tan sólo unas gotitas, como cuando te encuentras enfermo o falto de energía vital.
El circuito de la órbita microcósmica se forma cuando el embrión se encuentra en el útero materno. Tiene un “canal posterior” (energía masculina, yang), que comienza en el perineo, pasa por el coxis y sube por la columna vertebral, hasta llegar a la coronilla. Luego, desciende por la frente y la nariz, hasta llegar al labio superior. El “canal anterior” (energía femenina, yin) empieza en la parte superior del paladar y la punta de la lengua, y baja por la garganta y a lo largo de línea media del cuerpo, pasando por el pubis hasta llegar al perineo.
La meditación de la órbita microcósmica es una técnica perteneciente a las prácticas taoístas. Su objetivo es refinar la energía vital o chi que recorre tu cuerpo, armonizar las energías masculinas y femeninas, y generar salud y vitalidad. Como todo ejercicio de meditación, permite lograr un estado de quietud en el cuerpo, las emociones y los pensamientos, así como una experiencia de gozo y unión con todo. La característica distintiva de las prácticas taoístas, es que logran esta quietud y bienestar interior enfocando la mente en la circulación del chi por el cuerpo.
Por el recorrido de la órbita microcósmica se encuentran algunos centros de energía. Muchas veces no se trata de puntos específicos, sino de zonas. Mientras lees, intenta visualizar estos centros que se encuentran dentro de tu columna vertebral o bajo tu piel, a unos dos o cuatro centímetros de profundidad. Así, se te facilitará después hacer circular la energía por todo este circuito, aunque no es imprescindible que sepas con exactitud donde está ubicado cada centro para obtener los beneficios de esta práctica.
Centros del canal posterior
1. Perineo: zona muscular ubicada entre la vagina/testículos y el ano.
2. Coxis y sacro: últimas vértebras de la columna vertebral.
3. "Puerta de la vida": zona de los riñones, situado en la columna a la altura del ombligo.
4. Centro de la mitad de la columna: se encuentra a la altura de la 11ª vértebra dorsal, frente al plexo solar. Es la zona de las glándulas adrenales.
5. Centro dorsal del pecho: ubicado entre la 5ª y 6ª vértebras dorsales, a la altura del pecho.
6. Base del cuello: donde está la vértebra cervical 7, ese hueso prominente que une el cuello con la parte superior de la espalda.
7. "Almohada de jade": este centro está en la nuca, donde hay una hendidura natural en la base del cráneo.
8. Coronilla: situado en la parte superior de la cabeza, es la zona de la glándula pineal.
9. "Palacio de cristal": ubicado entre las cejas, es la zona de la glándula pituitaria (hipófisis).
Centros del canal anterior
1. Garganta: a la altura de la base del cuello, donde hay un entrante en el centro de la garganta.
2. Corazón: en el centro del pecho, es la zona del corazón y la glándula timo.
3. Plexo solar: este centro está un poco más abajo del esternón, ese hueso que se encuentra en la parte anterior del tórax y donde articulan las costillas.
4. Ombligo: situado detrás del ombligo.
5. "Palacio ovárico/testículos": este centro está ubicado en las mujeres en los ovarios y en los hombres en los testículos.
6. Perineo: el canal anterior llega nuevamente hasta la zona del perineo, entre la vagina/testículos y el ano.
Meditación básica de la órbita microcósmica
1. Piensa en una experiencia o imagen agradable y sonríe internamente. Visualiza tus ovarios/testículos y envíales pensamientos positivos. Siente cómo la energía se mueve en tus órganos sexuales, hasta llegar al perineo.
2. Aprieta tus músculos pélvicos, halándolos hacia arriba, para impulsar la energía en sentido ascendente. Siente – desde adentro – como tu energía vital pasa por tu coxis y columna vertebral hasta llegar a la coronilla.
3. Toca tu paladar con la lengua, mientras visualizas la energía descendiendo como una suave cascada por tu nariz, garganta y pecho hasta alcanzar la zona del ombligo.
4. Repite el circuito unas siete veces. Finalmente, deja que la energía sea almacenada detrás del ombligo, haciendo movimientos en espiral sobre esta zona.
Beneficios de realizar la órbita microcósmica
Al hacer circular conscientemente tu energía vital por la órbita microcósmica lograrás los siguientes beneficios:
Aumento de tu vitalidad y energía sexual. Mejora tu salud al circular la energía libremente por todos tus órganos y sistemas.
Desbloqueo de la energía que se haya detenido o atascado en algún centro, para que fluya naturalmente por todo el circuito. Por ejemplo, permite vaciar el cerebro de los pensamientos obsesivos que se repiten una y otra vez, como la autocrítica. Al vaciar el cerebro se llena de chi y la mente alcanza claridad y paz.
Al circular la energía libremente, pueden expresarse las cualidades específicas de cada centro. Por ejemplo, al abrirse el centro corazón, podrás recibir y dar amor con más facilidad. Al fluir la energía en los centros sexuales (ovarios/testículos, perineo, coxis) tendrás más capacidad para sentir placer y entregarte libremente a la experiencia orgásmica.
Cuanto más practiques la órbita microcósmica, más profundo se hará el cauce de este circuito energético, y te resultará más fácil movilizar y controlar la energía vital que recorre todo tu organismo.
Fuentes:
Chia, M. y Carlton A., R. (2006). La mujer multiorgásmica.